El miedo de Bruno

Prólogo

Bruno le tiene miedo a muchas cosas, entre ellas, David.

Porque si tuviera que describirlo en una sola palabra, sería eso. Miedo.

Y no es que él fuera mala gente o que hiciera cosas cuestionables, sino al contrario. Siente que David es demasiado buena persona para este mundo.

El problema aquí, por supuesto, es que cada vez que lo ve, le entra tanto miedo.

A que sus pies empiezan a temblar y siente que su corazón va a salirse de su pecho en cualquier momento.

Sus manos y pies sudan hasta ya no más y sin, al parecer, razón aparente; y luego busca de forma desesperada un lugar cual esconderse.

Y ni hablemos de cómo se pone cuando David le regala una sonrisa dulce o cuando lo saluda todas las mañanas, en días de escuela; que su cara se pone tan roja.

Así que sí, que es más que obvio que el problema aquí es que le tiene un miedo inexplicable a David.

O por lo menos eso es lo que cree el pobre e ingenuo Bruno.