CAPITULO 44 ¿VERDAD?

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Narra Natalia

Son las cuatro de la mañana aquí sigo despierta como un puto búho, desde lo que paso no duermo bien, pero tan poco quiero abusar de medicamentos y tan poco preocupar a este bebe enanismo que duerme a mí lado.

Después de acabar derrotada por la sesión de amor que nos dimos, mi cabeza igual se arrepintió y se precipitó en pensar en casarnos así.

No sé pero quiero hacerlo, debo hacerlo, porque quiero despertar con ella siempre.

Dejé de mirar el móvil e intenté cerrar ojos y abrazarme a ella, que con su mano entrelazó a la mía.

PISO DE LAS CHICAS

Narra Marta

Ha sido una puta mierda de noche, después de discutir con María me arrepiento de ir a esa fiesta sin aclarar lo nuestro, me da vértigo la palabra nuestro, es muy loco, me gusta muchísimo, el experimentar la sensación de sentimiento esto es increíble. Llegue y la vi allí en sofá echa un desastre, las cajas de pizza por la mesa unas cuantas cervezas, y no deje de mirarla, es un ángel cuando duerme, suspiré y me fui a la habitación, a mí habitación sola.

Narra Sabela

Despierto a eso de las siete de la mañana miro mi móvil, cinco llamadas de David y tres de Julia y un buen mensaje de Julia.

Perdóname, perdóname que permitiera que te fueras así de mi piso, te juro que tiene una explicación y no es la de que no confío en ti, no es trola pero por favor, necesito verte, te espero a las ocho en la cafetería de enfrente del colegio. No me falles. Besos. JULIA.

Narra María

Joder no sé quién estaba haciendo ruido con las ventanas del salón pero no me iba a cagar en todo, cuando abrí los ojos y estaba allí, era Marta.

Marta: Te puedes levantar

María: Marta hoy no curro así que déjame dormir

Marta: Para dormir se va a la cama

María: Buena idea

Me levanté del sofá en dirección.

Marta: María

María: ¿Qué?

Marta: Hoy tengo el día libre, y si te das una ducha y nos vamos por ahí

María: ¿Solas?

Marta: Claro

María: Vale voy a la ducha

Me sonrió, y yo sonríe por dentro aunque me moría de sueño.

EN LA CAFETERIA

En la cafetería, Julia espera a Sabela mientras mueve su café, mira el reloj.

Cuando la ve entrar, se levanta para saludar.

Julia: Hola, pensé que no vendrías

Sabela: Te dije que estaría

Julia: Ya, no sé llegas un poco tarde.

Sabela: David me llamo y me entretuve pero ya estoy aquí, perdone un café con leche y cruasán.

Julia: ¿Cómo estás?

Sabela: Bien, ¿y tú?

Julia: Rara, y mal

Sabela: ¿Pero te duele algo?

Julia: No nada, Sabela lo siento ayer tú fuiste así de esa manera…

ESTE AMOR NADIE LO TOCADonde viven las historias. Descúbrelo ahora