CAPITULO 23 EL PRIMER DÍA

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Narra Alba

Me desperté sin despertador, mire el reloj, eran las siete en quince minutos sonaría, me gire hacia mi derecha y allí estaba ella, mi morena, mi gatito, ella también trabajaba, así que quise jugar, me acerque hacia ella y comencé a darle besitos suaves por su bella cara y su boca, ella gruñía una y dos veces.

Alba: Despierta.

Le susurre ella abrió un de sus ojos.

Natalia: Es demasiado pronto.

Alba: Lo sé, pero quería que supieras que me iba a levantar y despedirme.

Natalia: ¡Vale!

Alba: Oye.

Natalia: ¿Dime?

Alba: Te quiero.

Ella abrió los dos ojos y miro hacia mí y sonrió.

Natalia: Quiero despertarme así siempre, ¿Vale?

Alba: Prometido.

Me acerque y deje un breve beso en sus labios, me levante de la cama, y mire el armario de arriba abajo, ante la atenta mirada de Natalia, yo gruñía mucho.

Natalia: (Gruñía) Me molesta la luz.

Alba: Jolín, ¿no sé que ponerme?

Natalia: Ves a mi armario a ver si te apetece ponerte algo mio.

Alba: ¿Me dejas?

Natalia: Hombre claro, así das por saco a Martuka.

Alba: Bicho.(saca su lengua en forma de burla)

Salí de la habitación hacia la habitación de Martuka, ella ya estaba despierta tecleando el móvil.

Entre le comente lo que me había dicho Natalia, mientras ella se hacia la remolona en la cama dando vueltas.

Yo fui a ducharme, cuando ya estuve fui hacia la cocina, María y Natalia estaba sentadas, Natalia me miro de arriba abajo.

Alba: ¿Lo  he cogido no te importa?

Natalia: ¡Madre mía! ¿Hoy es tu primer día de trabajo?

Alba: Si tonta.

Natalia: Que peligro tienes Albita. (Le guiña el ojo)

Alba: Solo es un vestido gris sencillo nada mas, ¿voy muy…?

María: Alba tu ya eres muy… de todos los adjetivos que quieras decir...

Natalia: ¿Quieres una tostada? (Se levanto de la silla)

Alba: Ya lo voy hacer.

Natalia: Toma comete la mía, lleva lo que te gusta, yo me la voy haciendo, no quiero que llegues el primer día tarde.

Me mordí el labio, dios, amo esta mujer tanto.

Entro Marta a la cocina.

Marta: ¡Buenos días! Hola leonas.

Refiriéndose a Natalia y a mí.

Natalia: ¿Qué bicho te ha picado?

Marta: Buenos días guapa. (Le dio un beso a María en la mejilla, se puso un poco nerviosa y se cayó un trozo de tostada en el plato)

ESTE AMOR NADIE LO TOCADonde viven las historias. Descúbrelo ahora