Me moví lentamente, sintiendo una oleada de dolor que nacía en la nuca y descendía con una fuerza abrumadora por mi columna.
Parpadeé varias veces, esforzándome por disipar la bruma mental y visual que me invadían... ¿Qué había pasado? ¿Dónde estaba? Mordiéndome el labio inferior para no soltar sonido alguno, me incorporé hasta quedar sentada. El corazón se me comprimió en el pecho de manera abrumadora al tiempo que la respiración se me aceleraba frenéticamente.
Estaba en una jaula.
Una jaula exactamente del mismo tamaño que la del sótano.
¿Por qué?, mi mente continuaba brumosa, podía recordar sensaciones, sonidos y algunas imágenes sueltas; pero no conseguía unirlas de una manera lógica. Me puse de pie y trastabillé varias veces antes de que mis piernas consiguieran sostener mi peso correctamente, piensa ____, ¿Qué pasó? Lo sabes, sólo, ignora la jaula y recuerda.
Súbitamente, se oyó un grito que me heló la sangre con cada eco que produjo en la estancia, estaba cargado de una mezcla apabullante de sufrimiento y terror... mi pulso se elevó hasta las nubes, al tiempo que la ansiedad comenzaba a corroerme por dentro. Una voz en mi interior me reprendió por dejarme caer en ese estado... no podía paralizarme, no ahora, no cuando habían personas que me necesitaban.
¿Personas? Pero ¿Quiénes?, la pregunta hizo eco en mi mente... un dolor punzante me atravesó la nuca, y llevé la mano hacia el sitio, de alguna forma, no me sorprendió el hecho de encontrarme con una hinchazón importante en la zona, estaba casi segura de que alguien me había dado un buen golpe allí.
Moví mi mano hasta mi sien izquierda, y me paralicé al rozar el borde de un antifaz que no reconocí como el mío...
Y ese fue el clic que necesité para recordar todo lo que había sucedido, el caos que había sido esa misión y el horror...
Hace una hora y media...
Robin y yo entramos en la casa por medio de una ventana en la parte posterior de la casa, la planta baja estaba completamente a oscuras, y tan silenciosa que se podían oír nuestras respiraciones.
-Tenemos que ir al segundo piso-le murmuré a Robin-. Necesito ver si Wyatt y Sam están bien. Luego iremos al tercero.
-Ve por los mocosos-dijo él en voz baja-. Me adelantaré e iré al tercer piso.
De no ser porque sabía que sería inútil, le habría discutido para que me esperase, en cambio, asentí con la cabeza.
-No hagas nada imprudente hasta que te alcancé-le advertí.
El rodó los ojos antes de avanzar y perderse en la oscuridad densa del salón, por mi parte, cerré silenciosamente la ventana por la que habíamos entrado, antes de comenzar a moverme hacia el segundo piso. El hecho de que el antifaz de Damian tuviese visión nocturna me fue muy útil para leer los nombres en las puertas del segundo piso, eran por lo menos unas cinco, dos de cada lado del pasillo y una al fondo, todas tenían pizarras colgadas con nombres escritos en marcador... supuse que así ubicaban a los niños, y supe que estaba en lo correcto cuando leí el nombre de Wyatt en la primera puerta a la izquierda, sin embargo, los otros dos nombres habían sido tachados bruscamente...
Sin pensármelo dos veces, me apresuré a entrar. Sentí que se me estrujaba el corazón cuando vi lo que había al otro lado, las "camas" no eran más que colchonetas finas de yoga tiradas por el suelo, y de la pared, se podían ver fijadas cadenas gruesas. Me apresuré a acercarme al pequeño bulto ovillado sobre la única colchoneta ocupada, y no sé si sentí alivio o frustración al identificarlo como Wyatt. Lo moví suavemente para despertarlo, el niño se removió lentamente, y cuando acabó de abrir los ojos, pegó un respingo y se apretó contra la pared con cara de terror.
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Monkeying .vs. Robin (Damian Wayne y tú)
FanfictionAmbos tienen un pasado oscuro, y un futuro aparentemente prometedor. Damian Wayne es un chico nada fácil de tratar; pero ¿Cómo culparlo? Ha sido criado como un asesino. ____ es bastante simple, e intenta no causar problemas a los demás, su pasado l...