Capítulo 21.

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Our Secret.

Capítulo 21.

Chaz.

 Terminé de doblar las sábanas que estaban sobre mi cama el Jueves después de las 9:30am. El clima era un poco lluvioso, así que todos decidieron quedarse en el living mientras pringaba un poco. Vanessa estaba sentada en uno de los sillones, a un rincón de la habitación, con una sonrisa de mera felicidad, observándome acomodando mi cama. Grace seguía dormida desde las 7.00pm del día pasado, y Jules había salido a trotar desde las 5:00am aunque estaba pringando, lo cual hacía que la vibra no fuese muy buena.

 Pero eso no les afectaba en lo más mínimo a Matt, Nicolás, Jenna, Allison y Vanessa, ¿pero a mí? Sí, Jules se ponía como un desastre cuando discutían y era bastante evidente que habían discutido. Codd estaba feliz, porque lo que más deseaba era que ellos tuviesen problemas y todo ese rollo.

   —¿Estás bien, Chaz? —preguntó Vanessa de repente, cuando yo empezaba a ponerme serio.

   —Sí, claro —asentí, fingiendo una sonrisa.

   —Quiero que me digas a qué se debe este viaje así de pronto. Nunca le he caído bien a los Bing como para que me inviten a su casa en la playa, así que…¿Qué me trae aquí? —rodeó mi cuerpo con sus brazos.

   —No sé, Codd siempre suele sorprendernos —fue lo único que pude responder.

   —Chaz —dijo Vanessa, con un tono muy serio—. ¿Qué pasa contigo, eh? Cuando te me insinuabas y me invitabas a salir, actuabas como el chico más dulce en este lugar, y ahora que andamos, ¿Por qué me tratas así? —replicó, casi sentí el murmuro debajo de nosotros—. ¡No tienes mera diferencia con Harry! —medio gritó.

 Aquello último me enfadó como nada en el mundo, ¿Qué no tenía mera diferencia con Harry? Él la había golpeado y yo ni siquiera la había tratado mal, aunque sí, a veces actuaba de una forma muy seca aunque no tenía razón alguna. Tal vez solo era el clima o el lugar, aunque yo nunca me sentía bien del todo. Vanessa me brindaba mucha felicidad, pero tenía bastantes problemas como para sentirme bien y tratarla como quería, era como si algo dentro de mí nunca me permitía tratar bien a las personas que se comportaban bien conmigo.

   —Si quieres atención, puedes pedírmela directamente —me arrepentí apenas decirlo.

   —No quiero ninguna atención, ni siquiera me hace falta la atención —dijo con un tono tan suave, que me sorprendí.

 Pensé en todas las veces que Harry le había dicho algo semejante a lo que yo le había respondido en ese momento, ¿Me habría respondido ella así porque temía que yo me enfadara? Me imaginaba la rabia comiéndole el organismo a Vanessa, pero ella se tragaba sus palabrotas como respuestas porque quizá anteriormente ella le habría gritado a Harry y él habría terminado por golpearla. Me sentí tan mal, que tuve que mirar hacia la pared para que ella no viese mi rostro lleno de melancolía.

   —¿Por qué me hablas con dulzura? —pregunté, con una expresión absorta.

   —Porque eres mi novio Chaz —colocó sus manos sobre mis hombros—. Discúlpame por lo que dije, sé que no debí actuar así, sé que te ofendiste…

   —¡Yo fui el que te ofendió a ti! ¡Debías bofetearme, no pedirme disculpas! —me zafé de sus manos, comenzaba a notar lo destruida que estaba Vanessa por su relación con Harry—. ¿No tienes autoestima, acaso?

Our Secret. [Secrets #2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora