Especial 3 (namjoon)

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El día era nublado, había llovido durante toda la noche y había charcos que ensuciaban sus zapatos negros.

Namjoon caminó por el cementerio hacia la tumba de Seokjin, tal como lo había hecho estos dos últimos años en cada festividad.

Ese día portaba un elegante traje negro, camisa Blanca, corbata y lentes a pesar del nublado, su cabello era rubio casi blanco, en su mano llevaba un ramo de rosas blancas y rosas, ese era un día especial, seokjin estaría cumpliendo 23 años y no podía faltar.

Llegó  a la tumba y se mantuvo en pie observando, miró al cielo y después se puso en cuclillas, esparció lentamente las rosas por la tierra y sonrió.

- Feliz cumpleaños mi amor. - acarició la tierra sin dejar de sonreír con aquellos marcados hoyuelos que lo caracterizaban. - me hubiera encantado darte un buen regalo. Tú eras bastante generoso en ese aspecto, te extraño bastante. Sabes, acabo de entrar a la universidad, no quería hacerlo, pero recordé aquellas palabras tuyas diciéndome que no importaba si no continuaba estudiando justo al terminar la preparatoria, pero que debía pensar bien y después entrar . - rió- tu chico será un gran productor musical, te lo aseguro. Y espero donde quiera que estés me des toda esa fuerza para lograrlo,  voy a necesitar de tus buenas vibras amor.

Paso una muy agradable hora platicando con Jin, lloró, le dijo que lo amaba y después Se levantó para irse.

Tomó un taxi y se dirigió a casa de Jin. Tocó la puerta y el padre de los Kim le abrió.

- Namjoon - lo miro sorprendido- ¿qué te trae por acá? Estábamos por visitar la tumba de Seokjin,  ya que hoy...

- Lo sé, vengo de allí.

- Oh, ¿de verdad? Bueno, no te hemos visto desde el funeral.

Y era cierto, aquel día del funeral Namjoon se quedó hasta la noche llorando la muerte de Seokjin, rogando por que el tiempo regresara y así pudiera tener esos labios entre los suyos una vez más, y que en ese entonces se detuviera el tiempo para no estar separados un solo segundo y así poderlo besar en todo momento.

- Lamento no haber venido antes, la verdad es que regresar aquí es bastante doloroso. - mencionó Namjoon con una ligera sonrisa.

-Lo sé, se lo que de siente regresar después de tanto tiempo, es doloroso, sobre todo si uno de tus hijos... se fue odiandote

El padre de Seokjin había regresado a casa después de su muerte, algunos dijeron y reclamaron que aquel hombre solo regresó cuando su hijo ya no podía negarle la pasada, y era cierto pero también lo hacía por que el pequeño de la familia no tenía quien lo cuidara, y el lo haría desde entonces.

- ¡Namjoon Hyung! - el pequeño corrió hacia Namjoon y este se agachó para abrazarlo.

- ¿Donde había estado? Tengo juguetes nuevos, ¿quiere verlos?

Namjoon asintió y entró a la casa con el permiso del padre del pequeño, este último tomo la mano de Namjoon y lo jaló hasta su habitación. Al pasar por el pasillo de habitaciones Namjoon sintió un escalofrío extraño, estar en aquel lugar le traía tantos recuerdos, sobre todo al pasar por un lado de la habitación cerrada de Seokjin.

No pudo observar más pues el niño lo siguió jalando hasta que estuvieron dentro.

-Mire Hyung, este es el muñeco de Jin. El me lo regaló.

Namjoon abrió sus ojos al ver que era el muñeco favorito de Seokjin.

-¿Cuando hizo eso?

- Después de irse, soñé con el -dijo triste -me dijo que podía tener sus muñecos.

Namjoon sonrio de lado, no le creía del todo pero le gustaba que el pequeño tuviera esa idea, aunque el no lo sabía pero el pequeño no mentía. Seokjin había aparecido en uno de sus sueños cuando logró dormir después de una semana sin hacerlo del todo bien, sin comer y sin jugar, además gritaba cada noche frente a la habitación de Seokjin. Le decía que saliera que ya estaba harto de jugar a las escondidas, el pequeño quería a su Hyung de vuelta. Desde aquella vez que solo con Seokjin , el pequeño pudo dormir en paz.

Jugaron durante un buen rato hasta que anochecio.

- pequeño, debo irme. -le dijo después de terminar sus últimas peleas de muñecos. El pequeño bajo su mirada triste

-No Hyung, quédese, quédese para siempre. Viva conmigo- dijo con lágrimas en sus ojos, asombrado Namjoon abrio sus ojos y los sintió picar, por que se dio cuenta que el pequeño veía a Seokjin en el.

-No puedo - dijo con la voz quebrada. - debo irme a Estados Unidos. -el pequeño comenzó a llorar haciendo que Namjoon derramara lagrimas también.

-¡No! ¡Hyung no me deje! ¡No me deje usted también! -gritaba com fuerza lanzando sus muñecos, negaba una vez tras otra.

La puerta de la habitación se abrió y el padre del niño entró, corrió hacia el pequeño y lo abrazó

- Lo siento Namjoon, el está teniendo una crisis, le ocurren seguido. - beso la frente del pequeño mientras el sollozaba

Namjoon sorbio por su nariz y sacó de su saco una cajita de regalo, la puso en el suelo y se levantó.

- Que la abra cuando esté más tranquilo. -dijo para después salir y cerrar la puerta. La cajita contenía una medalla de oro de Seokjin que había ganado por parte del colegio debido a su gran labor para con los enfermos de cáncer, seokjin se la había dejado a Namjoon y ahora Namjoon se la daba al pequeño Kim

Camino por el pasillo y se detuvo frente a la puerta de Seokjin, se mantuvo de pie allí escuchando los sollozos del pequeño. Tomó el pomo y abrió la puerta, entró y cerró.

Observó el lugar, todo estaba tal cual recordaba solo que con mucha luz, una muy clara y cegante, se sentó en la cama y observó cada cuadro, la pintura, los muñecos, los detalles que el ponía en cada rincón, lloró de nuevo y se giró para ver a Seokjin sentado a un lado de el sonriendo como todo un Ángel. Pero Namjoon no se asustó, lo miró con tristeza, con dolor y Seokjin acercó su mano para acariciar el rostro de Namjoon, sintió su mano, era fría y suave, después el rostro de Seokjin se acercó al de el y lo besó suavemente, un sencillo roze que parecía un gran sueño, y en aquel beso, la imagen de Seokjin desapareció de su vista y Namjoon abrio los ojos viendo su mano aún sostener el pomo de la puerta, lo giró y no se abrió, entonces se dio cuenta que el no había entrado, no podía hacerlo, tenía llave , todo había sido una imagen de el, no pudo ver que había dentro. Soltó el pomo y bajó las escaleras, salió de la casa y caminó, miró por última vez hacia atrás y después volvió a caminar y se fue, se fue dejando a Seokjin y todo lo que tuviera que ver con el atrás, se fue dejando la depresión en esa casa, se fue dejando todo un gran pasado feliz con Seokjin, se fue...se fue para jamás regresar.


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YA SOLO UN ESPECIAL MÁS
JURO QUE ME DOLIO ESCRIBIR ESTE ESPECIAL, Y  ESTABA ESCUCHANDO UNA TRISTE CANCIÓN DE PIANO.

S/he (Ella, el) [Yoonkook] (Wattys 2019)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora