Héroe del inframundo

un combate poco común

Nos encontramos en una parte del bosque, es de noche, como las 4 a.m y se ven a un peliverde junto a una pelirrosa. Izuku tenía unas pesas en sus extremidades, mientras la pelirrosa estaba haciendo estiramiento, traía un pantalón deportivo y un top que dejaba ver su grandes pechos.
Izuku: ¿No tienes frío?
Mei: ¿Por que lo preguntas? ¿Te gustan? A mi se me hace cómodo.
Se estira, dejando que Izuku se deleite con la vista.
Izuku: Ehh... mejor comencemos. Quiero que me des un golpe.
Mei: ¿Seguro?
Izuku: Claro, para saber de donde podemos partir y así...

La chica rápidamente soltó un golpe que hizo que Izuku saliera volando hasta un árbol destruyendolo.
Izuku: Se me olvido que le ganaste a Kendo de un golpe...
Mei: Golpeo y muy fuerte, crecí con un hermanos que...
La chica se quedó callada por unos segundos y después fue a darle una mano al peliverde.
Izuku: ¿Tu hermano?
Mei: Olvida eso, sigamos.

El peliverde se quedó viendo a la pelirrosa por unos segundos, hasta que esta le volvió a dar otro golpe en la cara mandandolo contra una piedra cercana.
Mei: Deja de verme, pervertido.
Izuku: Yo no... (Lo hace para que no hablemos de lo que iba a decir).. No soy un pervertido.
Mei: Bien, maestro pervertido, ¿qué haremos?
Izuku: Pues no se que tanto control en magia tengas, así que llame a alguien.
Mei: ¿A quién?
En eso una pelinegra llegaría, esta tenía un uniforme extraño.

Akeno: Ara ara.. con que te gustan las chicas de pechos grandes.
A el comentario tanto la pelirrosa con Izuku se sonrojaron.
Mei: Lo sabia, pervertido.
Izuku: ¡Eso ahora no es importante!
A

keno accedió a enseñarle magia a los dos Dragones, Mei era bastante hábil y pudo alcanzar a Izuku en unas horas. Así pasaron por 2 horas, hasta la hora en la que los chicos se fueron a la escuela, Akeno le contó a Izuku que ella iba a estudiar con Kiba y los demás en la academia Kouh, mientras Rías y el estaban en la U.A.

Todo el día siguió normal, el reseso llegó e Izuku se estaba comenzando a poner nervioso, los momento donde todas se reunían eran los más penosos para el chico, pero su sorpresa al ver que las chicas no estaban, ya que Rías y Uraraka reunieron a las demás, para hacerles una preguntas.
Uraraka: ¿Por qué te gusta Izuku?
Preguntaba una castaña a una pelirrosa que estaba sentada en una jardinera.
Ashido: Ahh... pues... el me salvó y no solo eso, sino que todo lo que hizo por mi sin conocerme, quiero a alguien que haga hasta lo imposible por mi y si Izuku puso su vida en riesgo sin saber mi nombre... no imagino que hará si estoy con el.
Rías: Mmm... ¿Y tu?
Momo: Me ayudó en el entrenamiento, puede que eso haya hecho que el me interesara, pero al ver lo que ocurrió en el U.S.J no sólo me salvo, me inspiró a dar lo mejor de mi, no quiero depender de él, pero si quiero estar con él.
Rías: Bien, a las dos les propongo algo. ¿Quieren compartir a Izuku?
Ashido: ¿Compartirlo?
Momo: ¿Están seguras?
Uraraka: Si, Rías y yo lo hicimos y nos hemos dado cuenta que tenemos algunas cosas en común.
Rías: Puede que nos llevemos bien.
La pelirrosa se quedó pensando un poco, ella creía que el hombre que le gustaba sería solo para ella.
Ashido: Tendré que pensarlo un poco.
Momo: Yo igual...
Uraraka: Claro, vamos con Izuku.