Cuando Owen la vió vestida tan elegante se sintió un imbécil intentando parecer gracioso con sus shorts.
El vestido negro con los hombros al descubierto, lo suficientemente señido y de un largo sugerente pero no aburrido se combinaba como un narcótico con los zapatos altos y rojos.
Owen volvió a mirarse y a sentir pena de su desición además de verse tan impresionado que sus infames shorts habían comenzado a comprimirlo. No había experimentado nada parecido en años. Por muy terrible que fuese su error en la vestimenta o sus chistes durante la cena no iba a dejar escapar a Claire Dearing. Estaba seguro de que era la mujer de su vida.
Cuando la beso después del tercer shot, el sabor de sus labios lo consumió con tanta ferocidad que no pudo evitar empujarla sobre la pared que simulaba ser parte de una ridícula cabaña de playa. Estaba perdiendo el control de una manera rápida, violenta e irresistible.Claire se volvió tocando instintivamente su abdomen. No había crecido y no sentía nada más allá de los sueños depositados en esa pequeña célula.
Seguía reviviendo la reacción de los velocirraptors. Esa intuición tan inoportuna, tan llena de primitivos gestos realmente la había conmovido. Por unos instantes sintió que esas barreras que construía, esa forma de distanciarse de los animales llamándolos "recursos" se había diluido en un lenguaje de comprensión. Pero la belleza de esa empatía la había hecho llegar a la terrible conclusión de que Owen se había dado cuenta de todo. Rezaba par que no fuera así pero sabía perfectamente que lo había hecho.
Escuchó el primer golpe en la puerta y cerró los ojos pretendiendo olvidar quién estaba del otro lado. El segundo golpe lleno sus ojos de lágrimas. El tercer golpe la encontró junto a la puerta apoyando la frente en la madera implorandole al destino que él se fuese. Con el cuarto llamado giró el picaporte y encontró a Owen desencajado del otro lado -Es...es mío...- le dijo sin que fuese una pregunta por qué sabía en el fondo de su corazón que así era.
Owen sentía diferentes cosas en el mismo momento. Furia, por no haber sabido las cosas antes. Vértigo por no saber que iba a depararles el futuro. Felicidad por tener frente a si su hijo creciendo y un amor tan básico y trascendental por contemplar a la mujer que llevaba en su cuerpo la eternidad de su vida.
Claire dejó fluir un par de lágrimas y asintió avergonzada -Si...es...y...y lo siento- dijo sin entender del todo porque pedía perdón. Quizás por no haberlo dicho antes, quizás por haber dejado pasar la oportunidad la mañana después cuando él la beso suplicándole en silencio que se quedará. Sintió la mano de Owen en su mejilla y sus labios en su frente -Yo no lamentó nada...- le dijo sonriendo y la abrazó lentamente.
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Distinas Páginas De Una Misma Historia
RomanceDistintas historias de Owen y Claire. Sin orden cronológico no específicamente apegadas a la trama original.