Capítulo 19.

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Punto de vista de Gerard.
Parte II.

No sabía cómo lidiar con esta situación.

No sabía qué decir o hacer, ni siquiera dónde mirar.

No sabía si preguntarle sobre lo que sucedió lo haría sentir incómodo o no.

Estaba tan jodidamente cubierto de tierra y sangre, que me estaba haciendo sentir frustrado, tanto que incluso estaba considerando llevarlo al patio trasero y quitarle la ropa para poder bañarlo con agua tibia hasta que estuviera limpio...

Y entonces mi imaginación comenzó a jugar con mi cabeza. Sus boxers también podrían haberse ido... pero rápidamente quité la imagen mental y volví a la realidad.

Tal vez yo era el que necesitaba ser rociado con una manguera.

Pero con agua fría en lugar de tibia gracias a Frank. 

Realmente necesito aprender a controlar mis hormonas. El hecho de que comenzaran a jugar con mi imaginación en un momento así, debería ser una señal de que se me estaban yendo de las manos. 

Frank suspiró en voz baja, mientras yo alejaba mi mano de su rostro. 

Tomé sus dedos con los míos, limpiando cuidadosamente su piel. Sus manos estaban completamente desgarradas, la izquierda más que la derecha. 

Parecía que se había caído de una bicicleta y se había arrastrado unos metros. 

- No tienes que hacer esto - me dijo, mientras yo levantaba su otra mano. 

Mantuve mis ojos enfocados en sus manos, porque él me estaba viendo. Me concentré en sus dedos pálidos y sus palmas lisas, al principio hicieron un muy buen trabajo distrayéndome, siempre he tenido algo con las manos de Frank, pero no pude evitar verlo mirándome. 

Me estaba mirando a través de su cabello, como un adorable cachorrito o algo así, su labio inferior tembló ligeramente. 

- Puedo cuidarme solo - susurró, mirándome - No soy un niño.

- Lo sé - susurré, a pesar de que en realidad en ese momento parecía tener catorce años. Solté su mano y la dejó caer sobre su regazo - Pero tampoco eres un adulto, Frank...

- Pero tú tampoco - protestó. 

- Soy mayor que tú - le recordé. 

Me sorprendió la repentina verdad de que realmente soy mayor que él. 

Cumpliría dieciocho años, muy pronto. 

No es que no le fuera a decir, porque eventualmente lo descubriría él mismo, pero me sentí incómodo al saber que pronto sería un adulto legalmente, y él todavía era un adolescente. 

No me sentía como un adulto en absoluto. 

Me sentía tan indefenso como un bebé, a veces. 

Todavía me sentía como un niño, la mayoría de los días, me sentía como el torpe idiota de la escuela que siempre ha sido, el 'maricón con la actitud y el pelo extraño' como solían decir mis compañeros de clase. 

- Sólo por un poco - protestó Frank, con voz baja. Observó mientras tiraba la toalla ahora sucia y ligeramente manchada de sangre en el fregadero - No más de un año.

- Sí - suspiré, inclinándome, besando su frente - Sólo por un poco.

Suspiró profundamente y mantuvo su mirada lejos de la mía.  Cuidadosamente puse mis dedos en su mandíbula, luego su cuello, su hombro, y luego mis dedos se posaron sobre su costado. Se estremeció, ligeramente.

Folie à Deux (Frerard) [traducción] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora