✧Ángel ↦Dillom✧

'31.

✧Joaco.
👀Voy a narrar como conoce a la "pelirroja"
Joaquín y que pasa después de eso. No me
acuerdo aproximadamente cuanto tiempo pasó
desde que narré como Kaktov así que voy a poner
pasado y actualidad para que no se pierdan.

❥P A S A D O.
-¿Tantas ganas de perder el tiempo tenés?-le pregunto a la colorada que se sienta frente a mí con la mirada llena de intriga. Obviamente no se lo pregunto de mala manera, ella suelta una pequeña risa y asiente colocando un mechón de pelo rojizo tras su oreja.

-Demasiado tiempo, poco que hacer.-Añade-siempre tengo tiempo para escuchar desconocidos, más si me traen la cara larga a la cafetería como se trata de la tuya. ¿Querés contarme que pasó o te invito un café y me contás la historia de tus tatuajes?

Ambos parecían buen plan, sobre todo con la chica melena de fuego que tenía frente a mí que tenía una forma de mirar, de hablar y de ser que aparentaba comerse el mundo.

-Contame, dale-suspiró con una sonrisa y llamó a la mesera, delicadamente pidió dos cafés de nombre extraño y sin dejarme chistar, añadió-Nadie lo conoce, pero es lo mejor del mundo.

Asentí, y apoyé mis antebrazos en la mesa aproximandome un poco más a ella, la pelirroja imitó mi acción.-Ahora sí, podes empezar.

-¿Y si empiezo cuando traigan el mejor café del mundo?-sonreí-mientras tanto me contás como es tu nombre, y éso.

-Me llamo Nashia-dijo haciéndose una colita improvisada en el pelo con las manos para después soltarlo haciendo que sus pequeñas ondas reboten en su espalda brevemente.-¿Y vos sos?

-Kaktov-ella arqueó una ceja-Joaquín-sonreí y ella también lo hizo, me tendió la mano y la acepté haciéndola reír, el café llegó y olía exquisito.

-Ahora sí Joaco, podes empezar.-Dijo apoyando su delicado rostro en su mano.

[...]

-Y en resumen, pasó éso.-Finalicé mi relato donde le conté la traición que había padecido por culpa de mi "novia". ¿Puede decírsele novia a alguien que te quería para estar con tu mejor amigo?

-Y en resumen-me imitó-alta tóxica que no sabe lo que quiere, y vos, un bobo que no sabe lo que vale.

-Tal vez sí, tal vez no-le di un último trago a mi café, el cual si, era el mejor del mundo.

-¿Estás pensando en perdonarla?-preguntó con total confianza.

-Sí no sé, parecía arrepentida.-suspiré pensando en los ojos cristalizados de la morocha al admitirlo todo, me dolía.

-No perdones a alguien que te usó para cogerse a tu amigo, después de todo, la base de la relación siempre fue una mentira, Joaco.-Acarició suavemente mi mano, suspiré mirando el interior de la taza vacía.

-¿No va a cambiar?-pregunté posando mi mirada en sus ojos, ella se mordió el labio inferior y bajó la mirada admirando la taza vacía. Volvió a mirarme y suspiró.

-La gente así no cambia nunca-dijo sonriendo de lado tristemente.-¿Vale lo que duele? No todos cambian por amor.

-La quiero.-Musité con una ligera presión en el pecho.

-Después de unos días ya no-me acarició la mejilla y la confianza que tenía esta pelirroja me mantenía tranquilo.

El vidrio de la cafetería se llenó de ligeras gotitas implicando que estaba lloviendo. Nashia se subió el cierre de la campera al ponerse de pie y yo también lo hice.