𝙖𝙣𝙨𝙬𝙚𝙧 𝙩𝙝𝙚 𝙥𝙝𝙤𝙣𝙚 ⇝💥Bakugo Katsuki 💥

15

Dos años después.

Había pasado algunas semanas, mi herida todavía era un poco visible y hasta ahora en el trabajo todo seguía igual, lo del seguro no se arreglo y ya eh podido comprar un calentador para los chicos con mis ahorros.

Ahora estaba recostada viendo mi película favorita de la infancia junto a Katsuki , la película la había descargado en mi celular ya que no había televisión en la habitación.–oe, podrías poner otra cosa? Sabes que tu película de animalitos está del asco.–

Hice una mueca.–pero es que la mamá de bambi...¡MIRA YA ESTAN CORRIENDO!–zarande a Katsuki desesperada.–¡OH DIOS, OH DIOS! ¡CORRE BAMBI!–

–¡deja de gritar en mi oído exagerada!–entonces se escucho el disparo en la película, tuve que tapar mi boca.–¡ahi esta masoquista! ¿Querías sufrir no? , ¡ya se murió la venada!–

Sorbi mi nariz, esta película siempre me ponía muy sentimental.

Los ojos se me empezaron a llenar de lágrimas, pobre bambi...

–Fiami... Más te vale que no estés llorando otra vez.–advirtió.

Me sorprendí gratamente dado que...

Regresaba de la cocina con las palomitas echas, era la primera vez que Katsukientraba a mi casa y mi familia tenía una cara de fastidio al ver que de nuevo puse esa película para niños.

Me senté a lado de Katsuki mientras compartía las palomitas con mi hermano, hasta que llegó esa parte donde muere la madre del pequeño cervatillo.

No pude evitar ser un mar de lágrimas e iba a buscar consuelo en mi bad guy favorito, sin embargo, este se encontraba dormido, roncando y con baba escurriendo.

O al menos eso había pensado.

Esos pequeños detalles eran lo que me enamoraban de Katsuki .–Yo no estoy llorando, tu estas llorando–

–¡eso no es cierto, loca sentimental! –

Iba a seguir la pelea de no ser por que alguien se asomo por la puerta, mi alien favorita y mi linda cara redonda.–¡chicas!–salte y fui a abrazarlas, me hacía falta mis compañeras de clase.

Ochako había cambiado el estilo de su cabello y Mina estaba igual de radiante que siempre, ambas se miraron cómplices.–Fiami...tenemos una sorpresa–comenta Ochako mientras me tiende una...

–wow...asi que Izuku se animo...–era la invitación a su boda, que seria dentro de unos meses.

–Fiami ¿no estas feliz? –

–¿eh?–sonreí lo más que pude mientras me lanzaba a abrazar a la castaña.–¡por supuesto que sí! ¡Es algo super bonito! ¡Muchas felicidades Ochako! –

Pasamos a la cafetería para hablar sobre la boda, la propuesta de matrimonio y donde sería la luna de miel, Ochako fue por un poco de pastel mientras mina se veía más sonriente que nunca.–tu ¿que es lo que te tiene tan feliz Rosita fresita? –

Ella ríe y se ve muy feliz.–bueno...conoci a alguien, es un buen chico y me a apoyado en todo, es un gran amigo–se que ese "conocí a alguien" podía significar otra cosa, me sentía mal por una parte por Kirishima que si supiera esto se sentiría muy mal y por otro lado, sentí culpabilidad Mina tardo mucho en volver a su rutina, tenía sus propios problemas y ahora esta siendo feliz y no puedo sentir que eso sea lo correcto.–pensé... Que seria lo mejor despedirme de kiri... Debo seguir con mi vida.–

–¿de que hablas?–

La chica suspira.–lo pensé y...lo mejor será dejar de preguntarme por kiri, ya no quiero atormentarme si el estará bien–

No puedo creer lo que dice.–¿lo abandonaras?–

–yo...pense que sería lo mejor, kiri no habría querido que yo esté atada a una vida que pareciera estar en pausa–la chica toma mis manos. –yo necesito continuar con mi vida–

Me siento ofendida, no puedo creer que lo diga, ella ama a Kirishima con todo su corazón.–¿tanta valentía tienes para decírmelo? Veremos si a Kirishima se lo dices igual–la arrastre a la habitación del chico.

–Fiami calmate–pidió.

Ambas nos detuvimos frente a la puerta–¿quieres que me calme? ¡Estoy segura que Kirishima ansiaba que volvieras como lo haces cada mes! ¡La última vez movió el dedo después de que te fueras! –solo quería que se diera cuenta de lo que esto provocaría en el chico.

–no lo entiendes... Han pasado dos años, a veces no puedo dormir pensando en que todo pudo haber sido distinto, no es sano.–

–¿y que le dirás el día que despierte? ¡Lo siento kiri, tenía miedo y me fui! –

–¡el lo entendería! ¡¿Siquiera te has visto?! ¡Has adelgazado, tienes ojeras y también deudas hasta el cuello! ¡Si Katsuki supiera...–

Estoy consciente de lo que piensa de mi, que debo estar demente por seguir así, es cierto que se me olvida comer durante días y que trabajo para sobrellevar los gastos del hospital, que apenas si duermo y no eh podido siquiera rentar un departamento decente.

Pero cada segundo que me esfuerzo se que es por el bien de Katsuki.

Algo detiene nuestra pelea.

Kirishima a entrado en paro.