My heart is on fire for you (Terminada)

XIII

Jungkook

-¿Por qué regresaste esta mañana con la princesa Lalisa?.

Me giro y veo a Yoongi de pie en la entrada de mi habitación.

-No sé de qué hablas- sigo limpiando la armadura.

-Los vi cuando tomaron caminos diferentes en el bosque...ella entró por la puerta trasera...

Lo vuelvo a mirar.

-No te debe importar.

-¡Escucha, Jungkook!. Estoy enamorado de Lalisa y se convertirá en mi esposa.

Me levanto del suelo y tiro la armadura. Levanto la lija poniéndola cerca de su cara.

-¿Ves esto?...- me mira enojado-...esto atravesará tu garganta el día que vuelvas a reclamar a Lalisa como tu esposa.

-¿Te gusta?.

Me mira confuso.

-No me gusta...es mía.

Yoongi aparta mi mano y golpea mi mandíbula. Río al tambalearme y sentir la sangre en mi boca. Retrocede y mi puño se estrella en su nariz. Me lanzo encima de él y comenzamos a pelear.

-¡Paren!- Jimin se acerca y nos separa.

-¡Abres la boca y te mato!- amenazo a Min Yoongi antes de irme.

Camino hasta el jardín. Respiro hondo para aliviar la furia. Alguien toca mi brazo y me giro para agarrarlo con brusquedad. Lalisa me mira con ojos asustados y la suelto.

-Perdón...creí que eras...¿por qué sigues con la ropa húmeda?.

-No encuentro a Jennie...descuida, ya luego me doy un baño.

-Vas a resfriarte.

-¿Por qué...quién te ha golpeado?- toca mi mandíbula y hago una mueca-...necesitas una compresa fría...ven- me jala del brazo.

-Estoy bien.

-No lo estás...¿quieres que al Rey le de algo cuando te aparezcas en la cena así?.

La sigo hasta la cocina y observo como cura la hinchazón. Podría estarla viendo hasta mi muerte todas las horas. Pasamos la tarde hablando de su madre hasta que la obligo a darse un baño caliente.

En la noche me visto de negro como de costumbre. Camino hasta la cena especial por el cumpleaños del rey Tae Yin. El palacio se ha llenado de miembros de familias poderosas y músicos.

-¡Jungkook!- me giro al escuchar a Lalisa.

Corre por el pasillo y va más hermosa que nunca, aunque no me gusta que utilice el negro para ir de luto.

-Toma- me extiende el puño cerrado y le doy la palma de mi mano.

Deja algo y sale corriendo. Sonrío por lo tierna que es cuando quiere. Miro mi mano y tengo una pulsera roja con una pequeña piedra de jade negra. Miro por donde se ha ido y la sigo. Al llegar a la multitud la busco. Conversa con mis hermanas y la tomo de la muñeca. Llamamos su atención.

-¿Para qué es esto?.

-Perdiste tu lazo rojo y esto te traerá buena suerte.

La miro y siento unas ganas enormes de besarla...pero me limito ya que no solo mis hermanas nos miran, todos alrededor fruncen el ceño.

-Gracias- susurro.

Camino hacia otra parte y disfruto los actos. Más tarde y mientras todos bailan entramos al comedor.