Por un segundo pensé que todavía iba a negarse, pero luego me volvió a mirar y murmuró, —Bien.
—¡Excelente! —Trinó la Vandy—. Ahora, Señor Lee, ataque al señor Kim.
Me quedé mirándola. Nunca había empuñado algo más que un matamoscas en mi vida, ¿y esta mujer esperaba que me lanzara sobre un chico con un palo puntiagudo
de madera?La sonrisa de la Vandy se endureció. —Cualquier día de estos.
Ojalá pudiera decir que de repente descubrí mi rey guerrero interior y expertamente salté a Kai, con el arma alzada alta, los dientes desnudos.
Eso habría estado genial.
En lugar de eso elevé la estaca más o menos a la altura del hombro y tomé dos, quizás tres pasos arrastrando los pies hacia delante.
Entonces dedos atornillados apretaron mi garganta, la estaca fue arrancada de mi mano, y un agudo y punzante dolor subió rápidamente por mi muslo derecho mientras aterrizaba en el suelo con un golpe que me dejó sin respiración.
Y como si no fuera suficientemente malo, una vez que aterricé, algo duro y pesado, su rodilla, pensé, me golpeó justo en el esternón. Ya sabes, sólo por si acaso había un último aliento quedando en mis pulmones.
La punta de la estaca raspaba la sensible piel justo por debajo de mi barbilla. Miré hacia arriba, jadeando, a la cara de Kai.
Estaba fuera de mí en lo que dura un latido, pero todo lo que pude hacer fue rodar a mi lado, atraer mis rodillas hacia el pecho, y esperar a que el oxígeno volviera a entrar en mi cuerpo.
—¡Muy bien! —escuché a la Vandy decir desde algún lugar lejano. Estaba literalmente viendo estrellas, y cada respiración entrecortada que tomaba era como si estuviera intentando respirar a través de cristales rotos.
Por el lado bueno, mi flechazo con Kai se había ido completamente. Terminado. Una vez que un chico ha golpeado su rótula en tu caja torácica, creo que cualquier sentimiento romántico debería irse por el camino de los fantasmas.
Entonces sentí manos debajo de mis brazos, poniéndome en pie. —Lo siento — murmuró Kai, pero yo sólo lo miré. Mi garganta todavía se sentía cerrada e hinchada, y no quería intentar empujar ninguna palabra a través de ella.
Mucho menos todas las palabras que quería decirle.
—Ahora —La Vandy dijo alegremente—, el señor Kim mostró una excelente técnica ahí, aunque yo definitivamente hubiera estado en el pecho del oponente más tiempo.
Kai asintió ligeramente hacia mí cuando ella dijo eso, y me pregunté si estaba intentando decir que era el por qué lo había hecho; hubiera estado peor si hubiera sido la Vandy. No me importaba. Todavía estaba molesto.
—Y ahora, señor Kim, Habilidad Cuatro —La Vandy gorjeó. Pero esta vez Kai negó con la cabeza. —No.
—Señor Kim —La Vandy dijo bruscamente, pero Kai tan sólo tiró la estaca a sus pies. Esperé por un destripamiento o azotes, o al menos, ponerme al día, pero de nuevo, la Vandy tan sólo sonrió su sonrisa forzada. Recogió la estaca y me la pasó.Estaba seguro que iba a vomitar. ¿No había por ahí otro novato que pudiera torturar? Miré alrededor y pillé algunas pocas miradas simpáticas, pero todo el mundo parecía aliviado de que no eran ellos los que estaban a punto de ser aplastados.
—Muy bien. Miren y aprendan, chicos. Habilidad Cuatro. Ven a mí, señor Lee —Yo sólo me quedé ahí mirándola.
Ella apretó los labios con irritación, y entonces, sin aviso, su mano salió disparada para cogerme. Pero estaba preparado esta vez, y enfadado y dolorido. Sin pensar, levanté mi pierna y la saqué hacia fuera. Fuerte.

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Condena [Kaisoo]
خيال (فانتازيا)Brujas, vampiros, magos... bienvenidos a la secundaria de los fenómenos. Hace tres años, Kyungsoo descubrió que era un brujo. Lo que lo ha metido en algunos enredos. Su no dotado papá le ha brindado soporte tanto como ha podido, consultando al leja...