|14 de octubre|
Cuando el reloj da la una de la madrugada, apago la televisión a media película, con un bulto temblando entre mis brazos, tapado por completo con su manta.
Al no escuchar el sonido de la película, una cabeza rosada sale de su escondite para mirarme.
–¿Ya acabó?
–No habrá más películas de terror para ti. Tus padres estarán a punto de llegar y no quiero que lo primero que vean al entrar sea a su hijo hecho una bola en su sofá, aterrorizado.
Veo un lindo puchero surgir en sus labios y se sienta en mis piernas para abrazarme.
–Jiminnie, ¿qué haces?
–Te crees que voy a pisar el suelo después de esto. Tú me obligaste, carga con las consecuencias.
–La consecuencia eres tú, ¿no?
Un golpe en mi pecho por su parte y me levanto con el mayor apegado a mi cuerpo con piernas y brazos, todavía rodeado de la manta.
–¿No prefieres subirte a mi espalda?
–¿Y que algo venga desde detrás y me coma a mí primero? Tú estás loco...
Entierra su cabeza en mi cuello, sin querer mirar detrás de mí y le sujeto con fuerza, comenzando a caminar.
Apago la luz de la entrada antes de subir la escalera hacia las habitaciones y escucho su grito, muy cerca de mi oído.
–¡Jungkook enciende la luz!
–Tranquilo, fiera...
Vuelve a iluminarse el pasillo y enciendo la de las escaleras a su vez.
Subo lentamente, sintiendo el constante temblor del cuerpo de Jimin, intentando ocultarse en el mío.
Con sus pequeñas indicaciones en susurros, llego a su habitación y le dejo en la cama, él rápidamente se mueve al dentro de esta y vuelve a taparse con la manta.
–Jimin... No estés así... Mira, voy a cerrar la puerta y encender la luz –hago lo dicho y vuelvo a ver si cabeza asomar–. Estoy aquí, nada va a hacerte daño o se las verá conmigo.
Hago crujir mis nudillos y se levanta con cuidado de la cama.
–Gracias, Kookie –deja un beso en mi mejilla y con temor abre el armario. Saca unas prendas y vuelve a mirarme–. Tengo que ir al baño...
–Pues ve, mientras me cambio aquí.
–Kookie... No me dejarás ir al baño sólo... Está el espejo y nunca pasa nada bueno con los espejos en las películas.
Baja la mirada y sonrío divertido.
–Venga, vamos.
Aprieta la ropa contra su pecho y le tomo de la mano como quería volver a hacer.
Tiro de él y salimos de su habitación. Jimin enciende rápidamente las luces del pasillo y tira de mí apresurado para llegar al baño, casi corriendo.
Entre en este y suelto su mano para cerrar.
–Ahí fuera no te quedas. Separados somos más vulnerables...
–Bueno, pero sólo por eso –entro y me giro dándole la espalda, mirando hacia la pared.
–Sólo... Kookie, no hagas bromas, por favor.
–No te haría eso, ¿por qué lo dices? –escucho el movimiento de su ropa y deduzco que se está cambiando.
–Namjoon y Yoongi aman las películas de terror, la última vez que me obligaron a ver una con ellos, Nam me acompañó al baño y me apagó la luz. Por mucho que yo gritaba, no la encendía de nuevo y acabé llorando... Al escucharme, vino Yoongi hyung y encendió la luz, pero al entrar la volvieron a apagar y no paraban de reír... No hagas eso, Kookie.
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• ᴊᴋ... ʟᴏᴏᴋ ᴀᴛ ᴍᴇ! • ᵏᵒᵒᵏᵐⁱⁿ
Fanfiction•Dos miradas conectadas en momentos opuestos, dos miradas que desean encontrarse.• Park Jimin adora bailar, expresar lo que siente mediante la danza, tan apegado a ella que su simple caminar es dócil. Jeon Jungkook, el nuevo, ama ver bailar a Jimin...