Acababa de entrar en la guarida y ya podía oír a Naruto gritar, Sasuke suspiró con resignación. El Dobe no había cambiado, seguía siendo el mismo escandaloso de siempre a quien Sakura golpea cuando su voz alcanza más decibelios de los humanamente soportables.
Siguió el sonido hasta una de las estancias más grandes, y al entrar tuvo la sensación de encontrarse en una guardería.
Sentados en la mesa situada en el centro de la habitación estaban Naruto frente a Suigetsu, los cuales parecían haber estado jugando a algo con fichas hasta hace unos minutos, a juzgar por todas las que había esparcidas por el lugar. A un par de sillas de distancia, Sakura fulminaba con la mirada al rubio mientras mantenían una conversación que no parecía estar gustando nada a la pelirrosa.
Karin estaba sentada cómodamente en uno de los sillones intentando leer un libro que cada vez apretaba entre sus manos con más rabia al ver que Suigetsu le hacía muecas desde la mesa al tiempo que atendía a ratos la conversación de los ninjas de Konoha.
En un segundo plano, callado como siempre, Juugo se apoyaba en el alfeizar de la ventana sosteniendo uno de sus pajarillos como si fuera la cosa más interesante del mundo.
Ninguno se dio cuenta de la presencia del pelinegro, que en ese momento, mientras los miraba se preguntó si debía replantearse sus criterios para elegir compañeros de equipo.
- Oh, venga Sakura-chan sabes que es verdad – pinchó Naruto consiguiendo en respuesta una mirada de malas pulgas por parte de la pelirrosa que ignoró por completo – Es serio, aburrido, sólo piensa en entrenar, nunca habla...
¿Están hablando de mí? Se preguntó el Uchiha.
- Eso no es verdad Naruto, lo que pasa es que no se pasa el día diciendo todas las estupideces que se le ocurren como tú – gruñó Sakura.
Sasuke contuvo el aliento, ¿Sakura le estaba defendiendo? Eso sí que no lo esperaba. Cuando eran genins eso habría sido lo normal, pero últimamente no había recibido muchos halagos por su parte.
- Aun así no sé que viste en él, es un amargado y tiene pelos de chica...
¿Pelos de chica? Sasuke se sintió tentado a llevar una mano a su cabello, él no tenía pelos de chica, ese dobe se la iba a cargar.
- Tienes muchas virtudes Sakura-chan, pero el peor gusto para los hombres de la historia – siguió hablando Naruto sin percatarse de que el pelinegro se había acercado por detrás con un aura peligrosa.
¿Con que tenía Sakura mal gusto para los hombres, eh? Teniendo en cuenta que la pelirrosa se había pasado la mayor parte de su infancia pregonando estar enamorada de él, la frase no dejaba en buen lugar al Uchiha.
Antes de que el Uzumaki pudiera reaccionar, un golpe en la cabeza hizo que rebotara en la mesa, y dedicándole un "usuratonkachi", Sasuke se sentó en una de las sillas de al lado.
- ¡¿Pero qué mierda te pasa Teme?! – bramó el rubio sobándose el cogote con dolor - ¿desde cuándo defiendes tú a Hyuuga Neji?
¿Hyuuga Neji? ¿Qué tenía que ver en todo esto? pensó Sasuke mientras se concentraba en que su confusión no fuera visible.
- Naruto nos estaba contando que Sakura salió con ese tipo – acotó Suigetsu con un brillo de anticipación en la mirada, como si acabara de quitarle la anilla a una granada de mano y estuviera contando los segundos para ver cuando explota.
Se oyó el chasquido exasperado que hizo la kunoichi con la lengua al oírlo.
Sasuke giró la cabeza con tal brusquedad hacia la pelirrosa que por un momento pensaron que se había partido el cuello.
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(Sasusaku) Exilio
Fiksi PenggemarSasuke está consumido por el odio después de saber la verdad sobre su hermano,cuando más oscuro es su corazón se encuentra con sus antiguos compañeros casi moribundos -¿quién os persigue,Sakura?- Konoha- contestó desmayandose. Creador de la portada:...