Los almuerzos con Nagisa siempre han sido emocionantes eventos en los que sabes que cualquier cosa puede pasar. Lo curioso de todo es que te lo esperas, pero cuando lo extraño o extravagante aparece, igual terminas admirado.
Me alegró verlo tan sano, tan alegre, tan parecido al recuerdo de él mismo que guardo en mi memoria, porque eso significa que no necesariamente todo tiene que cambiar con el paso del tiempo, que no todas las cosas que conoces terminarán destruidas y eso es un verdadero alivio para mí.
Yuki se pasa todo el camino desde el acuario hasta el restaurante que Ikuya había elegido de antemano, charlando con Nagisa, preguntando muchas cosas de cuando yo era pequeño y principalmente de cómo fue que nos conocimos, pero ninguna otra interrogante que pudiera ponerme nervioso ¿Soy yo o eso no es normal? Mi hija está a pocas semanas de cumplir cinco años y es una pequeña curiosa por naturaleza, lo sé gracias a todas las charlas que he mantenido con su maestra, pero a pesar de eso nunca me ha hecho preguntas realmente importantes, no es que no me alegre eso pues aun no estoy seguro de que podría decirle si un buen día quisiera hablar del enigma de su padre, pero sé que eso no puede tardar y tengo que estar listo para cuando el momento llegue.
Y hablando de preguntas sin hacerse, miro de reojo a Nagisa y al instante sé que él debe estar confundido, deseando como nunca poder hacerme sus propias preguntas una tras otra, pero tenemos suficiente tiempo para eso, además, no creo que haga tanta falta
Es decir, su principal duda ya debió haber sido mas que resuelta, digo, es imposible que no notara el gran parecido que guarda mi adorada pequeña con los rasgos de nuestro amigo en común, en especial en el detalle de sus ojosdespués de todo son demasiado iguales como para ser considerado una simple coincidencia.
-Este lugar tiene excelente comida- aprueba Nagisa contento mientras nos acomodamos en un cubículo separado para darnos mayor privacidad –Tienen una gran variedad de platos y también de postres, pero su fama a comenzado hace muy poco, es relativamente nuevo
-Mi madre me lo remendó- me explica Ikuya cuando le lanzo una mirada interrogante y un poco angustiada –Y no te preocupes, no es tan caro, así que Hiyori no tiene por qué sufrir mas de la cuenta
-Bien, ¡vamos a ordenar!
-¿No deberíamos esperar a Ryuugazaki?- pregunta el castaño sin duda asustado por la emoción que el más bajo pareciera tener, literalmente sus ojos brillan contemplando todas las opciones que tiene justo frente a si
-No tardará, me acaba de mandar un mensaje- explica antes de desviar la mirada en mi dirección; sé que debería estar prestándoles mas atención pero me es imposible con Yuki mirándome fijamente en lo que para muchos parecería una lucha de miradas acompañada de gestos vagos –Esto ¿Haru-chan? ¿Todo está bien?
-Déjalos, están en medio de una de sus charlas telepáticas- comenta Ikuya con tranquilidad
Me gustaría haberme reído por su forma de decirlo, pero mi sirenita estaba presionando mucho con lo de comerse ella sola un plato de caballa; sé que podría hacerlo, pero no quiero que se exceda porque después de eso seguramente me va a pedir el permiso de probar un postre especial con todo lo que le gusta el dulce y como yo soy su madre, debo mantenerme firme, o eso me digo hasta que la mirada adorable de sus ojos destruye toda buena voluntad en mi y ella termina por salirse con la suya.
-Bien- acepto derrotado –Dos caballas para nosotros
-¡Sí, caballa!
Veo como mis tres amigos sonríen por la emoción que aparece en el rostro de mi pequeña, como no hacerlo si se ve tan adorable en estos momentos.
-Se parece mucho a ti, Haru-chan
-Gracias, Nagisa; la caballa es una de sus mas grandes debilidades
-No me sorprende ¿Cuál es la otra?
-¡Chocolate!- salta ella misma con energía y yo me rio suavemente ante la atenta mirada de mis tres amigos. Sí, chocolate
La conversación de ahí en adelante fluye tranquila, al menos hasta que escucho una nueva voz detrás de nosotros interrumpiéndonos:
-La...lamento mucho la tar...tardanza- se disculpa tratando de recuperar el aliento, ha debido de venir corriendo desde quien sabe dónde
Le advertí a Nagisa que no debía decirle que nosotros estábamos aquí, pero él no me hizo ningún caso y le contó que estábamos juntos en el acuario en esos mismos momentos y que lo esperaríamos ansiosos para almorzar en tal dirección, después de eso solo escuchamos un voy para allá y la comunicación se cortó.
-¡Rei-chan, llegaste!- grita Nagisa saltando a los brazos de su futuro esposo y yo no puedo evitar que una pequeña sonrisa se forme en mis labios al verlos, son adorables
-Vine lo más rápido que pude- explica antes de voltearse a mirarme con algunas lágrimas formándose en sus violáceos ojos –Haruka-sempai, no sabe lo feliz que estoy de verlo después de tanto tiempo, sé que no es muy hermoso que no le hayamos escrito, pero
-Pero que dices Rei- interrumpo sorprendido por sus palabras, esto era lo único que me faltaba: el que mis amigos se sintieran culpables por las decisiones que yo había tomado –Estás muy equivocado, soy yo el que debería pedirles disculpas por desaparecer de esa manera sin dejarles una carta o algo parecido para explicarles. Ahora me doy cuenta de lo preocupados que ambos estaban por mí y yo Solo quiero decirles que lo siento mucho y también agradecerles por todo Muchas gracias por su preocupación, por ser mis amigos, y también muchas felicidades
Para cuando terminé de hablar, los tres teníamos los ojos llenos de lágrimas, un efecto secundario que me quedó después de haber dado a luz: me he vuelto casi tan sensible como Rin y esa idea no me fascina precisamente, pero si me sirve de momento para poder decirles a mis amigos lo mucho que los aprecio, entonces estoy dispuesto a aguantarlo.
Afortunadamente Ikuya esta ahí para evitar que todos cayéramos en depresión:
-Claro y a nosotros que nos lleve la corriente ¿no?
Rei se sonrojó mucho por la vergüenza de haberse olvidado de sus otros dos invitados y se pasó la siguiente media hora disculpándose cada tanto, claro alternando entre eso y la sorpresa de ver a mi lado una pequeña a quien inmediatamente presenté como mi hija.
En mi diario vivir no es extraño que las personas se enteren que es mía o que la escuchen llamándome mamá pues al parecer salta a la vista de cualquier persona que soy un doncel, o eso me han dicho, en especial Logan que se dio en el momento de conocernos y sin tener que mirar en mis documentos personales; cuando le pregunte me dijo que era por mi delicada figura, creo que lo golpeé en el estómago después de eso. En cuanto a mis amigos no es lo mismo, desde la escuela secundaria quedó claro que pertenecía a ese porcentaje exclusivo de la población masculina que tenía la posibilidad de gestar hijos y todos tenían conocimiento de eso, pero sus ojos igual se convierten en dos signos de interrogación
¿Por qué?
Obviamente porque quieren averiguar quién es el padre de Yuki
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Errores (MakoHaru)
FanfictionLas relaciones nunca son perfectas, el amor eterno es difícil de mantener con vida...no porque no se pueda, pero muchas veces todos podemos cometer ciertos ERRORES con la persona que mas amamos y terminamos por destruir aquello que prometimos proteg...