Errores (MakoHaru)

Haruka

-¿Vas a estar bien?

-Logan, en serio, creí que me considerabas alguien más fuerte

Ahora mismo me encuentro fuera de la piscina de la universidad que terminó por reclutarme hace cinco años y a quienes ya he entregado muchos premios en agradecimiento por todo lo que han hecho por mí.

Logan es un amigo y también es el asistente de mi entrenador personal, por eso pasamos mucho tiempo juntos; admito que fue un poco difícil que nos hiciéramos amigos gracias a que él es demasiado activo y yo extremadamente callado, pero de alguna forma conseguimos hacer que funcionara. Yuki lo quiere mucho, y yo sé que el sentimiento es recíproco, es una de las pocas personas en las que confío ciegamente. Es mi amigo, aunque un día me dijo que le gustaría que fuéramos algo más que solo eso, pero en esos momentos yo no podía permitirme algo como eso porque tengo como prioridad a mi sirenita, ella es lo único que necesito en mi vida para ser enteramente feliz

Me alegra que él lo haya entendido y no dejáramos de ser amigos solo por eso, con el paso del tiempo solo nos hemos hecho más unidos.

-Sé que eres fuerte Haru, pero por alguna razón tengo miedo que tantos recuerdos de tu pasado te agobien

-Ya sé, yo también estoy preocupado por eso, pero pero no puedo cambiar de opinión justo ahora, Logan, el avión parte en dos horas y Yuki está demasiado emocionada con la idea de conocer mi antiguo hogar- eso es cierto, pero también hay una parte de mí que está ansiosa por volver -No voy a defraudarla

-Me lo imagino, y sé que vas a protegerla con todo lo que tienes, pero me gustaría asegurarme de que alguien va a cuidarte también a ti

-Pudiste haber venido con nosotros- murmuro un poco enojado porque hasta me tragué mi tonto orgullo para invitarlo a acompañarnos, teníamos esa posibilidad ya que la invitación decía específicamente que era para nosotros y nuestros invitados personales, pero Logan rechazó mi invitación

-Me encantaría, pero tengo un montón de trabajo aquí y no puedo darme el lujo de irme a pasear con personas tan especiales, sin importar cuanto quiera hacerlo- me dice acercándose un poco para abrazarme, debería apartarlo en estos momentos, pero no quiero hacerlo –Lo entiendes ¿cierto? No estés triste

-No estoy triste- aseguro tercamente, pero creo que no lo estoy convenciendo

-Te llamaré por teléfono cada vez que pueda- me asegura sonriéndome como siempre –Así podrás contarme todo lo que sucede y puedo ver a Yuki, claro, si es que aún se acuerda de mi

-Seguramente será ella la que te llamé todos los días para contarte todo lo que vea

Sí, mi niña es alguien muy amable, que siempre tiene algo bueno que decir a las personas con las que se encuentra en su camino, pero al igual que yo solo permite que personas de su absoluta confianza la conozcan por completo

-Mejor para mí, la voy a extrañar

-¡Estoy lista!- grita mi pequeña corriendo a mis brazos, aprovechó que vinimos a la piscina a pedir mi licencia por vacaciones para poder nadar un rato y tenía que volver a cambiarse antes de que nos vayamos al aeropuerto

-Esa es mi niña ¿te divertiste hoy?

-Mucho, pero Yuki hubiera estado más feliz si mamá y Logan hubieran entrado conmigo

-Ya será en otra ocasión, sirenita- asegura Logan despeinando su cabello, lo que la hace feliz porque comienza a reírse con ganas –Volveremos a nadar juntos pronto

-¡Sí!

-¡Haru, ya es hora!- grita Hiyori desde el estacionamiento para llamar mi atención, los estábamos esperando, debemos irnos o puede que perdamos el vuelo

Logan nos acompaña al auto llevando mi maleta y la de Yuki, mientras yo cargo a mi hija. Me doy cuenta que estoy retardando el momento de la despedida, y es que es realmente alguien muy bueno, que me ha apoyado mucho en todos estos años tanto dentro como fuera de la piscina y me duele tener que alejarme de él, aunque sea por unas cuantas semanas, pero lo haré porque no puedo vivir dependiendo de otros, ya no más.

Permito que Yuki se despida de Logan y la meto al auto, Ikuya cierra la puerta para darme un poco de privacidad, privacidad falsa, pero algo es algo

-Venga, Haru, no vas a comenzar a llorar por mí, ¿cierto?- dice bromeando y con eso consigue que me avergüence

-Para nada- le digo desviando mi mirada

-De acuerdo, entonces- creo que está triste, lo veo en sus oscuros ojos, están más apagados que de costumbre -Cuídate mucho ¿sí?

Me acerco un poco y lo abrazo por unos cuantos segundos, se siente bien tenerlo entre mis brazos y recibir su calor

-Te llamaré cuando llegue

Sé mejor que nadie que este no es momento para pensar en romance; el romance siempre lo complica todo cuando se decide a aparecer en los corazones de las personas, al menos eso es lo que he aprendido con el pasar de los años a medida que maduraba y crecía como persona y como padre, o en este caso madre, pero al mismo tiempo me he convencido de que debo apreciar mucho a los nuevos amigos que he hecho, de la misma manera en que debo de cuidar a los antiguos para hacerlos sentirse especiales por igual en mi vida.

Perdí mi primer amor porque no era capaz de expresar mis sentimientos, sí, fue doloroso que me lo gritaran de esa manera tan cruda, pero de alguna manera sé que tenía razón y por eso me he esforzado tanto estos años para mejorar, para cambiar; no para él porque sé que ya no existe nada entre nosotros, pero por mi propio bien, y por todos aquellos a quienes amo.