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Narra Tomás.

Escuché un llanto, mezclado con mi sueño, pero cuando mi mente captó que era Isa quien lloraba me levanté a cargarla e intenté calmarla.

- ¿Que pasa?. - miré sus ojos llenos de lagrimas y su expresión de querer seguir llorando y la eleve un poco para que toque mi pelo.

ella no volvió a llorar en el momento, si bien seguían sus lagrimas, tocaba mi pelo como si fuese lo mas maravilloso que hubiera visto.

la bajé un poco y la miré a los ojos.

sin saber por que, comencé a tararearle una canción que tenía en mente hace días y no sabía si sacar, mientras ella miraba mi cara atentamente detallando cada parte a su tiempo.

sonreí viendo a la pequeña, por que realmente nunca se me había dado bien la parte de estar con bebés, pero con Isa sentía una conexión o algo, por que ella en mis brazos no lloraba y se calmaba tocando mi pelo o detallando mis tatuajes.

- Perdón. - escuché la voz de Juli en la puerta y me di vuelta a mirarla, tenía los ojos llorosos. - No quería despertarte, traté de apurarme.

- No pasa nada reina. - negué mientras Isa agarraba uno de mis dedos con toda su manito y no lo soltaba. - ¿Donde estabas?. - pregunté.

- No podía dormir y fui a tomar un café. - bostezo y se sentó en la cama. - ¿Necesitas que te ayude en algo?. - preguntó al saber que no tenía que hacer nada.

- Si, acostate por que estas cansada, podes ayudarme con eso. - le sonreí. - Te veo de acá para allá sola y haciendo todo, descansa un poco. - hablé dejando a Isa en la cuna.

- No sabía que te gustaran los bebes. - me miró con una expresión que no supe desifrar.

- Que la mayoría de los bebes no me quieran, no significa que no me gusten. - sonreí y me senté a su lado. - Isa es especial.

- Isa es especial. - afirmó y bajó la cabeza para no mirarme.

me debati en mi cabeza si preguntar de una vez, eso que hace días atormentaba mi cabeza y las palabras de Mauro en mi mente, realmente no ayudaban.

"nueve meses, casi como un embarazo"

- ¿Juli puedo preguntarte algo?. - los nervios y el miedo ante su respuesta me invadieron cuando Juli conectó su mirada con la mía.

- Si Tomás, preguntame. - sonrió tranquila esperando que hable.

- Bueno... eh yo. - jugué con mis dedos nervioso, buscando las palabras adecuadas. - Como decirte. - suspiré.

- Tomi calmate. - sonrió y acarició mi rodilla. - Pregunta tranquilo.

yo sabía que ella ni se imaginaba a lo que iba mi pregunta.

- Juli. - la miré. - ¿Vos perdiste un bebé mío mientras yo no estuve?.

𝘾𝙖𝙚𝙧 𝘾𝙍𝙊𝘼𝙕𝙕𝙐 •𝙋𝙖𝙧𝙩 𝟯•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora