Cómo poder recuperar tu amor

CAPÍTULO 9.

(Era una noche llena de dudas, de lágrimas y de renuncias a la propia felicidad; pero eso ellos no lo sabían. O tal vez era el miedo lo que les cegaba).

•Any: - pensando - bueno Any, ¿qué te pasa por la cabeza? Obvio que tú puedes tener a quién quieras, mírate caray, esto no lo deja pasar cualquiera - entre sus cosas vio una foto de ella con Poncho y la coge - pero tú, tú eres un idiota. A ti te vale, osea te valgo por esa psicoloca que al final me va a volver loca a mi...¿en qué pensarás? ¿en qué? - mientras que decía esto, no paraba de hacer gestos y de hablarle al Poncho de la foto; lo que ella no sabía, era que el de verdad edtaba mirándola desde la puerta de la habitación.

•Poncho: A ver, a ver - Any se asusta e intenta guardar rápidamente la foto - no solo me gritas a la cara, me hablas mal e insultas a mi novia, ¡también haces vudú con mis fotos! - pero era tarde.

•Any: Ay bueno Ponchito, en esta foto salimos todos no manches, no eres el centro de todo, osea nada que ver - con una sonrisa nerviosa.

•Poncho: - se acerca y le quita la foto - ya, y por eso la esquina en la que salgo está doblada, tengo un agujero en la frente y hay un intento de quemarlo, ¿no?

(Any estaba en la cama sentada y aprovechando, Poncho la tira y él se pone encima de ella, la coge de los brazos y los echa para atrás evitando que se mueva).

•Poncho: Si lo que quieres es que deje a Fabiola, ¡solo dímelo! - acercándose a su cara.

•Any: - sin moverse - y tú...¿tú lo harías?.

•Poncho: Jajajajaja no, pero por lo menos hablamos las cosas, porque no sé si sabes que las cosas se hablan güera.

•Any: - intentando librarse de él después de esa respuesta - mira güero, nadie y menos tú va a venir a enseñarme nada, ¡suéltame ya! - acto seguido le da una patada en la entrepierna - ¡QUÍTATE!

•Poncho: - retorciéndose en el suelo de dolor - ¡ANY! Escúchame bien, incluso si me hubieras pedido que dejara a Fabiola, ¿te crees que lo hubiera hecho por una niña inmadura como tú? ¡JAMÁS! Estar con alguien como tú es lo último que haría, neta. Y más con alguien que por cualquier tontería quiere abandonar lo que a todos nos ha costado tanto.

(A Any esto le dolió demasiado, pero Poncho no podía notarlo).

•Any: Yo no me voy a ir de nada. Es cierto que me chocas, pero no me afectas.

(Y así Any salió dando un portazo, sintiendo que todas las pocas esperanzas que quedaban, ya no existían. Pero ya era tarde para abandonar).