Aytana y las primicias.

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Capítulo 13.


Era lunes por la mañana, me desperté e inmediatamente apague la ruidosa alarma. Me metí a la ducha y al salir me vestí con mi uniforme. Camino a la escuela me encontré con Sebastián, estaba algo lejos así que corrí lo más rápido que pude hasta llegar a él.

-Te alcancé- dije entre jadeos, me detuve a tomar un poco de aire. Él me miró sonriendo.

-Buenos días- dijo. Se agachó un poco y me dio un beso en la mejilla. Me sonroje y me estiré un poco para darle un beso en los labios.

Dio un paso atrás y tocó sus labios con su mano. Bajo sus pecas un tenue rojo se asomaba. Con nervios miró a nuestro alrededor.

-No hay nadie- afirmé riendo.

Lo tomé de la mano y caminamos juntos a la escuela, al entrar algunas chicas nos miraban, asombradas, disgustadas, felices incluso.

Yo me sentía feliz.

Lo dejé en su aula, lo despedí con un discreto beso en la mejilla y subí a mi aula. La tutora del grupo, la señorita Elena, esperaba recargada en su escritorio. Esa mujer me traía entre las cejas. Su formal traje cubría los cincuenta y tantos años que tenía, su falda de lápiz era un poco larga y siempre se teñía el cabello rojo, tal vez para combinar con su labial del mismo color.

-Llega tarde -anunció mientras subía sus gafas por el puente de su nariz.

-Lo siento- me disculpé y me dirigí a mi asiento. Aytana puso los ojos en blanco y arremedó a la maestra.

-¿Qué ha pasado? Quiero detalles. -La gran reportera Aytana se lanzó a la primicia.

-No ha pasado nada. Solo conversamos un poco, dormimos y su madre me preparó el desayuno en la mañana.

-Tu suegra -corrigió.

Solté una risita infantil y volví la mirada a la pizarra. La maestra estaba escribiendo en ella.

-Suelta la sopa, habla ahora o calla para siempre- me susurró Aytana.

-Callaré hasta mi tumba.

-Hasta el receso y di que es mucha la espera.

-Muy bien, Danny. Hoy está muy charlatán, venga a explicar usted -me ordenó la maestra. Toda la clase mi miró y algunas risitas empeoraron las cosas.

La maestra me estiró su marcador y lo agitó hacia mí. Me levanté y puse los ojos en blanco al tomarlo. Realmente tiene algo en mi contra. Me dio una hoja y sin leerla ni prestarle atención comencé a escribir a la pizarra.

"El día 24 de febrero la Secundaria será llevaba a un parque de diversiones, por la cancelación del baile anual "San Valentín". Se espera la participación de los alumnos en la actividad"

Termine de escribir y preste más atención a lo que había escrito.

Es perfecto. Iré con Sebastián y será un día perfecto, como una cita.

Mire a Aytana quien me miraba emocionada. Leyó mis pensamientos y sonrió de oreja a oreja.

-A la otra le traeré un bozal -me amenazo. Me hubiera sentido ofendido, pero en ese momento mi mente no estaba disponible para analizar insultos.

La maestra me miró con el desprecio habitual y yo le sonreí. Tomó su marcador y siguió con la explicación del viaje, las normas regulares.

- ¿Puedo llevar a mi novio? -preguntó Isabel. Como siempre su falda era más corta que mi paciencia, su brillo labial en exceso era ridículo y su lacio cabello amarrado con una goma era lo más formal en ella.

Sentí a Aytana arremedarla a mis espaldas, a mis amigos haciendo gestos de estar irritados por los pocos segundos que había hablado y yo puse los ojos en blanco.

-Claro que si Isabel, eres libre de llevar a quien desees -dijo la maestra mientras le sonreía.

- Pero solo a uno- susurró Mike.

La clase comenzó a reír, incluyéndome.

El receso comenzó y salí con Aytana en busca de Sebastián. Isabel nos alcanzó y nos abrazó por la cintura.

- ¿Llevarán a sus novios? - preguntó con tono de burla.

- Sí, espero que tengas el mismo que en diciembre, a menos que hayan estado al 2x1 esta vez- defendió Aytana.

-Yo espero que Danny vaya con Sebastián. A no ser que Sebastián vayaa con la otra. -Isabel miró a Sebastián, él conversaba con su mejor amiga, era solo eso, su mejor amiga. Las palabras de la arpía con mucho labial no me harían dudar de él.

-Lo sentimos señorita-novios-me-sobran, debemos iremos- Aytana me tomó por los hombros y nos alejamos de Isabel.

-No dudes de él, sabemos que no tienes porqué -me animó Aytana. Sonreí y asentí. Tomé del brazo a Sebastián y le di un beso en la mejilla.

-Se ven tan lindos- chilló Aytana. –¿No crees? - preguntó a An.

-Demasiado- afirmó sonriendo.

Aytana me lanzo una mirada diciendo: "¿Ves? No tienes nada porque estar celoso".

-Hablamos en el aula -dijo Sebastián a An y nos alejamos de ellas.

Tomamos asiento en una banca frente a la cancha de basquetbol.

- ¿Iras al parque? - pregunté mientras balanceaba mis pies que no llegaban al suelo. Él lo noto y rió.

- Tal vez sí, pero llevaré a mi primo conmigo .

¿Me estaba diciendo que no estaríamos juntos? Me dolió el estómago.

- Ya veo...- mordí mi labio inferior. Eso me puso triste.

- Te lo quiero presentar, tal vez se lleve bien con Aytana, los abandonamos y paseamos juntos ¿Te parece? - lo miré y él sonreía.

- Claro, estaría bien -mi humor cambió y lo abracé.

- ¿Qué día es? - me preguntó mirando el cielo pensativo.

-El catorce de febrero, en dos semanas- asintió y cambiamos el tema.

Entre a mi aula y Mike aún me miraba molesto, seguro por lo que paso en la fiesta de Aytana, pero poco me importaba. Yo había tenido una noche asombrosa.

-Tengo noticias- anuncio Aytana posando, en una entrada exagerada, en el marco de la puerta.

-Suéltalo- le pedí mientras me sentaba.

-Noticia por noticia, me cuentas tu velada y yo mi primicia- sus ojos buscaban respuestas.

Después de contarle lo ocurrido sonrió de oreja a oreja y me felicito.

-Ahora, te toca -susurre para que el maestro no me pasara a la pizarra.

-An no ira con Sebastián, ese día tiene asuntos personales que atender. Así que no hay nada de que preocuparse.

Reí y me tapó la boca con su mano, advirtiéndome que el maestro me podría escuchar.

-Creí que yo era el preocupado -le regañe con tono burlón –Lo sabía, él ira con su primo.

Me sonrió victoriosa.

Solo dos semanas, no era mucho.

A tu lado. (BL)  ■TERMINADA■Donde viven las historias. Descúbrelo ahora