Capítulo 22. El mundo de las almas. Kaori y Natsu. (parte 1)

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El viento frío de las montañas rugía afuera de la grieta aquella que conducía al mundo de las almas, esa grieta que Yue y Aslan tendrían que atravesar en unos minutos más. Los dos hombres miraban fijamente al hechicero de Amberlía mientras éste dibujaba en el suelo de la cueva un intrincado círculo decorado con los símbolos de Auryn y Sever: la luna y las nieves estaban representadas en aquella figura que iba adquiriendo una luz dorada a medida que las manos de Blanca seguían dibujando. Blanca había puesto también varias velas alrededor de su dibujo mientras salmodiaba palabras que Ash no conocía ni comprendía.

Aquellas actividades parecían ser parte de un ritual ancestral y Ash comprendió que quizá alguien más lo había preparado antes para Blanca y el rey de York se preguntó cuál había sido el motivo del viaje del hechicero de Amberlía, aquello era algo que nadie se había atrevido a preguntarle. De hecho, en aquel momento Aslan se daba cuenta de que había muchas cosas que jamás le había preguntado a aquel hechicero cuyo entrenamiento había sido siempre incomprensible para él. Sin embargo, Ash también sabía que en aquel instante no podía permitirse dudar, ya no era posible no confiar en Blanca.

Aquel viaje que Yue y él emprenderían era la única forma de salvar a Eiji y Ash no estaba dispuesto a echarse para atrás. En aquel justo instante, mientras Blanca terminaba de dibujar los últimos símbolos necesarios que parecían ser como la llave de entrada para aquella puerta que se encontraba en la cueva de aquella montaña, Ash recordó el rostro débil del príncipe al que amaba y el férreo deseo de salvarlo se llevó los resquemores de su corazón. Él había ido a ese lugar para emprender su última batalla y no había más opción para él que regresar triunfante del mundo de la oscuridad con las memorias de Eiji entre sus manos.

—No hay modo en el que sus cuerpos puedan acceder al mundo de las almas— dijo el hechicero haciéndole una señal al rey de York y al dragón iridiscente para que se acercaran a él—. Sus cuerpos se quedarán aquí conmigo, yo he de protegerlos hasta que ustedes vuelvan. Deben saber que ningún humano puede pasar ni un solo día en el mundo de la muerte, tienen que irse con el primer rayo de sol y han de volver con el primer rayo de luna esta noche. Para volver han de seguir el rostro del amor que han dejado de este lado, es una suerte que los dos cuenten ahora mismo con la bendición de un lazo como el que los une a Eiji y a Sing respectivamente...

— ¿Cuál es el camino que hemos de tomar?— preguntó Yue y Ash se dio cuenta de que su compañero en el viaje estaba intentando obviar las palabras de Blanca.

—No hay camino en la oscuridad, señor del aire— dijo Blanca mientras sus manos se levantaban del suelo por fin y su dibujo tomaba finalmente su forma completa la cual brillaba con motas de luz de un dorado intenso que parecía iluminar más que la luz de las velas—. Cuando tú y Aslan estén rodeados de espíritus no habrá caminos, sólo habrá sombras. Será como caminar en medio de un paraje desierto en el cual miles de presencias sin nombre y sin rumbo estarán vagando a su lado. Ustedes sólo serán capaces de mirar el rostro de aquellos seres a los que están buscando. Yue los conoce bien, es el deber de Yue buscar el rostro de Kaori y Natsu en medio de la multitud.

— ¿Y qué debo pedirles una vez que me encuentre con ellos?— preguntó Ash sintiendo que no debían perder más tiempo porque el amanecer estaba cada vez más cerca y su misión era una batalla contra reloj.

—Vas a rogarles, alteza, no a pedirles algo— respondió Blanca con seguridad—. Cuando estás frente a un espíritu, debes mostrarte humilde aun si eres el rey del mundo entero. Te arrodillarás ante Kaori, alteza y le rogarás por tu vida y la vida de su hermano. Ella accederá, naturalmente, pero los demás espíritus alrededor penan la arrogancia de los seres vivientes que osan importunarlos con el castigo de quedarse entre la oscuridad para siempre. Deben ser cuidadosos con ellos, Yue y Aslan, una vez que Kaori levante el hechizo de olvido, no mirarán a ninguno de los otros espíritus ¿han entendido? El camino de vuelta es más difícil porque para ese entonces Kaori habrá cumplido su misión y Auryn le dará el descanso eterno de luz que todos los seres perdidos en la oscuridad desean para sí mismos. Intentarán engañarlos, intentarán hacer que no sólo Kaori se quedé ahí con ellos, sino que querrán asegurarse de que ustedes se convierten en sombras errantes también. Así que su fuerza no debe flaquear. No importa lo que vean, no deben detenerse. Para que nada los distraiga de su misión deben pensar solamente en el rostro de su amor. Sólo el amor tiene el poder de alejar las sombras ¿han entendido?

—Hemos entendido— dijo Aslan sintiendo escalofríos al pensar en aquella oscuridad sin final que lo aguardaba más allá del mundo que él había conocido—. Pero Blanca, ¿estás seguro de que Arthur no sabe nada de esto? ¿No sabe que su plan podría fallar debido a este viaje? ¿Cómo puedo estar seguro de que él no vendrá a intentar luchar y acabar con nuestros cuerpos mientras Yue y yo estamos en el mundo de las sombras?

—Nadie además de Griffin Callenreese y quienes estamos cerca de ti sabemos acerca de la segunda profecía, alteza, recuerda que sólo los miembros de tu familia han custodiado esta entrada al mundo de las almas y que nadie más tenía idea de que existía, ni que un príncipe de York tendría que hacer uso de ella— aseguró Blanca.

—Eso tengo que verlo por mí mismo— dijo Yut-Lung mirando fijamente los ojos de Blanca y el hechicero de Amberlía sintió cierta amenaza en la voz del dragón—. No dejaré mi cuerpo a tu merced sin asegurarme de que no tienes conexión alguna con la mano derecha del Gran Conquistador, hechicero. Conozco tu pasado y debes saber que no tienes muchas referencias que respalden tu lealtad, así que debo asegurarme de que tus intenciones no ocultan una traición.

—Serías un tonto si lo hicieras— dijo Blanca con una sonrisa afable y divertida—. Puedes mirar en mi mente y en mi alma tanto como quieras. El lazo que me une a Natasha me impide ocultarles algo a los señores del aire. Así que adelante, favorito de Auryn, tienes razón al decir que fui un mercenario antes pero eso es parte de un pasado al que no tengo intención alguna de volver.

Yue miró sin compasión dentro del alma de Blanca y el hechicero de Amberlía dejó que el enorme poder del dragón lo invadiera, mientras Aslan observaba aquel intercambio mágico que le hizo pensar al rey de York que en realidad era afortunado al contar con el poder y la perspicacia de Yue en aquella aventura porque él había sido lo suficientemente ingenuo como para no tomar aquella precaución que Yue había tomado por los dos.

—Está limpio— convino Yue minutos después—. Y si es cierto que debemos irnos con el primer rayo de sol del amanecer, entonces debemos irnos pronto.

—Entonces vengan. Dejen todo ropaje que no sea liviano sobre el suelo al igual que sus armas, no van a necesitarlas en el lugar al que van. Sólo el coraje de sus almas y la fuerza de su amor serán sus armas. Acuéstense sobre el círculo de luz. Auryn y Sever guiarán su viaje pero han de saber que los dioses tienen poco poder en medio de la oscuridad. En medio de la oscuridad estarán solos, entre las sombras, sólo el poder de su valentía y del amor que los protege vencerá. Así que dejen todo miedo fuer del círculo de luz. Dejen toda duda porque su espíritu no necesita de ellas. El imperio y la vida del príncipe de Izumo dependen de los dos, no le fallen.

Los dos hombres jóvenes siguieron las instrucciones de Blanca y se recostaron en medio del círculo de luz y al hacerlo, sintieron un calor reconfortante que poco a poco hacía que sus parpados se sintieran pesados mientras sus cuerpos se hacían cada más más ligeros. Su respiración era acompasada y una sonrisa se dibujó en el rostro de los dos al escuchar que Blanca comenzaba a cantar una canción que sonaba dulce y cálida como las nanas que las madres solían cantar para sus hijos pequeños. Viajar al mundo de las sombras era como quedarse dormido, pensó Ash, aunque la canción de Blanca y la magia del círculo de luz estaban llevándolo directamente a las entrañas de la tierra donde se encontraba el mundo de la oscuridad.

Sólo el alma ha de cruzar el límite entre la vida y la muerte, sólo el amor ha de triunfar entre la oscuridad— salmodió blanca en el idioma de la magia—. Vayan, viajen a donde deben y encuéntrense con la persona que puede terminar con todo esto. Regresen llenos de recuerdos, regresen llenos de vida, regresen sanados del olvido y de la muerte. Y cuando venzan a las sombras, vuelvan al amor que los espera, vuelvan al amor del que no tendrán que volver a irse...

El primer rayo de luz de la mañana se coló en la grieta de aquella montaña de York y la luz dorada del sol, aunada al dorado de la magia del círculo mágico que Blanca había conjurado llenó la oscuridad de forma completa mientras los ojos de Ash y Yue se cerraban por fin y los dos, rey y dragón, comenzaban por fin aquel viaje del que la vida del príncipe de Izumo y la esperanza de todo un imperio dependía. Aquel era el inicio de un viaje entre la más profunda oscuridad...

King of my heart.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora