Las personas se movían de un lado a otro, cargando papeles y carpetas, las conversaciones laborales se percibían como un lejano murmullo. A su hermano no le molestaba todo ese barullo, saludaba cortésmente a todo el que se topaba con ellos, y a algunos les sonreía.
El departamento de logística, atareado y apurado como siempre en Tecno's Uchiha. Parecía que todos y cada uno de esos empleados competían entre ellos por presentar un proyecto que resultara prometedor para la empresa, y que por supuesto, fuera aprobado por Shisui y Obito, los últimos en la línea de prueba.
Callado, con un leve y amenazante dolor de cabeza, Sasuke seguía a su hermano entre los pasillos que se formaban con los largos mesones equipados con computadoras, escáneres e impresoras. Pensar que él tendrá que soportar ese ambiente en unos cuantos años, y con el ogro de Shisui como jefe inmediato, le daba vértigo solo de imaginarlo.
Vio a Itachi revisar minuciosamente con la vista cada equipo conectado, ya habían hecho eso una docena de veces en lo que va de ese día. Su hermano debía escanear la red de todo el edificio, y aún no entendía cómo es que había terminado dando esas vueltas junto con él, se estaban llevando toda la bendita mañana en ese trabajito.
—Recuérdame ¿Por qué estoy yo aquí?— vio en sus mano el disco duro externo que le había confiado Itachi, para instalar un programa en las computadora de las oficinas principales de cada piso.
—No te quejes ¿Qué rayos ibas a estar haciendo tú solo en la casa?— revisar cada máquina, era tedioso, por suerte ya había ordenado con anticipación, que un equipo de mantenimiento revisara los cables de red y que repararan los dañados —Por otro lado, esto te sirve para que empieces a adaptarte. Permiso— abrió la puerta de la oficina principal de ese departamento, adentro lo recibieron dos mujeres portando elegantemente sus trajes. Sasuke entró después de él, aunque parecía fastidiado con ayudarlo, se le notaba el interés cuando lo pillaba escrutando cada máquina, ansioso por asegurarse de que el sistema marche bien —Veo que hay equipo nuevo, ¿Está en red?— preguntó al ver una computadora nueva en aquella oficina de dos personas.
—Sí, señor.
—¿Les molesta si me aseguro?— les sonrió a ambas, rápidamente negaron y le cedieron el lugar en los dos escritorios —Sasuke, revisa esa— le apuntó una, lo vio rodar los ojos y se divirtió con la cara de disgusto que puso al ver el monitor, seguramente por el fondo de pantalla.
—70 equipos conectados, ambos servidores están en red— le informó sin verlo, no necesitaba hacerlo para saber que Itachi sonreía satisfecho.
—Instala el sensor en ambas. Avísame cuando termines.
—Bien— conectó el disco y procedió a descomprimir el paquete que debía instalar. Sin mucho interés, vio a su hermano hablar por teléfono, seguramente cerciorándose de que su equipo había cumplido su tarea ya. Las mujeres chismorreaban cosas entre ellas, reían y suspiraban intercalando miradas entre él y su hermano. Las odiaba, siempre era lo mismo, todas estaban locas. Instaló el programa cuando finalizó la extracción de archivos.
Ambos procesos tardaban, era un paquete bastante pesado y muy complejo. Todavía no preguntaba la razón por la cual su hermano tenía que hacer esas cosas personalmente, ese pequeño disco no lo tocaba nadie que no fuera un Uchiha, el programa no lo ejecutaba otra persona que no fuera Shisui o Itachi. Ya sabía que el nivel de confianza entre los empleados y los superiores era bastante bajo. Todo era por precaución, algo extremo, pero precaución al final de todo.
No se pasaba por la empresa siempre, de hecho casi nunca lo hacía, eran raras y contadas las veces que ha ido. Fuera de eso, era la primera vez que se involucraba en el trabajo de Itachi, nunca se lo diría, pero le gustaba la idea de ser uno más en la corta lista de aquellos que tenías ciertos privilegios para controlar las cosas en la empresa. Estaba en su sangre, era normal querer imponerse en ese ambiente tan pesado, donde sí se ordena algo todos empiezan a corretear como hormigas para cumplir dicha orden. Las oficinistas seguían riendo maliciosas, las miró fríamente para hacerlas callar. Sonrió prepotente cuando obtuvo silencio atrás de él.
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Aprendiendo a Amar a un Dobe
FanfictionTodo empieza por un aparentemente pequeño cambio en el sistema estudiantil del Instituto, lo que hará que la vida de nuestros personajes se cruce y empiecen una nueva aventura, donde tendrán nuevas experiencias y sentimientos encontrados, peleas, di...