Aprendiendo a Amar a un Dobe

Capítulo 22. Pedazos de amor

Al final terminaron yendo al departamento de Shisui. Itachi no es exigente con el lugar, siempre y cuando sea cómodo y privado para él está bien.

—Itachi, ¿Recuerdas tu primer beso?

—Claro, si es especial, es algo que no olvidas— soltó una risa recordando el momento —En las escaleras de mi casa, Sasuke estaba ahí, jugábamos a emparejar cartas... fuiste tú.

...Los observaba jugando, Sasuke se quejaba cuando Itachi encontraba las cartas primero, Itachi solo le sonreía al pequeño prometiendo que tendría más suerte a la próxima.

Le gustaba verlo sonreír. Itachi era lindo.

—Itachi...

—¿Si?— al girar el rostro recibió de improvisto un besito en los labios. Se le subieron los colores al rostro cuando Shisui se alejó muy sonriente.

—¡Shisui, enfermó a Itachi!— Sasuke lo apuntó asustado, su hermano estaba muy rojito. Se alarmó cuando Itachi lo tomó por debajo de los brazos para cargarlo —¡No! ¡¿Y si es contagioso?!

—Ahora besa a Sasuke— le pidió dejando al menor enfrente de Shisui.

Shisui sonrió nervioso, no esperaba tal cosa. El pequeño Sasuke lo miraba con terror y se removía en las manos de Itachi.

—¡No! ¡No me enfermes a mí también!

—No te vas a enfermar, Sasuke— le apartó el cabello que caía grácilmente sobre su frente y ahí le dejó un piquito.

—¡Qué asco!— salió corriendo cuando Itachi lo soltó.

—Ahora bésame a mí.

—¿Qué?— la diversión de ver a Sasuke huir se le fue al oír lo que Itachi le pedía, no entendía que pretendía con eso. Pensó con miedo que estaba formando a un monstruo.

—Hazlo.

Aunque confundido, no creía obligación el negarse, así que lo hizo de nuevo, volvió a unir sus labios a los contrarios, y esta vez Itachi cerró los ojos y paró la trompita esperándolo...

Shisui sonrió con nostalgia. No es el momento, es la acción lo que es especial, ambos acordaron eso.

—¿Recuerdas lo que pasó después de eso?

—Mi padre te llamó y te fuiste con él... no me has dicho de qué hablaron.

—Ahora lo sabrás.

...Se separó y lo vio colorado de nuevo, acariciando sus labios y viendo hacia otro lado ¡Era una ternura!

—Shisui...

—Tío...— lo vio abajo, al pie de las escaleras, a siete escalones de donde ellos estaban ¿Los habrá visto? —¿Qué pasa?

—Ven un momento.

Lo vio tomar camino hacia la sala.

—Itachi, quédate aquí... o ve a buscar a Sasuke— le pidió como último recurso para mantenerlo lejos. Si su tío los vio, era muy posible que estuviera molesto, y no quería él lo viera así.

—Sí.

Itachi terminó de subir las escaleras hacia las habitaciones, y entonces Shisui bajó. Encontró a Fugaku esperándolo de pie junto al sillón.

—Acércate, no voy a morderte.

—¿Lo ha visto?— le preguntó con cautela, ese hombre podía ser su tío, pero no lo trataba con esa confianza.