Capítulo 17. Causa y efecto-Parte III

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—¡No dejen que se me acerque!

—¡Sasuke, cálmate!

—¡¡Suéltame!! ¡Déjame partirle la vida!

A buena hora de la mañana, estos cuatro se estaban montando un escandaloso drama en plena calle.

Apenas Naruto y Sasuke se reunieron en aquel cruce, el azabache intentó sacarle los ojos al rubio, si no fuera por Suiguetsu que lo sostenía por los hombros desde atrás, y Karin interponiéndose entre su primo y la fiera Uchiha, Naruto ya sería una historia más de mil maneras de morir.

—Cielos, ¿Qué demonios le hiciste, Naruto?

—Pues... ¡AH! ¡Sasuke!— lo vio enojado, uno de los zapatos de Sasuke fue a parar a su abdomen, por suerte Karin se había movido.

—¡Cállate, no le digas nada!

—¡¿A qué hora te quitaste el zapato?!— preguntó alarmado Suiguetsu, lo tenía un poco nervioso el hecho de que su amigo estuviera tan alterado.

—Me quedan flojos, pero son cómodos— dijo en un susurro, algo abochornado. Una patadita al aire y el zapato salió volando en buena dirección.

—¿Qué pasa contigo?— le estaba dando un poco de miedo lo sensible que andaba Sasuke.

—Sasuke...

—¡Tú no me hables, maldito!— lo apuntó, como si estuviera acusándolo.

—¡¿Por qué estás tan enojado?! No es la primera vez.

—Eso fue un accidente.

—¿De qué hablan? ¿Cuál accidente?

—¡Sí, un accidente! Incluso te metí la lengua esa vez. No entiendo por qué haces tanto escándalo, si lo de ayer solo fue un piquito.

—...

—...

—...

Cri Cri Cri

—Ustedes dos... ¿Se besaron de nuevo?...— Suiguetsu rompió el matador silencio que se hizo después de que Naruto se cubriera la boca, aterrado al ver al Uchiha activar su modo asesino —Sasuke, te he perdido el respeto.

—Tú nunca me has respetado. Suéltame.

—¿Si? Pues ahora te respeto menos.

—Suiguetsu, suéltame para que pueda golpearlo.

—Lo siento, pero si tú golpeas a Naruto, esa loquita de ahí me golpeará a mí— apuntó a la chica que se mantenía algo perdida, intentando procesar la bomba que su primo soltó.

Sasuke suspiró sonoramente. Estaba enojado, y ver la cara de lelo que tenía Naruto, lo hacía enojar más.

—Si no me sueltas, también me desquitare contigo.

Naruto intentaba ocultarse atrás de su petrificada prima, al ver como Suiguetsu aflojaba el agarre, temeroso de lo que Sasuke pudiera hacerle a él también.

—¡En serio, no sé por qué te enojas tanto!— por inercia, ya empezaba a alejarse al verlo dejar la mochila en manos del otro chico —Sasuke...

—Ni siquiera te has disculpado— a cada paso que daba, Naruto se alejaba. Sasuke tenía un serio problema, y parte de ello solo era el impulsivo acto del rubio el día de ayer... la otra parte de problema, no le disgustó el beso y se sintió usado.

—¡¿Eeehhh?! ¡¿Y por qué tendría que hacerlo?! No siento que deba disculparme, no tengo ganas de hacerlo. ¡Ni siquiera me arrepiento!

Sasuke se detuvo, ahora tenía más ganas de masacrarlo. ¿Cuál era su problema con ese tema? Pues... su mente trabajó más rápido que la de Naruto cuando el besito se dio, y su principal problema era sentirse usado solo para que su atolondrado tío se alejara de Kakashi. Ahora le molestaba que el rubio ni siquiera se arrepienta de haberlo usado.

Aprendiendo a Amar a un DobeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora