Capítulo 4: Proyecto de fin de curso

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Blue

Existía la creencia popular entre los estudiantes que decidían entrar en la universidad de Arte: pasar todos los cursos era tan fácil como quitarle un caramelo a un niño.

Lo seria, si no fuera por el profesor Lachowsky, el seria una especie de niño con esteroides y poderes especiales que haría que te retuerza hasta llorar.

Solía tener ese talento.

Ahora, se encontraba sentado entre la variedad de estudiantes en el salón, el profesor se paseaba de un sitio a otro con las manos entrelazadas.

— Hasta ahora han llegado hasta aquí, quizás por varias razones diferentes — comenzó — Suerte, quizás porque les gustaba hacerle la pelota a sus profesores o, una minoría, debido a que se esforzaron. Demostraron que merecen ocupar los asientos en los que ahora mismo se encuentran.

Les miró

— Y no quiero que uno a uno me diga si se lo merece — les dijo — quiero que lo piensen ustedes mismos. Porque el proyecto de fin de año, va a ser sobre ustedes. Pero no cualquier cosa sobre ustedes...algo profundo, algo que nunca le hayan dicho a nadie...algo que quizás los mantenga despiertos por la noche.

Blue miró alrededor de la sala, viendo distintas emociones cruzar el rostro de los demás estudiantes.

Chloe Denver, la chica rubia que se sentaba tres asientos delante levanto la mano.

— ¿Si señorita Denver? — dijo el profesor

— ¿Quiere que le escribamos una historia sobre un secreto sucio? — preguntó, aunque no sonaba exactamente como una pregunta — ¿Y que sucede si no lo tenemos? Digo, no todos somos una novela de Agatha Christie.

El profesor alzo la ceja mientras variós estudiantes asentían, de acuerdo con la rubia que no tenía problemas es discutir con los profesores para lograr su punto.

La verdad, es que Chloe tenía más madera de abogada que de artista. Pero no le diría eso en la cara sin conseguir quedarse sin dientes.

— A diferencia de lo que usted piensa — le dijo este — la verdad es que todos tenemos un secreto...algunos más oscuros que otros. ¿Un romance con algún chico desconocido de una noche? ¿Una mentira a sus padres? ¿Una escapada de su casa? ¿Un asesinato?

La clase parecía de repente más interesada, si, eso también lograba crearlo el profesor. El aura de misterió que llenaban sus clases era asombrosa.

— Pero, sin excepción, cada estudiante de esta clase, tiene un secreto y su trabajo es escribirlo.

A veces deseaba que su profesor se jubilara de una vez por todas.

Red

Cuando uno cree que tiene todas las cartas perfectas para ganar, el destino decide por alguna razón, cambiarte el juego. Es como si estuvieras jugando a la conga y de repente el juego fuera la escoba del quince.

Había estudiado para cada prueba y estaba segura de que tendría un aceptable en todas, pero cuando entro a su clase de Arte sabia que algo malo estaba por suceder.

Usualmente el profesor no tardaba tanto en llegar, y cuando lo hacía no tenia un cuadro en sus manos.

— Bien, muchos se preguntaran que es esto — señalo al cuadro que actualmente se encontraba tapado por una manta blanca — y les diré que deben esperar para saberlo.

La clase abucheo y Red intercambio una mirada con América, que tenía una media sonrisa en el rostro. A nadie podía caerle mal el profesor de Arte, era estrafalarió y usaba ropas de lo más raras. Además, la primera vez que lo vio creyó que era un vagabundo.

Red de mentirasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora