Marucho reencendió la nave para salir a buscar a Shun; Julie estaba realmente molesta, sentía que no fue la manera de dejar en claro a Shun que él no sentía lo mismo por él. Algo era seguro, Runo y Shun no podían verse, menos después de lo que Dan había dicho a Shun acerca de ella.
La noche cayó, hasta que al final Julie visualizó en medio de la oscuridad a Shun sentado en la rama de un árbol con un semblante inquietante, los ojos inchados y el pelo desacomodado. Shun estaba pensando que lo mejor sería volver a tener menos empatía y regresar a su dojo para enfocarse en un 100% a su entrenamiento ninja. Al ver la nave de Marucho, saltó a ella para avisar a sus amigos que regresaría con su abuelo:
-¿¡Qué!? Shun, no puedes hacerlo -exclamó Marucho muy impactado- piensa que puede que el titubeo de Dan tenía un objetivo preciso. Aún hay esperanza; de todas formas tú no necesitas de nadie, eres independiente.
-Sí, Marucho, pero también soy un ser humano, igual que tú... ¿qué crees que sentí al escuchar esas palabras de la boca de Dan? -preguntó con gran disgusto el de los ojos ámbar.
-Muy bien, Shun. Déjate vencer, sal corriendo a tu zona de confort; ¿sabes? Éste no es el Shun que solía conocer hace 8 meses.
-No me interesa qué opinen. Jamás debí venir a Wardington -dijo Shun muy serio- todo fue en vano.
-¡Pero no fue así! Se lo dijiste por el amor que tienes por él... mira, Billy y yo temíamos el uno del otro, sabiendo que quizás nos enamoraríamos, y creímos que eso arruinaría nuestra relación -le contó Julie- pero él día de hoy soy la chica más feliz a su lado.
-Julie, tú misma lo dijiste: Dan seguramente no es homosexual. Iré a empacar...
-¿Pero por qué no quedarse a averiguarlo concretamente?
-No necesito más complejos en mi cabeza, Julie. Mi mamá decía que no siempre quedarse significa valentía -se levantaba del sillón de aquella nave- es algo que aprendí hace mucho.
-Julie tiene razón, Shun. No deberías desertar tan pronto... ¿por qué no intentarlo?
Shun se quedó muy pensativo; su rostro demostraba indecisión y tristeza. Recordó que cuando luchaba junto a Skyress, ella siempre iba decidida a saber todo lo que pudiera para poder salir victoriosa. Entonces aceptó quedarse en ciudad Wardington un tiempo para aclara todo en su cabeza y con Dan y Runo.
Por otro lado Dan, no estaba muy tranquilo después de lo que había pasado:
-No te sientas mal. Contrólate -se decía a sí mismo- ¡No puedes ser homosexual! Decepcionarías a tus padres -en esta última frase elevó demasiado el volumen.
-¿Decepcionarnos, hijo? ¿Por qué dices eso? -preguntó su padre al escuchar eso desde el pasillo de la planta alta de su hogar.
-¿Ah? Papá, dime: ¿qué sentirías si yo fuera... diferente? -bajó la cabeza.
-¿Homosexual, Dan? ¿Te sientes de esa manera?
-¿¡Qué!? ¿Homosexual? No, no. No necesariamente. Sólo quiero quitarme esta curiosidad.
-Bueno, hijo. Tú madre y yo siempre quisimos que fueras especial, que sobresalieras del resto por algo; entonces no me incomodaría que te gustaran los chicos o que tengas comportamientos poco comunes, siempre y cuando no lastimes a nadie ni a ti mismo, te amaremos como seas -dijo el padre de Dan con una sonrisa.
-Oh, gracias p...papá -no pudo evitar soltar una lágrima.
-Bueno, hijo. Si eso es todo, subí a decirte que la cena está lista. Baja a comer para que puedas lavar tus dientes y dormir.
-Claro papá -respondió el adolescente.
La charla con su padre le aclaró muchas cosas. De hecho, se sintió confortado por las palabras de una de las personas más queridas por él; pero igualmente, no concebía la idea de que le gustaran los chicos.
Dan llevaba 4 noches sin dormir por la preocupación que este tema le generaba. Es por ello que decidió aceptarse y sincerarse con Runo, sus amigos y su familia.
Al terminar su almuerzo, Dan corrió a montar su bicicleta para ir a hablar con Runo y decirle la verdad para posteriormente decírselo a Shun. Pero una vez en el acto, el joven comenzó nuevamente a dudar...
-Hazlo, Dan -se percibía una voz el cielo, muy similar a la del mejor amigo y bakugan guardián de Dan, Drago- ¡deja de preocuparte por el mundo y sé feliz!
-¿Ah? ¿Eres tú, Drago? -preguntó con una incógnita profunda- ¿enserio eres tú?
-Sí, ser el núcleo Perfecto me permite estar presente en la tierra... puedo saber lo que piensas y sientes desde Nueva Vestroia. Shun espera por ti. ¡Hazlo!
Dan se sacudió los nervios y continuó en su camino a la casa de Runo. Al llegar, Dan pudo ahorrarse todo:
-Runo, he venido a...
-No digas más. ¡Sé porqué estás aquí!
-¿Ah sí? -dijo Dan.
-Mis sospechas se confirmaron. Verás, Shun vino hace una hora a disculparse por lo que había pasado... me explicó que estaba alterado conmigo porque... porque él está enamorado de ti. Incluso, sentí alegría por él, ya que mi hipótesis de que a ti también te gustaban los chicos eran ciertas. Pero Dan, no quiero que dejemos de ser amigos.
-¡En lo absoluto! ¡Tú y yo somos y seremos los mejores amigos para siempre! -dijo Dan abrazando a Runo.
Ambos chicos salieron a la casa de Marucho para que Dan pudiera ver a Shun. La reacción de la chica dejó muy tranquilo a Dan... es como si se estuviera quitando cada roca que pesara demasiado en su consciencia.
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¿Y si no cambiamos nada?
FanfictionDan no sabe si aún se siente a gusto con Runo, aún al no haber iniciado nada en lo absoluto; Shun sabe que Dan no es fácil de complacer, y no sabe si el despertar, que quizás el vivir solo con su abuelo le ha provocado, sea verdadero. Mientras todo...