"MI DESTINO ERES TU" 2 TEMPORADA

CAPITULO 37

Que bien, no quice ir con Mario porque solo se reunirían para seguir con sus planes y ver como grabarian etc. etc. y porque no quería dejar a Jan solo, y resulta que el niño se va, genial me quede sola bueno no tan sola, porque aqui estan Lana y Queen, pero no me gusta estar sola aquí me hace extrañar demaciado a Jenny a nuestra princesa. Paso un rato y me puse a preparar la comida, dijo Mario que regresaría a la hora de la comida pero eso no es seguro, siempre que esta en cosas de trabajo se retrasa.

—Bien Diana hemos llegado a casa de tu padre.
—¿Enserio esta es su casa?
—Si cariño.
—Si asi esta por fuera no quiero imaginar como es por dentro.
—Esa casa es muy linda.
—Si tuvo dinero para comprar esta casa, pero no tuvo ni dinero ni espacio para ir a vernos.
—Si no quieres verlo podemos irnos ok.
—No, si quiero verlo, quiero saber si aun tengo un poco de su cariño o en su defecto no tengo a un padre.
—Ok pues vamos.
—Ok.

Bajamos de la camioneta y me acerque a tocar el timbre, salio Amanda a abrir la puerta, estoy segura que Pedro aun no le a dicho quien soy en realidad.

—Buenas tardes Ariadne ¿que te trae por aqui?
—Buenas tardes Amanda, necesito hablar con Pedro.
—Ok, Pedro no a llegado, no me comento nada de que fueran a trabajar aquí.
—No, no es nada de trabajo es algo personal.
—Ok, pues tenia que pasar a recoger a los chicos ya no a de tardar en llegar, pasa podemos platicar en lo que llega.
—Gracias, vamos Cariño —dije refiriéndome a Diana.
—Y esta princesa ¿es tu hija?
—No, no es mi hija es mi sobrina.
—Ha, cariño dejame decirte que eres preciosa.
—Muchas gracias señora. —entramos por completo a la casa.
—¿Porque tapas tu mejilla? —dije mientras le colocaba el cabello detras de su oido y vi el parche que traia.
—Por esto —dije señalando mi parche.
—Nos adentramos a la sala— Tomen asiento por favor.
—Gracias.
—¿Que te paso? Digo si se puede saber.
—Claro. Mi hermano se, se entero de que soy novia de uno de sus enemigos y enloqueció y pues me hizo esto a parte de golpearme.
—Que barbaridad ¿y tus padres donde estaban en ese instante?
—Bueno, mi mamá nunca a estado bien de sus facultades mentales y empeoró cuando mi hermana murio entonces ella también me golpeo de hecho siempre lo hacia.
—Ok. —Pedro me conto sobre su otra familia y lo que me conto Diana me hizo creer en que es su hija—. Diana, ¿tu hermano se llama Jorge y tu hermana Karla?
—Si.
—Entonces eres la hija más pequeña de Pedro.
—Si.
—¿Y tu que eres de ellos Ariadne?
—Soy hermana de Pedro.
—Supongo que la menor porque yo conozco a todos y me dijo que con su hermana mas chica nadie se hablaba.
—Si.
—Bueno, las cosas estan así digo para no quedar como la mala del cuento una ves que lleguen mis hijos y lo digo porque una de tus hermanas es menor que tu cuatro años.
—Y mi padre se divorcio de mi madre cuando yo tenia cinco años bueno casi seis.
—Si. Bueno yo no sabia que tu padre era casado y nunca, me paso por la cabeza, eso si, se la pasaba de viaje me entere de todo una ves que se habia divorciado me conto de ustedes y todo, claro que me moleste a tal grado que pensaba dejarlo me senti en parte culpable del divorcio de tus papás pero el me dijo que tu mamá estaba enferma mentalmente y que a parte de estar enamorado de mi pues ya habia tomado esa decisión tiempo antes de conocerme pero no se atrevia...
—No se preocupe ni si quiera me molesta ese divorcio ni que mi, papá tenga otra familia, lo que si me molesta es que practicamente me dejo sola.
—Diana dime una cosa, ¿Pedro iba a visitarlos o les mandaba dinero cada semana? ¿les llamaba todos los dias?
—No, el nunca hizo nada de eso, la unica vez que se aparecio en la casa fue cuando mi hermana murió, y por mas que le rogue que me llevara con el, no quizo.
—Ahora si me va a escuchar este hombre.
—Señora yo no les quiero ocasionar problemas.
—Tranquila, pero tu papá y yo quedamos en un acuerdo y era que el iba a ir a verlos cada que se le presentara la oportunidad y que cada semana sin falta les iba a mandar dinero y les iba a llamar todos los días, digo despues de todo eran o son su responsabilidad.
—Entiendo.
—Y hagamos algo, no me digas señora, llamame Amanda estamos.
—Estamos —dije regalándole una sonrisa.
—Ok. —en eso se abrio la puerta dejando ver a mis pequeños quienes corrieron a donde nos encontrabamos.

—Mamá hoy fue un dia agotador. —dijo la niña mas grande.
—Yo solo se que tengo demaciada hambre —dijo la otra niña.
—Entro un niño a mi salón —dijo el niño mas pequeño.
—¿Tu no traes novedades Mariano?
—Logre entrar a la selección de futbol.
—Eso es muy bueno. Bueno niños saluden a Ariadne su tía.
—¿Tía?
—¿De quien es hermana? —pregunto la mas grande.
—De su papá. —dije mientras veia a Pedro amenazante, y los chicos se acercaron a abrazarla.
—¿Y élla quien es? —pregunto el pequeño.
—Recuerdan que les conte que tenian hermanos por parte de su papá.
—Si
—Bueno pues ella es su hermana Diana.
—Ay que padre yo siempre le he insitido a papá con que nos llevar a conocerlos. —dije y la abrace y mis hermanos siguieron mi gesto.
—A mi también me hace muy feliz conocerlos.
—Me acerque a abrazar a Diana—. Que bonito es concer a mi hermanastra. —dije mientras ella aceptaba mi abrazo, y ella solo se río creo que alcanzo a captar que estaba jugando.
—Mariano que es eso.
—Ay mamá estoy jugando. No ya enserio es un gusto conocerte, Pedro no sera mi papá biologico pero a fin de cuentas lo es de una u otra forma y bueno eso quiere decir que somos hermanos —dije y le di otro abrazo.
—Chicos pueden subir a sus habitaciones por favor.
—Pero papá...
—Niños tiene que cambiarse el uniforme —dijo Amanda.
—Vamos enanos, ellos tiene cosas que hablar. —dije pues mamá y Pedro se veian molestos.
—Mariano que no baje nadie hasta que les hable.
—Si mamá.