Nuestro Mundo (JinMin) EN EDICIÓN

N -4- M

Aquel hombre era aún más grande que Seok Jin pero jamás se imagino que tenía toda esa fuerza ya que con un solo toque había tirado al suelo a ese sujeto, se acercó con una sonrisa a su cuerpo y puso un pie en su cuello para cortarle la respiración.

— esto te enseñará a no tocar a niños inocentes. — aperto más fuerte el cuello del hombre — Anda ruega por tu puta vida...

— Seok Jin ya basta. —Jimin había salido de su trance— sólo dejalo.

— te dije que no te metieras en mis asuntos. — le dio una mirada de enojo —

Jin además de ser un demonio que le gustaba romper las reglas tenía un propio don, el podía ver el pasado de las personas y también aplicaba con los de su misma especie y ángeles, podía saber muy bien como había sido su muerte y su vida.

Y con sólo tocar a ese sujeto había visto todas las cosas malas que había hecho, todos aquellos hombres que asalto y mató y lo más aberrante... Todos esos inocentes que ayudaba a secuestra y venderlos.

— es solo un simple hombre dejalo ir... —dijo con enojo Jimin tomando el brazo de Seok Jin —

— dejarlo ir... — sintió con malicia — es lo que siempre pedían los niños que esta escoria abusaba...

Jin podía ser un demonio pero aún así reprochaba el actuar de algunos humanos, por eso no dudo en dar el último empujón de su pie para que el cuello de aquel sujeto se rompiera y así quedara sin vida.

— Seok Jin... — reclamo —

— será juzgado y condenado... No es lo que todos quieren para este tipo de escoria... — se apartó del cuerpo — yo solo apresure su destino.

— pero eso no te consierne a ti.

— como sea.

Se encogió de hombros y metió ambas manos a sus bolsillos y empezó a caminar, Jimin estaba por ir a ver si podía hacer algo con aquel sujeto pero escucho a las personas que venía y se hecho a correr.

Tomó la mano de Seok y ambos desaparecieron de ese lugar.

La tele transportación de los angeles lo ayudó.

De un momento a otro ya estaban otra vez en el que era su departamento, Jimin se quito rápidamente el abrigo y miró con mucho enojo al contrario.

— ¿Cómo pudiste matarlo sin piedad?

Jin solo bostezo y no le respondió al más bajo sólo se dirigió a la cocina para ir por un poco de agua.

— no me ignores, no sabes en el gran problema que me has metido.

Jin estrelló el vaso en el que tomaba agua y se giro para ver al pequeño ángel que se había asustado.

— esto no hubiera pasado si tu no te hubieras paralizado frente a ese sujeto, no sabes los pensamientos tan sucios que tenía. — dijo en un tono muy alto — porque no te moviste, se muy bien que tienes un don para protegerte ¿que paso?

Jimin al recordar como se había sentido solo negó y empezó a llorar.

— no lo sé... Solo se que estaba muriendo de miedo...

Seok se quiso acercar a él pero este solo lo esquivo y corrió a su habitación para encerrarse.

— se muy bien porque te quedaste paralizado. _suspiro y luego camino a su habitación_