Capitulo 1

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*Calle*

Fuertes golpes en la puerta y el sonido del timbre del apartamento se vuelven tan repetitivos e intensos que no me queda de otra que levantarme de la cama y arrastrar mis pies por todo el lugar hasta llegar a la puerta, estoy segura que es alguien que se equivoco de apartamento ya que nadie sabe donde vivo a excepción de mi papá y además di la orden de que si por alguna extraña razón alguien más venía no lo dejaran pasar. Sin embargo, no es así y al abrir la puerta me llevo una gran sorpresa, Paula esta frente a mi de brazos cruzados y una aparente molestia.

-Pensé que me iba a tocar tumbar la puerta-me mira fijamente y puedo ver un poco de lastima en su mirada-¿que te paso?

-¿Que haces aquí Paula y como hiciste para subir?-la molestia en mi tono de voz es notable.

-La que debe hacer las preguntas aquí soy yo pero ya tendré tiempo para eso, ahora necesito que te bañes e intentes mejorar ese aspecto de zombie que tienes.

-No quiero hablar contigo, ni con nadie-intento cerrar la puerta pero ella mete el pie impidiendolo.

-Deja de comportarte como una niña, Daniela-su mirada deja claro que no esta para juegos-necesito que te arregles tenemos que ir al hospital-nada más escuchar esa última palabra siento como mi corazón se acelera y me empieza a faltar la respiración junto con leve temblor en mi cuerpo.

-¿Que... que ha pasado?-el miedo en mi voz es notable y siento como mis ojos se cristalizan esperando lo peor, Paula al ver mi estado pone sus manos en mi hombros.

-Tranquila no es nada malo-sonríe pero aun así se ve triste-Poché despertó.

Me quedo paralizada, siento una fuerte presión en el pecho y mi temblor aumenta. Cierro los ojos, me siento débil y sin fuerza así que me dejo caer al suelo sobre mis rodillas, mis ojos se llenan de lágrimas y empiezo a llorar sin poder controlarme; toda la angustia, la incertidumbre y el miedo han terminado pero también soy consciente de que Poché despierto y yo no estuve ahí como tampoco lo estuve durante el último mes. Me levanto rápidamente del suelo y camino hasta mi habitación, me pongo lo primero que encuentro sin darle importancia a Paula que sigue cada uno de mis movimientos.

-Vámonos-tomo las llaves del apartamento y cuando estoy por salir Paula me detiene.

-Espera primero...

-No-me suelto de su agarre y salgo corriendo de allí, necesito verla. Bajo las escaleras corriendo y sin esperar a Paula me montó en el primer taxi que veo, durante el camino lloro pero esta vez de felicidad porque las noches de soledad y agonía han terminado. Entro corriendo al hospital y me dirijo al tercer piso no sin antes haber preguntado dónde se encuentra su habitación, al llegar puedo ver a Vale y a Juan Carlos sentados en una de las sillas y me siento feliz y emocionada, me acerco a ellos y cuando notan mi presencia ambos se paran mirándome sorprendidos. Sin embargo, la expresión de enojo en el rostro de Juan Carlos y la mirada seria de Vale me devuelven a la realidad haciendo que mi corazón se encoja porque se lo que viene.

-¿Que haces aquí, Daniela?-pregunta Juan Carlos de una forma dura y tosca dejando claro su molestia al verme.

-Yo...-respiro-vine a ver a Poché-ambos me miran incrédulos.

-¿Ahora si?-Juan Carlos suelta una risa irónica-después de que desapareciste dejando a mi hija abonada en este hospital.

-Papá...-interviene Vale pero no la deja continuar.

-No te metas Valentina-me mira fijamente-con que descaro te apareces aquí Daniela.

-Juan Carlos-mis ojos se cristalizan-yo...

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