Gélido

26

Para cuando ambos hermanos al fin volvieron a bajar, habiendo antes calmado a Hanzo del pequeño ataque de nervios que había sufrido, encontraron a Aller apoyada en el mesón de la cocina con su teléfono en mano.

Genji compartió una rápida mirada con su hermano, notando como tragaba saliva intentando que las secuelas de la charla que habían tenido arriba dejaran de mostrarse con un temblor en sus manos. Solo movió un poco su cabeza para que le siguiera actuando con normalidad, hablo una vez Aller noto sus presencias; sonriéndoles al apartar su mirada del aparato.

— Vaya, y yo decía que me tardaba.

— Nos disculpamos por eso, le he pedido a Hanzo que me ayudara a buscar algo– Mintió siendo consciente del riesgo de que ella lo descubriera, después de todo no era el mejor mentiroso, pero no hizo nada– Jesse ha tomado algo mío y no lo ha dejado en su sitio.

— Bueno, puedo imaginarlo, no debe ser fácil tener a McCree de compañero.

— No puedes, tendría que vivirlo y no se lo desearía a nadie– Rodo sus ojos hablando esta vez con franqueza– Como sea, ¿vamos? Tampoco debemos salir tan tarde y menos en estas fechas.

Con eso dicho, Genji camino hacia la puerta dejando salir primero a Aller, quien ya tenía encima su conocido saco marrón y el gorro; quizás lo había buscado mientras ellos estaban hablando. Hanzo fue el último en salir tomando su chaqueta y la bufanda del perchero junto a la puerta, cerrando la puerta tras su tensa espalda y comenzando a caminar a la par de ellos.

El centro de la ciudad no estaba lejos por lo que no tuvieron necesidad de tomar algún transporte, caminaron entre cortos silencios por las calles teniendo cuidado de no tropezar y resbalar sobre el pavimento congelado en algunas zonas. Pero aun con todos sus cuidados las calles estaban llenas además de personas que iban de un lado a otro, por lo que hubo una ocasión en la que vieron como (Tn) resbalaba sin tiempo de ser atrapada por alguno.

Sacándole un jadeo apenas cayó al suelo con una sonrisa doliente, aceptando luego de un momento las manos de ambos hermanos, quienes se acercaron sin pensarlo.

— No tengo mucho en contra del invierno, pero eso no ha sido lindo.

— Huh, te acostumbras luego de venir aquí dos navidades seguidas– Genji volvió a retomar el camino luego de un momento, ligeramente divertido.

— Entonces a la próxima nos vamos a un lugar más cálido, ¿les parece?

— A mí no me molestaría en lo absoluto– Dijo ahora Hanzo, al otro lado– El problema sería el lugar, no hay un lugar a en este continente que sea cálido durante las fechas.

— Eso lo puedo solucionar, ¿les suena atractiva la idea de pasar la siguiente navidad en Sudamérica?– Ambos la observaron con rostros confusos– ¿Qué pasa?

— ¿No crees que es mucho esfuerzo alquilar una residencia en otro continente por un mes y tener que tomar un avión para llegar allá?

— Lo del avión no te lo niego, pero todo el tiempo estamos subiendo a ellos por misiones– Hizo gestos con sus manos mientras seguía andando, sonriendo de oreja a oreja– Pero jamás dije que alquilaríamos un hospedaje allá, se quedaran en mi hogar. Hay suficiente espacio para todos.

Ambos se detuvieron para observarse un momento, sorprendidos por sus palabras antes de volver a tomar paso, siendo Hanzo el primero en preguntar.

— ¿Por qué tienes una propiedad en Sudamérica? Eres de Europa y las vacaciones de Overwatch no son tantas, seria innecesario tal cosa.

— ¡Wau! Espera, jamás dije que fuera de Europa– Elevo un poco su voz al aclarar, frenando un poco su paso–,... aunque ustedes tampoco preguntaron.