Royalty [YunJong] (YunHoxJongHo) ATEEZ

Capítulo 35

YunHo rara vez se sentía sorprendido por algo, creía que ya lo había visto todo incluso con la edad que tenía, pero se sorprendió cuando leyó una carta electrónica de HongJoong donde el Rey le rogaba - en pocas palabras - que fuese a visitarlo, debido a que se sentía sumamente mal. Ya estaba en los planes de YunHo visitarlo debido a que la boda de HongJoong con MinGi era hoy, pero el rubio le había dicho que los planes se cancelaban, que no habría boda y que soltaría a MinGi.

Por eso era que estaba poniéndose su armadura y guardando su espada, luego de la fiesta de compromiso con JongHo, habían sido casi nulas las veces que había usado su armadura, pero la situación lo requeriría.

—Gigante, ¿estás aquí? — JongHo entró con una mirada perdida a la habitación, y luego quedó en blanco —. Yunnie... ¿A dónde vas?

JongHo estaba claramente desconcertado, él estaba buscando a YunHo para decirle que ya se estaba haciendo hora de alistarse para la boda de HongJoong, pues el otro Reino quedaba relativamente lejos del suyo y no podían llegar tarde. Lo que menos se hubiese esperado era ver a YunHo con su traje de Caballero y espada, listo para salir.

—No te preocupes. Volveré.

—P-Pero... ¿Qué hay de la boda de HongJoong y MinGi? ¿A dónde vas?

YunHo reajustó su cinturón, creía que lo había dejado bien, pero se equivocó. Luego dio unos pasos largos con sus piernas hasta llegar a estar cara a cara con el rostro temeroso de JongHo. Suponía que el rubio pensaba que se iría y no regresaría nunca más, así que lo mejor era quitarle esos feos pensamientos y ser honesto con él sobre lo que iba a hacer.

—HongJoong acaba de escribirme, está mal. Va a liberar a MinGi y a cancelar la boda.

JongHo abrió su boca. Bien, él ya sabía la razón por la que MinGi se había vuelto prometido de HongJoong de un día a otro, aunque se le había removido el estómago al escuchar eso de parte de YunHo - era demasiado horrible obligar a muerte a alguien a estar con otra persona que no quiere -, también había escuchado mucho de YunHo sobre el comportamiento del Rey, así que si estaba mal, era porque realmente estaba mal.

O sea, era un asunto bastante serio. Probablemente HongJoong estaba esperando a YunHo para cancelar oficialmente la boda, pues aún no había ninguna declaración.

—Iré contigo — JongHo tomó a YunHo de la mano y lo jaló hacia afuera, caminando rápido entre los pasillos.

—¿Qué? Claro que no. No te voy a exponer a cualquier posible peligro.

—Pues yo no dejaré que vayas solo, vas conmigo o no vas.

YunHo rodó los ojos - aprovechando que JongHo no podía verlo -, pero sonrió un poco. Le causaba ternura la actitud del rubio. Probablemente no lo dejaba ir solo porque todavía no le agradaba del todo HongJoong.

—Está bien. Acepto porque es algo importante, pero quiero que sepas que en otra situación no te dejaré ganar.

—Sí claro, lo que digas — JongHo soltó una risita. Cuando ya estuvieron fuera del Castillo, subieron a su camioneta seguido de los Caballeros - que subieron en las camionetas que iban en frente y detrás de la de YunHo y JongHo -, con YunHo en el asiento de piloto y JongHo en el de copiloto —. Además, MinGi es una persona muy importante para mí, no quiero dejarlo solo.

—Está bien, cariño, lo entiendo. Veremos qué ocurre...

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—¿Qué diablos pasa por tu cabeza ahora?

HongJoong no dignó a voltear a ver al chico que iba a ser su futuro esposo, estaba más concentrado en darle algunas caricias a Darong, quien ronroneaba suavemente bajo su tacto, pero que igualmente estaba alerta por si debía defender a su amo. Eso por un lado, la otra razón era porque no quería que el Caballero le viera el rostro, estaba todo horrible por haber llorado por un buen rato y sinceramente lo que menos deseaba era una crítica/burla sobre lo desastroso que se veía.

—Tal y como Jun te dijo, puedes irte. De hecho, si quieres, pídele las llaves a Jun para que te lleves a MoonByul contigo.

—¿Qué? ¿Esto es una prueba o algún producto de tu enferma mente?

—Sólo lárgate y déjame en paz. No quiero volver a saber nada de ti.

TaeMin se había ido antes de lo esperado por una emergencia en su laboratorio de pociones, así que no había podido insistir en la idea de que le diera una porción para olvidarse de sus sentimientos por MinGi, tendría que sufrir un rato más, lamentablemente.

—Oye, esto no es gracioso ni nada, déjate de tonterías y vistete.

—¡Lárgate!

HongJoong se levantó de su sofá para mirar el rostro de MinGi, esta era una de las escasas veces en las que no se había intimidado por la altura de MinGi a comparación de la suya. Estaba enojado y quería estar solo, sobre todo sin el Caballero, porque sabía que su presencia no era bien recibida para el alto. Está bien, él iba a librarlo de su maldito tormento si tanto le jodia la vida.

—Lárgate antes de que mande a mis Caballeros a matarte. Lárgate de mi vista; de mi vida. ¡Vete!

Al menos, logró decir todo aquello sin que se le cortase la voz o rompiera en llanto, una pequeña felicidad para su orgullo, o lo poco que quedaba de él.

—Esto es demasiado loco — MinGi rió, todavía creyendo que se trataba de una broma hasta que vio que HongJoong no se reía con él, sino que mantenía su rostro neutro, mirándolo con ira. Carraspeó, pasando una de sus manos por su cabello —. ¿A qué se debe esta decisión tan repentina?

—Eso no es problema tuyo. Vete.

—Yah. Mira, tú no eres así, eres un ser irritante, sádico y realmente molesto, pero sé que no te rindes tan fácil — eso último provocó que HongJoong quisiera reír.

—¿Crees que esto ha sido fácil? Bien, vete con eso en mente.

—Deja tu actitud de lado. Se supone que tú-

—¡No sabes nada de mí! ¡No sabes quién soy ni nada!

Darong rugió furioso cuando escuchó a su amo gritar con la voz entre cortada, creía que le estaban haciendo daño, así que trotó con sus patas rápidamente hasta llegar al lado de HongJoong, mirando amenazador al chico alto.

—Dile a tu gato que se controle, no te he hecho daño.

—No tienes idea, ¿verdad? Ugh. Sólo lárgate — las lágrimas comenzaron a descender una por una de los ojos del rubio —. No quiero verte, ¿es tan difícil que entiendas eso? Me rindo contigo. No puedo. Por eso te dejo ir, aprecia que te dejo irte con vida y con tu llorona novia. Vete de mi Castillo y de mi Rein-

De todas las posibles respuestas que HongJoong se esperaba de parte del Caballero, estaba la pequeña opción que le interrumpiera, y sí, lo había hecho, pero no de la forma en la que creía posible - o sea, no creía que MinGi se atrevería. El Caballero lo estaba besando, lo tenía bien agarrado de la cintura y sus labios totalmente pegado a un beso lento, y como tenía los ojos abiertos de la impresión, veía el cuerpo de MinGi levemente inclinado hacia abajo para poder besarlo correctamente. Al contrario de sus ojos abiertos, MinGi tenía los ojos cerrados, dándole un beso tan lento - pero amoroso - que hizo que en cierto punto, se sintiera mareado.

—¿Q-Qué fue eso...? — susurró HongJoong.

—Vistete. No iré a ningún lado.

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¡Feliz San Valentín! 💞💞 Los amo a todas pero en especial a @Pintikim Sarangue ❤