teenager sucks ☹ | Matías Candia.

13.3

No supe cómo acabamos llegando allí.

Empezando porque desperté en un sitio donde no sabía siquiera donde estábamos. Y acabando con que había tenido que estar arrastrando a alguien desde allí. El camino se me había hecho corto, los síntomas de probablemente no haber comido en días parecían haber desaparecido, como si de repente me hubiera olvidado de ellos.

Sabía que ese era el hospital donde estaba internado el primo de Matias, pero no me dejaba otra opción, no conocía ninguno más cerca.

Cuando abrimos las puertas de la sala de urgencias inmediatamente le puse sobre una de esas sillas de ruedas que dan a los que en peor estado vienen. Empuje la silla por los pasillos.

Una de las enfermeras salio corriendo de la zona de recepción a ayudarme.

'Déjamelo a mi' dijo amablemente agarrando la silla por mi. No supe como reaccionar. Le llevaron por un pasillo largo detrás de una puerta. No había dicho ni una sola palabra en todo el camino. Su piel había estado completamente pálida, con un subtono amarillento. 

Me senté en una de las sillas de la sala de espera. Note alguien sentarse a mi lado y luego rozar mi hombro con la punta de su dedo. 

'¿Kat?' preguntó la hermana de Matias. Olvidé que probablemente la familia siguiera allí. No había pasado tanto tiempo desde lo de su primo. 

'¿Donde esta Matias?' preguntó, caí en que no había visto entrar a su hermano en urgencias. La sala de espera estaba separada por una pared del pasillo de urgencias. Parecía preocupada, era la única de la familia en el lugar. 

Llevaban sin ver a Matias alrededor de cuatro días. Podrían pensar incluso que había desaparecido. 

'Dentro' respondí después de un largo silencio. Intentaba prepararme para no caer en el gran pozo emocional en el que estábamos todos desde la sobredosis de Joaquin. 

'¿Dentro dónde?' preguntó confusa pero se abalanzo a abrazarme cuando me vió llorar. '¿Esta dentro de aquí?' insistió pero era un mar de lágrimas que no podía parar.

'Esta ingresado' dije. Su hermana no dijo nada, tampoco podía ver su rostro porque estaba abrazándola.

'¡¿Por qué?!' preguntó sobresaltada después de unos segundos. 

'Porque...' sequé mis lágrimas como pude y me separé de ella. 

'No lo sé' respondí. 

'¿Has estado con el?' preguntó.

Pensé que no me entendería. Era su hermana, probablemente su familia le había estado buscando durante todos estos días. Ahora la cuento que su hermano había sido ingresado en el hospital. Después de lo que le había pasado a su primo Joaquín y que tenia a toda la familia preocupada. No sé decirle encima por qué su hermano esta aquí.

'Si' respondí. 'Tu hermano es...'

'Un drogadicto' respondió seriamente por mi, interrumpiéndome. La mire desconcertada y asentí con la cabeza, luego me di cuenta de que ella mas o menos lo insinuó la ultima vez que estuvimos todos juntos. 'Lo sabia' contesto con un tono frío, parecía que no tenia palabras para expresar lo que sentía. 

'No sabia que...' negaba con la cabeza mientras temblaba y tartamudeaba de la nerviosez del asunto. Ella colocó su mano sobre mi hombro. 

'No te preocupes' respondió, comprendiendo mi situación. '¿Te crees que yo pude hacer algo?' preguntó mirando a un punto fijo, con la cabeza semi-agachada. 

'Pasaba los días en casa de papá porque era la única forma en la que mamá no le viera drogado...' contó. '...lo sabia y nunca pude decírselo' se puso a llorar, ambas nos abrazamos. 

'...piensas que si no se lo dices a nadie le estas haciendo un bien. Confías en que algún día dejara de hacerlo pero luego solo sabe ponerse peor' 

Sabía expresarse muy bien para la edad que probablemente tenía. Solo podía pensar en lo destrozada que tenia que estar. Mi dolor no se podía comparar con el suyo.

'Matias lleva siendo un drogadicto desde hace mucho, pero nadie pudo frenarle de lo que se estaba convirtiendo' dijo finalmente. 

Entonces descubri que no era la primera vez.