Capítulo 17: Noche en vela

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Anne sabía que su amiga lo único que hacía era posponer lo máximo posible las cosas. Estaba segura de que estaba haciendo tiempo y encontrarse a Hugo durmiendo cuando llegasen. Pero todo aquello lo único que hacía era crear un ambiente demasiado tenso.

Rafa jugaba con su móvil a un juego de palabras, Eva rebuscaba las gominolas de color verde entre los frutos secos que les habían puesto junto a la bebida y ella se encontraba haciendo avioncitos de papel con alguna que otra servilleta.

―¿Otra te vas a pedir? ―Preguntó Anne al ver a Eva pedirle al camarero una fanta.

―Pero si solo es una fanta...

―No me refiero a lo que es, sino a que nos deberíamos haber ido hace ya... ―protestó.

―Yo creo que me voy a pedir un chupito de vodka ―comentó Rafa sin despegar los ojos del juego.

―No, aquí la mente despejada. 0 alcohol.


Tras un rato largo jugando a las cartas, Nick y Hugo se habían ido a la habitación del primero a charlar mientras esperaban a los otros tres. Se habían puesto cómodamente. Hugo con el pijama que se había traído horas atrás, ya que Eva lo había invitado a dormir aquella tarde, y Nick con un pantalón de pijama y una camiseta de sisas anchas. Ambos se encontraban sentados en la cama mientras compartían vivencias y peripecias.

―Pues sí que están tardando mucho, ¿no crees? La Eva debe estar hartica de sujetar velas, illo ―rió Hugo acomodándose en la cama del primo de su novia.

―No creo que... ―pero Nick no terminó de decir la frase ya que no sabía qué decir, teniendo en cuenta de que él sabía la realidad.

―Ya, lo sé, soy un cansino... Pero es como te he dicho antes, no quiero que Rafa tenga que vivir eso con la chica esa que le gusta. Es jodío, créeme. Aunque cuenta las cosas con una sonrisa, pasé un tiempo chungo cuando tu prima me contó lo de aquel chico... Y esto puede parecer raro, pero gracias a mi club de fans remonté y decidí darle una oportunidad.

Nick asintió pero no dijo nada, sabía perfectamente a qué se refería, pero en su momento desconocía que se trataba de su prima. Conociendo y sabiendo la realidad, dudaba de que le hubiera dado el mismo consejo que cuando no era consciente de la verdad. El joven se acomodó en su cama escuchando lo que el otro le decía.

―Es que dirás, ¿qué tendrá que ver un club de fans? La persona que lo lleva dio la casualidad que ese día me había escrito, porque a veces me escribe, ¡es genial! Pero ese no es el caso ahora, la cosa es que, ya sabes, muchas veces es más fácil desahogarse con alguien que no se conoce y eso es lo que hice... Oye, no te estoy aburriendo, ¿verdad ―Preguntó mirando hacia él.

―No, no te preocupes, te estoy escuchando ―afirmó Nick.

―Ah, bien, pues lo que decía, illo. Le respondí y básicamente me desahogué. Debió flipar pero no me dijo nada de haberle asustado ni nada. En fin, que me animó mucho durante muchos días y bueno, yo creía que estaba mal si perdonaba a Eva, pero en plan mal visto. Así que quien lleva mi club de fans me dijo que no pensase en lo que dijeran los demás y sí en lo que yo sentía, que todo era mi decisión. Incluso me dijo que hiciera lo que hiciese no implicaba que al final fuera lo correcto y que incluso las cosas podrían salir de otra forma. Y todo eso me hizo ver que para mí, aunque era algo que me dolía, quería perdonar a tu prima ―dijo con orgullo.

―Hiciste lo que sentías.

―¡Eso mismo! Aunque al principio fue difícil luego remontamos nuestra relación. Tu prima y yo nos queremos mucho, ¿sabes? Y es muy buena niña, así que espero que lo que te he contado no lo interpretes a mal ni nada, ¿eh?

Nick negó con la cabeza.

―No te preocupes. Te he entendido bien desde el principio. Conozco a mi prima y sé cómo es.

Hugo bostezó repetidas veces.

―Oye, tú, esta gente se ve que va a tardar lo que no está escrito. ¿Te importa si me quedo aquí ya que estoy tumbado? Además, que como al final Vicky está en casa no me apetece irme a la habitación de Eva y que su tía piense mal... Que Rafa cuando venga duerma en el suelo si eso. Aquí cabemos los dos bien ―afirmó esto último.

―Sí, no te preocupes, un poco apretujados pero cabemos.


Hugo había tardado poco en dormirse, algo que en el caso de Nick no había sido posible, así que se enteró de cuando su prima, Anne y Rafa llegaron a casa. Fingió dormir cuando Anne y Rafa entraron a la habitación y esta le explicaba de dónde podía coger las mantas y sábanas para dormir allí. También pudo comprobar, a lo largo de la noche, que no era el único que no podía dormirse, ya que escuchaba a Rafa resoplar y dar vueltas. Sin embargo, no quiso hacer ver que él tampoco se había dormido, no le apetecía, prefirió quedarse callado hasta que el sueño le venció.

La teoría del IvoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora