XVII

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Cuando se reunieron con los demás Lobos de su generación, que eran en total 20, San pudo sentir sus miradas curiosas en el Leoncito que venía malhumorado detrás de él.

¿Ahora que había hecho?

Era difícil mantener a Wooyoung feliz, agregándole que al Felino no le importaba devolverle el favor, por el contrario sentía que trataba de hacerlo explotar, retando su paciencia en cada comentario y ataque agresivo de la fiera.

-No lo puedo creer- genial, pensó San, ahora Yunho se unía al comité de hacer su día lo más estresante que sea posible.

-Conoces las reglas, si no es de la Manada no puede participar de la Caza- lo amostazo el Lobo-Oso, como si el Lobo-Hámster tuviera marcado en la frente "moléstame".

-Es mi...ahhh, mira Yunho ya quedo claro que está invitado por mí especialmente y más de tres miembros de la Manada lo aceptan en la caza - aunque Wooyoung anduviera proclamando que ya le pertenecía, San no se sentía tan seguro, ¿Cómo esa temible fiera podía ser reclamada por un Alfa tan debilucho? No se sentía con el derecho de proclamarse su Alfa.

-Pero si más de la mitad de la Manada se opone no será aceptado- San gruño sabiendo lo que vendría a continuación– ¿Están todos cómodos con nuestro invitado felino de hoy? – se dirigió a los demás, que se mandaron de inmediato miradas entre ellos, confundidos.

-¿Enserio tienes que hacer esto? Mira Yunho te aprecio como familiar, pero hoy no estoy de humor para una de tus escenas, así que te agradecería que no me provoques- San tenia la voz y una buena actitud de Alfa en esos momentos, lástima que su apariencia y los pequeños bultos en sus cachetes, no fueran exactamente amenazadores.

-Es fácil dejarse engañar San, pero adivina que hace Wooyoung a tus espaldas-el Leoncito dejo atrás sus pucheros para prestar atención a esa acusación, ¿de qué estaba hablando ese estúpido y gran Alfa? Él no tenía nada que ocultar.

-No necesito hacer nada por atrás como los cobardes- adelantándose, se enfrentó de frente y sin vacilar con el temible Lobo de gran tamaño. Esa muestra de coraje en un pequeño Omega que parecía estar bañándose en su sudor con ese gran abrigo encima. –Di lo que quieras, yo no estoy tratando de engañar a nadie.

-Pareces muy sincero con esas palabras tan fuertes pero entonces ¿Qué estaban tratando de probar acorralando y amenazando a Semi en un lugar privado? Es una Omega de nuestra Manada más pequeña y débil que tu ¿ese es el valor del que tanto presumen? - oh, Wooyoung había olvidado ese pequeño incidente, trato de no mostrarse perturbado pero en su interior su León no dejaba de dar vueltas ansioso.

-Hey no me llames débil y no me metas en esto- objeto la victima escandalizada, que se encontraba con la mayoría de sus primos, que murmuraron entre si enfadados.

-¿Acaso estoy mintiendo Semi? ¿Wooyoung te acorraló con su séquito de Leonas y te amenazo con desgarrarte en piezas si no te alejabas de San? - sonaba terrible de esa forma, el Leoncito estaba en problemas, sabía cuan protectores eran los Alfas Lobos, no iban a perdonarle una ofensa así.

-Uff... Si lo hizo– todos alrededor se exaltaron, los Alfas en especial no podían permitir que una Omega en su protección fuera agredida. Semi pudo ver que San estaba dispuesto también a molestarse y reprender al León. -Esperen, si se lo conté a Yunho fue porque insistió hasta el cansancio, pero en verdad no quería crear un escándalo al respecto. No voy a mentir, me asusto la agresión de Wooyoung pero he investigado, ustedes deberían hacer lo mismo, porque así entenderían que es justificable, todas las especies tenemos diferencias, los Leones son agresivos y dominantes, Wooyoung no lo oculta, solo está pasando por una etapa difícil. Yo lo entiendo y como fui la agredida deben dejar en mi criterio si lo perdono o no.

¡No soy un corderito! {Sanwoo} [1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora