FÉNIX [Cornelio Vega] TERMINADA

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-Baja esa puta pistola Gala Amapola.
Mi sangre volvió a hervir
-¿Y tu quien eres para decirme que hacer, Ratón?.-pregunté sin dejar de apuntar todavía a la puta Marisa.
-Soy un Guzmán, y tienes que hacer lo que te ordeno.- amenazo a lo que yo reí y de un solo movimiento me giré teniendo ahora la pistola entre mis cejas, la diferencia de alturas no era mucha jaja, y Julissa era quien apuntaba a Marisa.
Levante mi cara y agarre la pistola del puente presionándolo más contra mi frente.
-Yo soy una Dávila Mendoza Casillas, ahijada de un Guzmán y un Zambada, ¿te parece poco o sigo contando?.
-Solo, dile a la Samantha que baje su pistola, si llega a hacerle algo, te vuelo el ceso aquí mismo; ¿como la vez?.-me volvió a amenazar.
-Quiero ver qué lo intentes cabron, ¿si sabes lo que tú vieja y la piruja estaban haciendo? ¿si sabes que iban a permitir que violaran a UNA NIÑA? ¿si sabes que estaba dispuesta a matar a MI HIJO si fuera porque llegó Iván y su gente? ¿Si sabias? ¿O quieres que te lo explique con manzanas?.
-No me importa, no dejare que la mates con mi hijo dentro.-dijo
Ahora si reí como desquiciada
-JAJAJAJJAAJA vaya, en verdad cuanto drama haces por el bebé del Nini, acabas de perder a tu familia por culpa de una morra que te hizo pendejo todos estos meses JAJAJAJA, eso es demasiado bajo, hasta para ti compi.- con fuerza retire el arma de mi aprovechando que se descuido, se había quedado helado al igual que el Ricardo y la puta.
-Upps, ¿no se lo habías dicho ya, querida?.-me gire a verla y me reí en su cara.
-Estás loca, ya no sabes ni que inventar.-dijo Marisa temblando
-¿Loca? ¿Yo? Sí, estoy loca, soy una asesina, narcotraficante, puta, zorra, mamona, hipócrita y todo los adjetivos que se te puedan ocurrir, pero no soy una mentirosa, y ya venía siendo hora de que tu secretito saliera a la luz, ¿o que? ¿Pensaste que ya tendrías tu vida resuelta porque hiciste creer a un chapito que le darías un hijo? Morra, estás enferma! Tienes que aceptarlo, TÚ ERES UNA COCINERA, acéptalo! Estas como la otra zorra, una Cocinera y una sirvienta, vaya gustitos que se cargan los patrones jajajaj.-nos reímos Samantha Julissa y yo.
Ovidio no decía absolutamente nada.
-Negro, llévatelos a todos a la 026, iré a ver a mis niños y luego me encargo de estas, NO ME LES TOQUES NI UN SOLO PELO, si es necesario duérmanlos y amárrenlos, pero los quiero ahí en 2 horas.-les ordene a mis hombres.- ¿nos vamos?.-les pregunté a las muchachas.
-Well done, nuestro trabajo aquí ha terminado.- dijo Samantha.
Le pusimos el seguro nuevamente a las armas y salimos con Iván y Alfredo junto con nosotras, escuche como empezaron a quejarse estas morras y luego oí el sonido de un disparo, ¿a quien habrá matado este pendejo?
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70 votos y sigo, como q ya se les duerme picarle a la estrellita.
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