FÉNIX [Cornelio Vega] TERMINADA

21

Subí al cuarto para cambiarme ahora yo, fui al armario y empecé a buscar algo cómodo pero elegante, estaba muy concentrada buscando cuando sentí que alguien entró al cuarto, lo que se me hizo raro fue que no empezara de perico, como era costumbre para el.
Me giré para ver qué estaba haciendo y lo vi mirando con demasiada atención al gran cuadro que tenía pegado a la pared, de cuando estaba embarazada.

Era de mis fotos favoritas, tenía exactamente 7 meses y fue un día antes de que Archi naciera, tuve una pequeña sesión y en esa solo traía una fina sábana blanca cubriendo mi cuerpo, pero estaba tan finita que hacía que mis pezones se translucieran un poco, y es por eso que decidí tenerla mejor en mi cuarto, en lo que mandamos a agrandar la otra para la sala

-¿Que tanto me zorreas?.-le pregunté haciendo que saliera como de su trance.
-Te ves....-No completaba la frase
-¿me veo...?
-Te ves hermosa.-me dijo dejando de ver el cuadro y mirándome ahora a mi
-Lo sé, sin duda fue mi mejor etapa.-suspire al recordar aquellos bonitos momentos.-Bueno, iré a cambiarme, sigue intentando comunicarte.-le indique y me metí al baño a cambiarme
(...)
ahora estábamos en el centro de Culiacán, tuvimos una pequeña junta con los encargados de todos los territorios y les explicamos el plan, reforzaron todas las posibles entradas y salidas de sus áreas y se cargaron de balas y municiones, estando ahí pudimos comunicarnos con Alfredo, estaban buscando cruzar la frontera lo cual no les permití, y mande a gente por ellos.
Tenía un plan, un plan que si queríamos que funcionara teníamos que seguirlo al pie de la letra, sin un error, cualquier pequeño paso en falso podría ponernos en peligro a todos.

Se fueron todos a sus puntos, y nos quedamos Vega, algunos otros que nos ayudarían a conseguir todo lo que necesitáramos y yo.
No se cuantas horas habían pasado, la noche empezaba a caer al igual que todas las llamadas de los carteles cercanos que les había llegado el rumor que iban a ejecutar al chapo.
Ya no solo era gente de Culiacán, comenzaron a llegar poco a poco las cabecillas de carteles cercanos, llegaron los Zambada, los Antrax, la gente del Cholo, comenzaron a bajar de la sierra, teníamos a los Salgueiro de chihuahua, y gente de durando también comenzaba a llegar.
Pero todo era disimulado, no podíamos llamar tanto la atención para que no se olieran lo que estábamos apunto de hacer, estábamos distribuidos en distintas casas de seguridad, todo por debajo del agua.
-Gala, ya pasan de las 11 y tu no has comido nada desde que llegue a tu casa, te traje unos tacos.-me habló Vega dándome una bolsa y una coca.
Los agarre sin renegar y me avente al sillón tirando al suelo todo el perico que tenían en la mesa.
Pinches atascados
-Que desperdició mi Reina.-me dijo este wey
-Me caga la droga.-le dije viéndolo y haciendo mueca de asco
El de río
-Vaya que ironía.
-Nosotros la hacemos y vendemos, no la consumimos cabron.-le dije parándome del sillón y dándole un manotazo a su celular donde había hecho una línea para echársela.
Ya las cosas habían cambiado, no podíamos empezar a tirar a lo loco como lo habíamos hecho anteriormente, ahora estaba involucrada la DEA y la marina, esto era las grandes ligas, y si queremos demostrar que nosotros podemos tomar las riendas del cartel el Mexico, teníamos que hacerlo a mi manera, the rules has changed