Corazón de bruja

Erufu toshokan

Pov Lucy

— Parece que está mejorando — afirmó Wendy con un leve tono esperanzado.

Michelle, Natsu, Gajeel, Levy, Wendy, la peli azul misteriosa y yo nos encontramos en mi enfermería. Todas las velas están encendida. Todos nosotros no encontramos al rededor de la camilla en la cual descansaba inconsciente la chica de cabello azul.

Aquella misteriosa chica ahora lleva uno de mis pijamas por que su ropa estaba totalmente empapada y eso podría complicar el hecho de tratarla. Aún así su ropa ya está siendo lavada.

Wendy y yo éramos las únicas que estábamos al lado de la chica. Cada una estaba a un lateral de la camilla tratando a la peli azul. Ambas quitamos nuestras manos de encima suyo.

Coloqué mis manos en mi cintura y entre cerré los ojos para después soltar un suspiro de agotamiento. Habeces pienso que tengo una especie de imán para criaturas mágicas heridas. Entre cerré los ojos y miré al rostro tranquilo de la chica.

Ella tenía su cuello y su brazo derecho totalmente cubierto, pero hay algo que me sigue teniendo con la intriga. Me pareció ver a esa peli azul hablar antes de desmayarse, pero no conseguí escucharlo. Quizás Natsu la haya escuchado.

— Sí. Pero ... ¿No os parece extraño? — pregunté en voz alta girando a ver a Levy y Gajeel — ¿Quién envenena a alguien sin intención de matarla? Tendremos que preguntarle cuando despierte.

Tras declarar eso me crucé de brazos y solté un suspiro de agotamiento. Esto es un problema tras otro, sólo espero que esta ninfa de agua despierte lo antes posible, hay algo que parece más o menos claro.

Seguramente está chica haya sido encarcelada por poco tiempo.

Si me fijo bien, ella tiene marcas recientes en sus muñecas. Pero creo que las únicas que nos hemos dado cuenta somos Wendy y yo. Además de que ella tenía una marca de forma circular con una estrella dentro de color negro en su tobillo. Un tatuaje casi imperceptibles.

— Michelle ¿Puedes hacerme un favor? — pregunté girando a ver a mi guardiana.

Ella asintió con una sonrisa en sus labios. Ella juntó sus manos en frente de ella y sonrió. Yo suspiré agotada dejando caer uno de mis brazos.

— Claro que sí hermanita — respondió.

— Asegúrate de que la ninfa se mantenga hidratada, por favor — le pedí.

— No hay problema hermanita — afirmó ella con una sonrisa.

Inmediatamente ella comenzó a caminar hacia el baño. Seguramente iría a por un balde de agua y una toalla para así poder hidratar a la peli azul.

— Lu-chan, no te preocupa que la persona que le hizo eso a la ninfa puede venir a por ti – preguntó Levy la cual ya no se escondía detrás de Gajeel.

Parecía que poco a poco se hiba acostumbrando a estar rodeada de criaturas mágicas. Pero claro, aún seguía un poco incómoda así que siempre permanece al lado de Gajeel o al lado mío.

Ella tenía sus manos juntas detrás de ella y sus hombros encogidos, pero al menos no parecía asustada cómo en otras ocasiones.