Esta historia en un principio iba a ser un simple One-shoot, pero ... la historia me gustó tanto que decidí hacer una historia completa.
En ésta historia seguiremos la historia de amor de un dragón y una bruja blanca.
Pero también habrá un objetivo...
La noche ya había caído, dos encapuchados caminaban por las calles oscuras. En frente de los encapuchados se veían unas grandes puertas las cuales pertenecían a un bar.
Los encapuchados se miraron entre sí y asintieron, se acercaron a la puerta y la abrieron lentamente, no llamando la atención de ninguno de los presentes. Cosa que consiguió con facilidad gracia a que dentro de aquél bar se encontraba envuelto en un ambiente fiestero y alegre.
Los camareros iban y venían, sirviendo comidas y bebidas, en su gran mayoría alcohólicas. Algunos borrachos y no borrachos bailaban alegres girando sobre sí mismos y algunos cayendo al suelo tropezando con sus propios pies.
Otros reían, contando historias y chistes las cuales hacían reír a carcajadas a varios hombres y mujeres los cuales se encontraban en el lugar.
Además, en ese bar se podían ver una cantidad de especies variadas las cuales se encontraban en aquél bar. Pero lo que nunca habría en aquél lugar sería humanos. De eso cualquiera podría estar seguro.
Los encapuchados comenzaron a caminar por el bar hasta que un borracho, un licántropos tocó el hombro de uno de ellos.
El encapuchado se detuvo y giró a ver a aquél licántropo el cual estaba obviamente ebrio. El licántropo tenía su ceño fruncido.
- ¡Eres tú! ¡Maldito hijo de puta! - Tras decir aquello aquél hombre trató de golpear al encapuchado el cual con agilidad esquivó el ataque.
- Se confunde de persona - dijo una voz femenina proveniente del Interior de la capucha.
La chica encapuchada alzó su mano delante de la otra la cual ya había dado un paso al frente para tratar de devolverle el golpe a aquél licántropo el cual, era mucho más alto que ambos.
- ¿De que me *hip* hablas? ¿Que -
Antes de que aquél hombre pudiera seguir hablando sintió cómo una mano femenina colocó su mano el el brazo de licántropo llamando la atención de aquél gran hombre.
Aquél ser se encontró con una aterradora mirada de parte de una chica de cabello corto y morado. Su rostro era muy hermoso, de nos ser por su mirada ensombrecida haciendo que tan solo uno de su dos ojos fuera visible.
Su único ojo visible era verde y tenía un aspecto reptiliano con la característica pupila similar a los de una serpiente.
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- Cómo siga causando problemas me veré obligada a llamar a la dueña del bar - advirtió la peli morada con un tono amenazante.
Aparentemente las palabras de aquella mujer a la cual casi le sacaba dos cabezas el licántropo tragó duro. Bajó su mano y tras soltar un gruñido se alejó de aquél grupo de personas.
- Disculpen, algunos clientes pueden volverse un poco violentos - dijo la oji verde con algo de pena.
La chica de cabello morado rasco su nuca al mismo tiempo que soltaba una risa nerviosa se entre sus labios. Ahora se podía ver perfectamente la vestimenta simplista de la chica. Su cuerpo era muy voluptuoso y atractivo para cualquier hombre o mujer.
