Best Friends... Or Not. «Ashton Irwin» [TERMINADA]

Capitulo 11.

                           Ashton.

El beso duró aproximadamente 30 segundos. Unos 30 segundos tan confusos, nuevos y placenteros.

Fue mi primer beso y lo di con mi mejor amiga. Estoy tan confundido ahora.

Nos separamos y nos miramos, ambos estábamos sonrojados. Soltamos una risa nerviosa.

— Wow — habló Michael —. Eso fue mejor de lo que esperaba, si les soy sincero.

Los demás estuvieron de acuerdo.

— Eso fue intenso — dijo Calum.

Si que lo fue, amigo.

Preferimos dejar de jugar, porque se puso un poco incómodo el asunto. Tiempo después, mamá se asomo por la puerta.

— Chicos, ya tienen que dormirse, ya es tarde — nos ordenó.

Todos estuvimos de acuerdo. Mamá cerró la puerta luego de despedirse y nosotros nos dispusimos a acomodarnos para dormir.

— Ah, ¿las parejitas dormirán juntas? — pregunto Mike con tono burlón.

— Si van a follar, follen en silencio, si son tan amables — dijo Calum —. Soy muy joven para traumarme.

— Calum, ¿podrías dejar de ser tan tarado por unos instantes? —preguntó Luke, acostándose a un lado de Raquel.

— Es Calum, el no cambiará jamás —dijo Mike soltando una carcajada.

Todos reimos.

— Ya, chicos. Duerman — dije yo mientras apagaba la luz de la habitación.

— Que descansen, chicos — dijo Raquel.

Yo volví a la cama y me recosté junto a Val. Ella me regaló una sonrisa perezosa y cerro sus ojos, lista para dormir.

Yo tengo mucho que pensar.

Pronto solo se escuchaban los pequeños ronquidos de los chicos y las respiraciones tranquilas de las chicas. Yo seguía despierto. No podía dormir.

Tengo que organizar mis jodidas ideas. Y mañana tengo que hablar con Anna sobre el beso. No quiero que todo se ponga incómodo entre nosotros. No me gusta. No lo soportaría.

Y siento que ese beso saco los diminutos sentimientos que le tengo a Anna.

Me gusta Anna.

Y eso está mal.

Diablos, nuestra relación es como de hermanos. Los hermanos no se besan, dios. Y ella así me ve. No creo que sienta algo por mi así como yo siento cosas por ella. Así que lo nuestro nunca pasaría. Por eso tengo que deshacerme de esos sentimientos. Porque solo me lastimaría a mi mismo.

Se que pronto ella gustará de alguien y pronto tendrá su primer novio. Y yo solo tengo que estar ahí, para protegerla y darle consejos, no para sentir celos. No es sano.

Así que, estoy decidido. Tendré una novia. Y no será Anna.

Espero encontrar a alguien que me guste tanto como me gusta Anna.

Espero.

Ah.

Trato y trato, pero no puedo dormir. Aún puedo sentir los lindos labios de Anna sobre los míos y... ¡Diablos, Fletcher! ¡No estás cooperando!

Me levanté con cuidado de la cama y me dirijí al baño. Cerré la puerta con seguro y me acerque al lavabo. Me moje la cara y me mire al espejo. Toque mis labios y sin darme cuenta sonreí.

¡Ya no soy virgen de labios!

Tardé un poco de tiempo encerrado en el baño, hasta que escucho unos suaves golpes en la puerta, seguido de un susurró.

— Ash, ¿está todo bien? — susurró Anna.

Abrí la puerta con cuidado. Ahí estaba ella. Tenía unos ojos de preocupación. La tomé de la mano y la metí al baño junto a mi. Volví a cerrar la puerta con seguro.

— ¿Qué te pasa? ¿Estás bien? —pregunto ella poniendo una mano en mi mejilla. Estábamos cantante cerca, en realidad.

— Si, solo que tenía tanto en la cabeza que no podía dormir — dije pegando más mi cara a su mano. Ella acaricio mi mejilla.

— ¿Qué pasa por tu cabeza, Ash? —pregunto ella en un susurró.

— El beso — solté, directo al grano.

— Oh — murmuró ella.

— ¿Podemos hablar de eso? —le pregunté. Ella asintió en respuesta —. Primero que nada, ¿sabías que fue mi primer beso? — le pregunté un poco apenado. Ella soltó una exclamación de sorpresa.

— ¿Encerio?

— Si — solte una risita —. Fuiste mi primero beso, Valery.

Ella golpeó mi mejilla que estaba acariciando. Yo me reí. Odia su segundo nombre.

— Bueno, es bueno saberlo — dijo en tono juguetón.

— Y me gustó que mi primer beso haya sido contigo. Eres mi mejor amiga y te conozco tan bien como tú a mí.

— Tienes razón, nos conocemos mucho. A mí también me gustó que tú primer beso sea conmigo, Fletcher —dijo. Y yo reí rendido, se vengó. Tampoco me gusta mi segundo nombre.

— Pero, no quiero que las cosas se pongan raras entre nosotros. Fue un buen beso, claro. Pero no quiero que todo se vuelva, incómodo.

— No te preocupes, Ash. No pasará. Tomemos el asunto como un simple juego de amigos — dijo relajada.

Ella es la mejor.

La abracé fuerte.

— Eres la mejor, ¿lo sabías? — dije con mi cabeza recargaba sobre la suya.

— Ya me lo habías hecho saber, si — murmuro contra mi pecho. Ella es muy bajita.

Los dos reimos.

— Bien, ya que aclaramos las cosas. Creo que ya es hora de ir a dormir.

— Estoy de acuerdo — dijo ella, separándose de mi.

Ambos salimos del baño y con mucho cuidado de no despertar a nadie, llegamos a la cama.

Nos acomodamos y esta vez, dormimos abrazados. Ella sobre mi pecho. Y no se sintió incómodo.

Estoy jodido.

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