El es el típico chico que se mete con cualquier chica con tal de satisfacerse.
Ella era la típica chica que se acostaba con cuantos ella quería, hasta que lo dejó, pero eso no duró mucho ya que lo conoció a él.
Cole Sprouse y Lili Reinhart crean una...
Lili: El esta ahí, justo al frente mío, se ve más guapo que antes, siempre lo ha sido, con sus labios entre abiertos que anhelo besarlos, las manos en sus bolsillos de su chaqueta y sus ojos fijados en mis labios, se que quiere besarme y yo también quiero eso.
En este mes siento que lo he conocido tanto como el a mi, se que es diferente conmigo, pero lo único que viene a mi mente del porque es asi, es porque seguro al principio ninguno de los dos buscaba algo serio, solo sentíamos atracción y necesidad de tener un buen orgasmo, pero para mi eso cambió, obviamente para el no.
Se que Cole tiene buenos sentimientos, se que algún día encontrara a la chica perfecta y ella hará que se enamore, ella lo hará feliz, lo cambiará, lo amara y lo cuidara, sentiré tanta envidia de ella, pero estaré muy feliz por el, por la persona que hizo que me enamore sin que yo quiera.
-Bien...¿por que me trajiste aca? -pregunto Cole sacándome de mis pensamientos.
-Quería pedirte disculpas. -digo para desviar la mirada de sus labios y lo miró a los ojos. -Seguro pensaras que soy una loca por molestarme de cualquier cosa.
-Siempre has sido loca Lils. -dice con una sonrisa burlona.
-Y tu un idiota. -digo para soltar una risa junto a él. -¿Entonces me disculpas?.
-Si. -dice asintiendo. -¿Tu también me disculpas?.
-¿Por que?-pregunte confundida.
-Por esto.
Cole se acerca a mi y me agarra de la cintura haciendo que mi cuerpo choque con el suyo , roza mis labios provocandome y yo sonrió.
Pega sus labios con los míos,me besa despacio, como si fuera a cámara lenta, después de un rato de estar asi, me pide permiso para meter su lengua y yo gustosa lo acepto, sus labios siguen igual de suaves, hasta mas se podría decir, baja sus manos hasta mis nalgas y los aprieta, ganando un gemido de parte mio.
-No sabes cuantas veces soñé con tus gemidos. -susurra Cole con la voz ronca.
-¿Y si mejor sigues besándome? -pregunte mordiéndo la comisura de su labio provocándolo.
-¿Acaso quieres que termine follandote?-murmura en mi cuello para después dar pequeños besos.
-No te rogare, Osito. -digo intentando aguantar la risa ante el nuevo apodo.
-Pídemelo, nena. -dice dejando de besar mi cuello y me mira rozando nuestras narices.
-Follame Cole. -digo haciendo un puchero.
Cole me levanta poniendo sus manos en mi trasero para sujetarme y yo enredo mis piernas en su cintura, el empieza a besarme un poco desesperado y entre el beso camina hacia la cama y me tumba.
-Ven aca, Osito.-digo soltando una risa.
-¿Al menos dejaras que me desvista? -pregunto sacándose la chaqueta junto a su polera apresurado.
-No entiendo porque no te sacas primero los pantalones si es lo mas importante. -digo y voto mis tacos.
-Falta tu vestido y acuérdate que yo tengo mas ropa que tu. -dice y se desabrocha el botón de sus pantalones.
-¿No quieres quitarmelo tu? -pregunte enarcando una ceja divertida.
-¿Y tu no quieres quitarme este maldito bóxer?
-Entonces ven ya y dejemos de hablar para que estemos los dos iguales. -digo para morderme levemente el labio.
Cole se sube a la cama riendo y me atrae hacia el, yo pongo mis manos en su entrepierna y el me mira divertido, se que quiere algo, pero tendrá que pedirlo.
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