Me levanté de la cama al escuchar el despertador. Hacía ya un par de días desde que habíamos vuelto del viaje y habían empezado las vacaciones. La verdad es que no me importaba Navidad. Yo no tenía familia y mis amigos tenían que pasarla con las suyas, por lo que la estaría sola. A pesar de eso, el 27 iríamos todos juntos a cenar al Ichiraku para entregarnos nuestros regalos y a celebrar el cumpleaños de Hinata.
Hoy era 24, el día de nochebuena. Iría a comprar los regalos para todos, ya que mañana era festivo y así no tendría que salir el 26. Fui al cajón donde estaba el dinero a coger suficiente para las compras. Tenía que buscarme un trabajo a media jornada. No es que fuera pobre, pero las pensiones de orfandad sólo estaban diseñadas para los gastos esenciales, y necesitaba una fuente de ingresos fija para este tipo de cosas.
Me vestí con unos vaqueros negros rotos por la zona de las rodillas, un jersey negro de punto, una cazadora verde con pelo negro en el borde de la capucha y unas botas negras. Metí el dinero, el móvil y las llaves de mi casa en un pequeño bolso negro y salí a la calle.
Cogí el autobús para ir al centro comercial. Mientras iba en él, empecé a buscar trabajos para menores a tiempo parcial. Ahora que lo pienso, Sasuke era empleado de una tienda de helados. Le podría preguntar cómo consiguió el trabajo...
No pude evitar mirar la lista que había hecho con los nombres de todos mis amigos. La tenía para poder ir tachándolos y así asegurarme de que compraba todos los regalos. La había hecho unos días antes del viaje, ya que el fin de semana iba a ir yendo a comprarlos, pero al final me dio pereza y no lo hice. El nombre de Sasuke estaba el primero en la lista, con dos corazones a los lados.
Dejé de mirar al papel y bajé del autobús, pues ya había llegado a mi destino. Empecé a ir de tienda en tienda buscando el regalo perfecto para cada uno de los chicos. Pronto en la lista quedaron pocos nombres por tachar y yo estaba cargada a más no poder de bolsas. Sólo me quedaban los 2 regalos de Hinata (uno por su cumpleaños y otro por Navidad) y habría acabado con todos.
Paseaba por el centro comercial buscando algo que comprarle. Se me ocurrió que podía buscar algún vestido, por lo que entré a la primera tienda de ropa que vi en busca de alguno bonito. Después de mirar muchos, me decidí por un vestido de tiras blanco.
Estaba esperando en la cola a que la cajera me lo cobrará mientras pensaba en qué más podía comprarle. La verdad es que a Hinata no había nada en concreto que le gustara. No es que odiara todo, ni mucho menos, pero tampoco tenía una gran admiración por nada.
Decidí dar vueltas por todo el centro comercial hasta encontrar algo que pudiera gustarle. Mis pies ya empezaban a dolerme de tanto caminar, cuando vi un pequeño puesto al lado del supermercado. En él, tenían collares con piedras de colores. Tenían escrito al lado un pequeño texto explicando que representaban. Me fijé en el azul:
La piedra azul representa la calma, la paz interior.
El collar era precioso y la descripción encajaba perfectamente con Hinata. Me acerqué a la vendedora para comprarlo.
Vendedora: Buenos días. Le cobro ese collar?
_____: Sí. Puede envolverlo para regalo por favor?
Vendedora: Claro que sí guapa. Todo lo que ves aquí está de oferta al 2 por 1, así que puedes coger lo que más te guste.
_____: Oh, gracias.
Empecé a mirar por toda la mesa, buscando algo que me gustase. Me fijé en un anillo que estaba hacia el lado derecho. Tenía una piedra roja en el centro y el resto era de plata y cuero negro, con unas letras japonesas plateadas pegadas a lo largo del anillo.
Vendedora: La piedra roja representa al corazón, el amor. Es perfecta para regalársela a tu novio.
Me guiñó un ojo y siguió envolviendo el paquete. No pude evitar mirar de nuevo la lista. El nombre de Sasuke seguía en lo más alto, rodeado por los corazones.
Vendedora: Anda traelo aquí que te lo envuelvo.
_____: Y-yo n-no!
Vendedora: Sí, sí. Estos jóvenes de hoy en día hacéis tan complicado todo... Sólo dáselo, vale? Y si no te atreves, al menos te habrá salido gratis.
La vendedora cogió el anillo, lo metió en una caja y empezó a envolverla. En cuanto terminó, me dio ambos regalos y yo le pagué. Me fui a tomar un batido a una cafetería de los alrededores antes de volver a casa. Después de acabármelo, regresé en el autobús. Al llegar a mi hogar, me encontré con una pequeña cajita que tenía una nota apoyada sobre ella en frente de la puerta. Agarré el papel y lo leí.
Sé que Navidad es mañana, pero como no iba a poder traértelo, aquí tienes tu regalo de Navidad. Espero que te guste mucho.
Abrí el regalo y me encontré con una pulsera de plata. Estaba formada por una cadena y una pequeña placa con los números 5/10/2019 grabados en ella. Miré a los lados intentando ver a la persona que había dejado el regalo, pero no había nadie cerca.
Entré en mi casa y subí a dejar las bolsas en mi habitación. No dejaba de darle vueltas al número de la pulsera. Era evidente que era una fecha, y una bastante reciente, pero, que podía haber pasado ese día...?
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Holaaaaa.
Perdón por la hora, pero es que no pude subirlo antes. Espero que os gustara mucho el cap y quería deciros que la historia está a punto de acabar :(. Lo más probable es que haya otro capítulo y luego ya el final. Gracias, de verdad, por todo el apoyo que ha estado recibiendo durante estos 41 capítulos (que no son pocos ;) ). Os amo <3.
Bye <3.
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Mi hermosa casualidad (Sasuke x lectora) | EDITANDO |
FanfictionA veces en una apuesta puede acabar convirtiéndose en mucho más que un juego entre dos adolescentes y una farsa puede acabar volviéndose real. Soy _____ Izumi y esta es mi historia, la historia de mi hermosa casualidad. Au: Alternal Univers. Empezad...