La Gitana Del Coronel

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-Juvia había gritado porque vio a la tía Acuario toser una gran cantidad de sangre que cayó al suelo. Nos removimos tratando de soltarnos de mi madrina pero ella solo me tomo en peso y nos llevó a su carreta con Gray. Para ese entonces Juvia ya estaba llorando asustada por la tía.

-tosió sangre?

Asentí mientras miraba los cristales moverse despacio por el viento.

-mi madrina dijo que era debido a la tos, que pronto estaría bien. Juvia y yo no paramos de llorar en aquel entonces, ella cayo rendida primero. Mi madrina la tomó en peso llevándola a la cama donde estaba durmiendo Gray y los colocó ahí. Esa noche no supe que pasó adentro pero al día siguiente mi mamá junto con mi tía vinieron por nosotros. Juvia estaba feliz de ver a la tía Acuario bien, todos creímos que las cosas ahora estarían bien. No fue así. A los días mi tío Escorpio comenzó a padecer los mismos síntomas que la tía Acuario. Ellos mismos hicieron la elección de no acercarse al grupo por miedo a contagiarlos,Juvia quedó al cuidado de la abuela a pesar de las súplicas y llantos de la pequeña ella se la llevó. Al pasar los días vieron que no volvieron a toser sangre, creyeron que ya estaban bien por lo que todo volvió a la "normalidad se puede decir" Pero fue una tarde de juego donde vimos que nada había cambiado.

-corre Lucy! Papá nos va a atrapar!

-soy el rey escorpión! Venid aquí criminales!

Reíamos contentas, habíamos salido a la pradera con toda la familia, mis padres veían sentados como mis tíos nos perseguían a ambas. La abuela se encontraba riendo viendo las ocurrencias del tío Escorpio.

-no!!

-no podrán escapar de la sirena más fuerte de los siete mares!

La tía Acuario me cogió comenzando a dar vueltas conmigo mientras yo reía, Juvia había sido atrapada por el tío escorpio y este le hacia cosquillas. Los cuatro reíamos felices de nuestro juego, entonces el tío bajo a Juvia y fue cuando todo comenzó..

-cuando bajo a Juvia el pecho comenzó a dolerle,mi papá se levantó alarmado, la tía Acuario al ver esto me bajo y corrió hacia mi tío quien para entonces estaba caído sobre sus rodillas y manos, tratando de respirar.

-papi! Papi qué ocurre!?

Ví como mi tía se apoyo a su lado con lágrimas en los ojos tratando de ayudarlo, mamá tomó mi mano y me dijo que me quedará donde mi abuela, ante aquello pose mis grandes ojos sobre su figura, quien miraba con preocupación lo que pasaba.

-mamá...qué pasa? Por qué mis tíos sufren así?

-no lo se cariño, pero lo averiguaremos.

-luego de aquello llevamos a los tíos a la caravana, el viejo al vernos mostró un semblante preocupado y se acercó a hablar con la abuela de cosas que una niña de cuatro años jamás entendería pero una joven de 22 si. Estaban mal, ellos no durarían mucho tiempo vivos, la abuela se mostró fuerte ante eso e incluso hablo sobre la posibilidad de hacer un hechizo para curarlos.

-un hechizo? Osea que ustedes si hacen hechizos.

-así es, el viejo dijo que aquello solo haría que su fin se acelerará. Ambos cayeron en cama luego de eso, tenían fiebre muy alta, Juvia y yo no podíamos acércanos, no porque no quisiéramos sino porque trataban de nuevo protegernos. Fueron días duros, a veces les faltaba el aire y veíamos con impotencia como trataban de ayudarlos.

-ellos murieron primero, verdad?

Negué con mi cabeza cerrando mis ojos, los recuerdos comenzaban a aflorar, un trueno se escucho y sentí mi mano comenzar a temblar pero aquello no duro mucho porque sentí la mano de Natsu sujetar la mía con fuerza.