FANFICS CORTOS

El Mayordomo.

-Maldita sea, Logan. Este café está helado. -dijo el señor Kendall Schmidt devolviéndole la infusión a su mayordomo, Logan Henderson.
-Perdón, señor. Ya se lo caliento.
-No. Déjelo, ya se me fueron las ganas de beber. Vaya a dormir, es tarde. 
-Bien. Buenas noches, señor Schmidt. 
-Adiós, Logan. 

El jóven caminó por la mitad de la casa para llegar a su cuarto mientras pensaba... en que ese día se cumplía un año desde que trabajaba para Kendall, un año desde que se escapó de su casa y de los golpes de su padre, también rescató a su madre de los maltratos, a la cual le compró un pequeño piso en un edificio del centro de la ciudad con el dinero que logró llevarse de su antigua casa. 
También era un año desde que, buscando trabajo en un periódico sentado junto a su madre, encontró el aviso que Kendall había publicado, solicitando un mayordomo. Al ver la paga no lo dudó ni 2 segundos y llamo, por suerte lo hizo a tiempo y lo aceptaron. 
Y por último pero no menos importante, un año desde que vio a Schmidt y a sus hermosos ojos verdes, quedó encantado, conmovido, shockeado...en pocas palabras: enamorado. 
Llegó a su habitación y comenzo a correr las sábanas para acostarse en su gran cama. Se quitó la camisa, el saco, la corbata de moño y los pantalones que formaban parte del uniforme y se puso unos pantalones de piyama junto con una camiseta sin mangas. 
Pasaron 10 minutos cuando sintió que algo se hundía en el colchón, junto con unas manos que lo abrazaban. Inmediatamente se volteó.
Y lo vió.
Y trago saliva. 
Dios. 

-S-señor, ¿qué hace aquí? ¿Por qué entró? ¿Pasa algo?
-Qué bonito cuando te sonrojas. Y tus oyuelos, wow. Eres...
-Señor...
-Dime Kendall, bebé. 
-Yo...
Silencio forzado por un beso de Kendall. 
Éste duró varios segundos, fue tierno, se separaron por falta de aire. 
-Feliz aniversario, Loggie.Pero por favor, ya no trabajes para mí, quédate, pero seamos algo más que jefe y mayordomo. 
El ahora ex-mayordomo sonrió. 
-Te quiero. 
-Yo más. Seamos novios. 
-¿Es una orden? -dijo gracioso. 
-Mmmhhh, màs o menos. -rió. 
-Sí, quiero. 
-Oye, el matrimonio para después -rieron y se besaron de nuevo. 
....
-Cómo pasó esto, kendall? -preguntó Logan sudand, riendo y mirando las prendas tiradas por toda la habitación. 
-No sé -contestó de la misma manera. -Tal vez... las estrellas se alinearon, querido Logan.

-lemmefuckkogan