Black Ghost

Capítulo 96: Berek II.

Vamos a ver si tengo mejor suerte con mi Joya número tres, porque la verdad no he tenido suerte hasta ahora.

Sé que solo poseo seis Joyas y una habilidad mágica al final la cual no controlo bien, pero si sigo con este mismo ritmo terminaré usando todas mis Joyas, puesto que el objetivo de Berek es matarme para luego desaparecer mi cadáver es la forma de alejarme de su nieta definitivamente.

Con mi dedo señalo donde Berek y con un rayo de luz amarilla trapazo su pecho.

Veo que escupe sangre luego de varios segundos de mi luz haber trapazado su pecho.

—Parece que ese juguete tuyo puede penetrar mi piel y hacerme daño —Es tanto mi odio hacia él, que me hace feliz escucharlo sentir dolor.

—Por fin veo caer tu sangre, que se siente sentir dolor el mismo que le provocas a los demás por intentar acercarse a tu nieta.

Señalo mis dedos hacia Berek, el cual empieza a correr y le lanzo mis rayos de luz amarilla.

Mi primer rayo lo esquiva desapareciéndose mágicamente, un poco hacia adelante y sigue corriendo.

El segundo rayo, pero con mi dedo de la mano izquierda lo esquiva dando un giro elegante hacia su derecha, luego se desaparece y aparece mágicamente detrás de mí con su puño directo a mi cara.

Me defiendo con mi mano izquierda quién es que intercepta, el golpe evitando que su puño llegue a mi cara.

En esa misma posición yo deteniendo su mano derecha, que venía hacia mi cara le lanzo una patada, con mi pierna derecha lo cual Berek se protege con su mano izquierda.

Aprovecho que mi mano izquierda que está libre, para lanzarle un rayo de luz amarilla el cual conecto directo a su cerebro y el ogro quedo un poco aturdido.

Con esa oportunidad que tengo, creo una espada hecha de luz amarilla y se la clavó en el estómago.

Sin importar que mi espada de luz amarilla está clavada en su estómago me lanza unos de sus rápidos puños, con su mano derecha y yo me convierto en miles de partículas de luz amarilla volviéndome, a componer uniéndose todas esas partículas en las cuales me separé lejos del ogro de Berek.

Lo veo con la mano puesta donde le clave mi espada de luz amarilla, aunque no esté herido por fuera sé que por dentro debe de estar lastimado.

—Nunca imagine que un gusano como tú pueda hacerme daño —¿Gusano yo? No sé por qué siempre me mira con desprecio ese miserable.

—Es que subestimas a todos, por algo he alcanzado el rango Elite en Herel —Lo peor de todo, es que no sé si vuelva vivo a Herel.

—Pones a mi nieta a desafiarme por estar contigo nunca tampoco imagine que llegaría ese día, a lo mejor matarte resultará más entretenido de lo que me esperaba —Con esta serian dos veces la cual me asesinan, pues también morí en el otro mundo donde estuve en coma por tres años.

—No pienso morir solo por haberme enamorado de una chica, solo Yolanda puede alejarme de su vida si algún día lo considera, pero no usted, es mucho pedir que entienda eso —Este viejo está loco, ¿Por qué no me deja tener sexo con Yolanda hasta, que ya no me queden fuerzas, es mucho pedir acaso?

—El cual no entiende eres tú, piensas que le dejaré a mi nieta a un perverso como tú cuando lo único que has demostrado es querer de ella es sexo por ser la más hermosa de toda la escuela —Es cierto, Yolanda despierta la lujuria en muchos, eso no se puede evitar.

—Si lo admito quiero tener sexo con ella todo el tiempo que la veo, pero es normal porque es la chica la cual me gusta, imbécil —Lo peor de todo es que voy a perder la colección de videos porno, el cual tengo en mi computadora si muero aquí.

—Eres muy irrespetuoso para pertenecer a mi familia —Como puedo respetar a alguien como él.

—No lo respeto porque usted nunca se ha ganado mi respeto —Y nunca se lo ganará, no me puedo alejar de Yolanda solo porque yo no le agrade a él.

—¿Y quién necesita tu respeto? Si lo que siempre has sido para mí, una plaga y tengo que eliminarte —Solo está aquí para matarme, no puedo morir aquí.

—Necesitas mi respeto, porque soy el novio de su nieta maldito bastardo —Parece que le dolió por su rostro de disgusto que puso.

—Los cadáveres no hablan.

Se le está acumulando una gran cantidad de aire alrededor de Berek, es como si fuera una tormenta de viento.

Expulsando luego de un tiempo al final todo ese viento de forma violenta, se observa su primera transformación.

Su primera transformación es un panda y su aura mágica, que ahora rodea su cuerpo en forma de panda tiene ese color blanco y negro.

No pensé que vería la primera transformación de este ogro.

Con su puño lo agita hacia mí y de su brazo sale una gran cantidad de viento, es una ráfaga con una presión muy fuerte.

Con su fuerza me lleva impulsado hacia atrás hasta parar en un bloque de piedra haciéndole un gran agujero, maldita sea eso dolió.

En un pestañeo esta delante de mí con un puño que viene hacia mí y por instinto me divido en miles de partículas de luz amarilla lejos del ogro, pero flotando en el aire me vuelvo a unir con todas las partículas de luz en la cual me había separado.

Su puño de viento no solo desapareció por completo ese bloque de piedra cuadrado, sino que parte del suelo la cual estaba delante del ogro de Berek, en realidad su poder destructivo ha aumentado con esa primera trasformación en forma de panda que representa su magia.

Aun flotando en el aire al ver el ogro que falló su ataque se aparece mágicamente de lado mío con otro puño, pero no tan destructivo como el anterior y lo esquivo aun estando los dos en el aire.

Luego de esquivarlo le lanzo con mi espada de luz amarilla, la cual anteriormente le había clavado en el estómago y lo obligó a utilizar su primera transformación.

Trato de cortarlo en dos con mi espada de luz, pero Berek lo esquiva y voy por un segundo espadazo tratando de cortarle la cabeza, pero se desaparece mágicamente y apareciendo encima de mí con sus dos manos me da un golpe en la cabeza.

Con ese golpe me impulsa hacia abajo de forma rápida, pero caigo de pie haciendo un pequeño agujero con mis pies por la presión con la que venía.

Me divido en miles de partículas de luz amarilla porque Berek bajaba con unos de sus famosos puños destructivos.

Pero no me uno en el aire como la vez anterior en el bloque de piedra, si no en el suelo se van uniendo mis miles de partículas de luz amarilla, en la cual me había separado y veo a Berek hacer un gran agujero con su puño.

Ahora se pone de pie y camina como si fuera rey del mundo hasta detenerse, pero fuera del agujero que provocó.