Capítulo 87: Último Oponente.

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Tengo varios minutos esperando a mi último oponente de la Liga Platino, el de la idea de secuestrar a Haru, pero no le sirvió de nada la estrategia porque nunca usé mi tercera Joya en aquel laberinto mágico.

Aunque a este tipo por lo que le hizo a Haru lo haré sufrir para que respete, pero la ansiedad me mata ya no tengo paciencia no se integra.

Una voz se escucha en todo el Coliseo de Ligas mayores parecen que van a anunciar algo.

—Por este medio sentimos informales, que Camilo no se encuentra bien del estómago, por eso ha decidido rendirse concediéndole la victoria Alberto.

Y un grito se escucha de alegría entre el público, todos felices menos yo, apuesto que es un mentiroso solo no quería enfrentarse a mí porqué le falló su plan y sabía que le iba a dar una paliza en nombre de mi amiga.

¡Qué suerte tiene!, muy inteligente de su parte, pero es un cobarde y tantas ganas que le tenía, pero que se puede hacer mejor me olvido de él.

Me desintegran y mis padres me felicitan es mi primera lucha mágica con ellos observándome, pero no veo a Evelyn por ningún lado debería estar aquí.

Después de muchas felicitaciones por un grupo de fanáticos, por fin puedo escaparme en medio de la multitud solo quiero ir a mi dormitorio y descansar.

Al llegar a mi dormitorio y abrir la puerta veo a mi hermana bailando, tiene unas pantaletas negras muy cortas y un polo che corto que se le ven los pezones, ya que no tiene brasieres abajo puesto.

La veo moverse de manera sensual ahora delante de sus piernas, mientras pone sus manos en su rodilla y de arriba a abajo mueve su trasero a ritmo de la música, luego se para poniendo su mano en los cabellos desarreglándoselos y haciendo un pequeño giro sexy.

Realmente me ha impresionado la forma en que se mueve ahora se dirige a mí.

—¿Me deseas hermano? —Con la sensualidad en como me lo pregunta, resulta abrumador la fuerza de tracción que provoca el cuerpo de Evelyn.

—Si te pudiera mentir te diría que no —Después de tanto tiempo, no puedo evitar sentirme atraído por ella.

—¿Quieres quitarme este poloche? Por favor tengo calor —La forma que tiene Evelyn de seducir a un hombre es letal, no tiene defectos, como casi inevitable caer en la tentación.

—Claro.

Veo sus pezones y toda su piel morena que linda figura tiene Evelyn me late mi corazón fuerte, en verdad ahora tengo sentimientos por ella sin darme cuenta desde que la vi luchar en la Capital 13.

—Sé que amarte es un pecado hermano, por eso no hay salvación en mí, cada vez que te veo en el Coliseo es mi perdición, no debería hacer esto porque es Yolanda quien quiere hacerte muy feliz, sin embargo, ella no sabe que eres tú al hombre al cual quiero devorar casi todo el tiempo estoy deseándote —¡Ya no lo soporto más! Me quiero lanzar sobre ella y devorarla.

—Esto huele a peligro, estoy hecho un desastre en mi mente por ti —Lo siento Yolanda, no lo pude evitar.

—Es una pena el cual tengas que ocultar todo eso, serle infiel a Yolanda conmigo no debería ser pecado, sí el destino lo ha querido así —Solo debo mantener esto en secreto, sin que Yolanda se entere.

—Solo fingiremos que esto nunca pasó y solo ha sido producto de un mismo sueño, el cual tuvimos al mismo tiempo y déjame acariciar tus senos que me están volviendo loco al no poder tocarlos.

Se ríe y pones sus senos en posición a mí, para que haga con ellos mi alimento este día.

Empiezo a lamberlos con mi legua sus pezones, mientras mi mano izquierda está acariciando su vagina el calor aumenta, el aroma de su piel me vuelve loco aumentando el fuego que llevo por dentro.

La tumbe en la cama estamos besándonos su piel contra mi piel, nos exige una sola cosa y es el deseo de quemarnos por dentro ambos.

Siento unas pasiones intensas por Evelyn, que me desnudo sin darme cuenta.

—Hazme tuya hasta máximo poder que no quede nada de ti, que no me entregues esta noche.

Me besa luego se quita las pantaletas lo único que llevaba puesto abriéndome sus piernas, un libre acceso hasta el fondo de sus deseos y se lo clavo de una manera tan profunda que estremece todo su cuerpo en busca de más placer.

La estoy penetrante duro y no puedo dejar de moverme quiero más de Evelyn quiero más de su placer, de su pasión quiero más de ella y así mismo con sus piernas enredaras en mi cintura me empuja hacia dentro de ella por más de mí.

Su cara la cual pone de lujuria mordiéndose los labios mientras pide más y que siga así es el motor de mi locura, quiero mucho más de lo que su cuerpo puede darme.

Pero por tanto placer no puedo más tengo que descargarme en ella y aprieta sus sentidos, absorbiendo lo que su placer tomo de mí.

Luego de terminar me encuentro más calmado ante el morbo del momento que viví hace unos minutos atrás olvidándoseme de todo el mundo.

Se va caminando desnuda al baño y se baña, saliendo así mismo desnuda se pone ropa delante de mí aún sigo pensando que su cuerpo es una escultura no me cansaría de verla desnuda, su piel morena hace un bello adorno con su cabello riso.

—Ya me tengo que ir recuerda esto fue un sueño —Evelyn me dice que fue un sueño, sin embargo, fue un sueño muy realista y apasionado.

—Si, gracias me sentí muy cálido con tu cuerpo junto al mío en el sueño —Es difícil no quedar adicto al cuerpo de Evelyn.

—Yo también lo disfrute mucho nuestro sueño —Me mira con unos ojos, los cuales me hipnotizan, a querer repetir el mismo sueño de estar entre sus brazos.

—Aún estoy demasiado confundido, para estar consciente de lo que estoy haciendo... Adiós Evelyn nos vemos mañana.

Mi hermana se despide también de mí, sin embargo, pienso que sería más fácil ver a alguien decirme quien es mejor, de Yolanda o Evelyn porque en mi estado actual no puedo elegir por ningunas de las dos.

Mientras, me quedo dormido hay mismo en la cama sin levantarme.

Black GhostDonde viven las historias. Descúbrelo ahora