Querida Vargas menor...

Capítulo 16

Bogotá, Noviembre 2010

- Narra Susan -

Jueves por la mañana. Me levanté sin ganas de ir a la escuela. Mis ojos estaban hinchados.
Una vez más, en la noche lloré. Fue inevitable. Solo que lloré bajo. No quería que Martín me escuchara.
No quiero que nadie me escuche de ahora en adelante llorar.
No me gusta ser el centro de atención de nadie o nada. Prefiero vivir entre la gente, sin ser conocida, o que se preocupen demasiado por mí.

Me bañé, me puse mi uniforme y la sudadera que me regalaron mis amigos. Me quedaba larga, ví la talla y era grande de hombre. ¿En serio? ¿Talla de poste andante? Aunque no me disgustó cómo se me veía. Intenté arreglar mi cabellos y me apliqué bálsamo en los labios.
Salí de la habitación y Martín ya estaba abajo esperándonos a Simón y a mí.
Me senté a su lado y se me quedó viendo. Como queriéndome decir algo, pero no dijo alguna palabra.
Simón bajó y nos despedimos de mi mamá.
Salimos e hicimos el mismo recorrido para ir a la escuela. Otra vez, íbamos en silencio. Cada quien en su mundo.
Llegamos a la escuela y ya estaban nuestros amigos.
Los saludé y me fuí a mí salón.
Pasaron las 4 clases, e inició nuestro descanso. Me fuí al jardín de siempre y me senté bajo el mismo árbol.
Martín llegó conmigo, y se acostó poniendo su cabeza en mis piernas. Me miró a los ojos, y se sentó.
No decía nada. Solo me veía.
De repente, se lanzó a mí y me abrazó fuertemente y pude escuchar cómo lloraba. Lloraba con fuerza y de una forma tan desgarradora que me dolió escucharlo así. Intentaba decirme algo, pero el nudo en su garganta se lo impedía. Yo solo lo abracé y lo calmé.
En cuanto pudo, habló...

-Lo extraño más de lo que creí. Es decir, cualquiera diría que apenas van días sin él, pero me mata saber que no lo volveré a ver. Lo necesito a mi lado- Dijo aún abrazado a mí-.

-Yo también lo extraño mucho- Dije sin saber qué decir-.

-Y me refugio en ti, ya que, ven raro que un hombre llore- Dijo limpiando sus lágrimas-.

-Yo no lo veo raro, ni Simón, ni los otros. A lo mejor tus amigos si, pero es porque tienen una mente cerrada. Referente a mi papá. Te entiendo. Lo extraño como nunca- Dije intentando no llorar-...

Seguimos "desahogándonos" hasta que sonó la campana.
Entré a mi salón y yo solo quería llegar a mi casa.
Pasaron horas y por fin, era hora de irnos a casa.
Me puse mis audífonos y no me tomé el tiempo de buscar a Villamil o mis hermanos o a sus amigos. Y me fuí sola a casa.
Le dí a la playlist aleatoria y sonó la canción "Wake me up, when september ends" de Green Day, y mi corazón se estrujó, ya que, la canción la escribió Billie Joe Armstrong por su difunto padre. Toda una historia detrás de está canción.
La sentí muy mía, y lágrimas salieron de mí.
Caminé hasta mi casa, y no me topé con ninguno de los demás. Saqué mis llaves y abrí la puerta. Al entrar, se notó la falta de mi papá. Todo estaba solo sin él con música y diseñando en el comedor.
Dejé mis cosas en su lugar, y las ganas llorar no faltaron, pero me las aguanté. Me aventé sobre el sofá y mejor me dormí...

Me desperté porque escuché muchos ruidos cerca de mí. Me levanté y fuí por un vaso de agua. No escuché lo que estaban diciendo, pero se notaba que estaban distraídos...

-Hola- Dije caminando hacia la cocina-.

-Hola Susan- Dijo Alejo-.

-Hola Sus... ¿Susan? ¡Aquí estás niña!- Gritó Martín-.

-¿Qué qué? ¿Aquí estaba?- Preguntó Simón-.

-Ammm sí ¿Dónde más?- Dije-.

-Mi bebé, nos tenías preocupados, ya que, no te encontrábamos por ningún lado- Dijo Villa abrazándome-.

-Una vez más, nos mató de un susto- Dijo Isaza sentándose en el sofá-...

Pasó el rato, y mi mamá nos llamó para decirnos que iba a ir con Clemencia a su casa para hablar, junto a las mamás de Alejo e Isaza, entonces ellos se quedaron en la casa más de lo previsto.
Yo me subí a mi habitación para quitarme el uniforme, y me puse unos shorts de mezclilla cómodos y la sudadera de mis amigos y yo.
Me senté en la cama y me puse a leer.
Pasado un rato, Villamil entró y se sentó a mi lado.
Me abrazó y habló...

-Sí necesitas llorar, aquí estoy- Dijo muy tierno-.

-Villa...- El nudo en la garganta me mató y, una vez más rompí en llanto-...

Bogotá, Diciembre 2010

- Narra Susan -

Un mes ha pasado desde que mi papá se fue, para nunca regresar. Mi corazón sigue con ese dolor, pero intento no demostrar mi tristeza. Mi mamá parece ser fuerte y mis hermanos también. Yo lo aparento, aunque no lo sea. Aun así, ya no lloro en público.
Con la psicóloga solo hablo de los recuerdos con mi papá, pero omito el dolor que siento.

Por otra parte, Villamil y yo seguimos siendo felices. A veces voy a su casa o él viene a la mía. Eso sí, ya no ha habido otro beso desde aquel ¿Por qué? Porque me da pena. Y demasiada...

Último día de clases, para iniciar vacaciones de Navidad. 17 de Diciembre del 2010...

Viernes por la mañana. Último día de clases para iniciar vacaciones. Ya las extrañaba.

Isaza, Alejo, Villa, mis hermanos y yo quedamos en ponernos nuestra sudadera de la amistad, como le llamamos.
Me bañé y me puse unos jeans ajustados de mezclilla junto un suéter rosa de lana y encima mi sudadera blanca. Hacía mucho frío, así que me puse unas botas que generaban calor en mis pies.
Busqué en mi clóset una chamarra, pero no encontré ninguna, así que solo me puse mis guantes y un gorro blanco.
Bajé y ya estaban mis hermanos esperándome para irnos a la escuela...