Secuestro
El hogar de los Lan rodeado de bosque y alejado del pueblo, es un lugar que presume de su tranquilidad y serenidad, al igual que sus habitantes que gozan de paciencia y exagerada cortesía, no es un secreto para muchos que todo aquel que visite el lugar siente su energía tranquila y serena.
-¡¿Cómo es posible?! –Se escuchó un grito desde adentro de la casa Lan -¡Cuando de con él lo castigare por tres años!, ¡No, para toda su vida! –sin embargo en estos momentos se encuentra un tornado de ojos violetas, Jiang Cheng está desesperado caminando de un lado a otro dentro de la sala de estar.
-Tranquilízate, no han pasado ni veinticuatro horas –Intento calmarlo Jin Guanyao, parado a un lado observándolo.
-Te prometo que no voy a dejar que pasen esas veinticuatro horas para salir a buscarlo –Contesto, Jin Ling no apareció desde ayer, busco y hablo a la escuela pero ninguno de sus maestros dio razón de su hijo, no dudo ni un segundo más y hablo a la comisaria, para su suerte fue el mismo Lan Xichen quien atendió su llamada y comento que lo mismo estaba sucediendo con sus hermanos, acordaron verse en su casa para corroborar información, grande fue su sorpresa al enterarse que el Lan sabía exactamente lo que él, nada.
Ahora se encuentra con Jin Guanyao, en casa de los Lan, Lan Xichen se había retirado para mandar una comitiva en busca de los tres chicos.
-Lo sé, solo... -Jin Guanyao no sabe que más decir para calmar a su amigo, la puerta de un carro lo detuvo de seguir hablando.
En cuanto Jiang Cheng vio entrar a Lan Xichen con Nie Mingjue, lo abordo.
-Xichen, ¿sabes algo? –El Lan solo agacho la cabeza y negó, Jiang Cheng palideció y se sentó en uno de los sofás abatido, su amigo se sentó junto a él y le abrazo, Lan Xichen y Nie Mingjue se miraron desalentados.
-No te sientas triste, los encontraremos –Intento reconfortarlo Lan Xichen, Jiang Cheng solo alzo la vista afligido, Jin Ling es su hijo, su amor, su mundo, el motivo por el cual se despierta en las mañanas para seguir trabajando en esa cafetería.
-Lo sé, los encontraremos –Dijo intentando calmarse.
-¡Oigan! –Se escuchó una voz desde la puerta –Wanji y yo vinimos en cuanto pudimos –Todos miraron hacia su dirección, un silencio se instaló en la casa.
-¿Qué haces aquí? –Pregunto Nie Mingjue repentinamente –Digo... Lan Wanji es el hermano de dos de los tres perdidos –Los implicados lo miraron un poco molestos por su falta de tacto, a él no le importo y siguió – pero... y ¿tu? –Curiosos todos voltearon a observarlo de nuevo esperando una respuesta
-¿Qué dices? –Pregunto un ofendido Wei Wuxian –Son mis alumnos...además Wanji me pidió venir –dijo mirando al mencionado.
-Es eso ¿cierto?, hermano –pregunto Lan Xichen.
-Mn... es cierto -Los dos hermanos se miraron por cinco segundos, segundos donde Wei Wuxian intentaba descifrar sus miradas sin disimular.
-Ya veo... con que es así –Dijo Xichen de repente y con esa respuesta, los demás siguieron a lo suyo –Wanji, ¿podemos hablar?-Wei Wuxian quedo asombrado por el lenguaje de miradas y confundido por el hecho de poder comunicarse básicamente sin hablar, - ¿De que van hablar si no necesitan eso?, solo con mirarse ya se dicen todo - pensó Wei Wuxian, Lan Wanji solo asintió –Bien, vamos a mi despacho.
-Buenas tardes –Saludo una voz desde la entrada interrumpiendo el camino de Lan Xichen y su hermano al despacho.
-Pero si es el pequeño Wen Ning –Dijo Wei Wuxian abrazándolo -¿Qué haces aquí? ¿También estas preocupado por tus compañeros? –Le pregunto acariciándole el cabello como si fuera un cachorro.
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El ritual
WerewolfDe todos los demás animales ninguno otro se llevó, solo cargo en sus brazos a lo que a su parecer su instinto instaba a tomar, salió del almacén no sin antes encenderle fuego, así no quedaría nada de su pasado, nada de lo que en su futuro pueda repe...