Bosque de los Secretos - TaeGi

XXXV

Baco comenzó a llorar y junto a él, Hye también, desde que habían movido a los niños a la otra habitación, todo había sido un caos, el alfa gruñó y dió una vuelta en la cama.

- Voy yo.- murmuró al omega que obviamente estaba demasiado dormido incluso como para haber escuchado el llanto de su hijo.

El líder se levantó y fue donde sus hijos que al verle acudieron a él, el alfa solo tuvo que sentarse en el suelo y los cachorros se acurrucaron a su lado, aspirando el aroma de su padre y durmiendose, este suspiró, amaba a sus hijos, con toda su alma, pero Hye ya tenía 4 años y Baco iba a cumplir 1 y no sabían dormir solos aún, estaba algo cansado de eso.

Se apoyó contra la pared, cerrando sus ojos para dormir algo él también, cuando noto a su hija volverse más pesada suspiró, odiaba eso, que ella se transformase en su forma animal solo porque quería acurrucarse con su padre y sabía lo que venía ahora.

La cachorra le golpeó con sus patas y el alfa bufó, riñendola, Hye no hizo caso, siguió golpeándole hasta que el líder cansado se levantó y dejó a Baco en el suelo, transformándose él en su forma animal, echándose en el suelo y suspirando cuando la niña corrió a perderse entre su pelaje para dormir, Baco gateo en su forma humana, riendo y comenzando a jugar con su pelo.

Eran como las 5 de la mañana, estaba en su forma animal dentro de casa con 2 niños usándole como si fuese un peluche gigante, suspiró y comenzó a lamer a su hija, limpiándola, Baco simplemente tironeaba su pelaje.

Paaaron una hora así, usando a su padre como peluche de entretenimiento personal mientras este solo se había tumbado en el suelo, de lado, dejándose hacer mientras trataba de dormir, gruño a su cachorra cuando esta mordió su oreja, castigándola.

El omega entró en la habitación, encontrándose con la escena y riendo, se acercó a Tae y acarició su pelaje, ante las caricias el alfa levantó su cabeza y miro al peliblanco, restregando su cabeza en su pecho, YoonGi rió y acarició a Hye cuando esta acudió en atención.

El gato desvió su atención cogiendo a la cachorra en brazos a pesar de que pesaba bastante, riendo y acariciándola a la misma vez que la alzaba al aire como si fuese un gato.

El líder gruño, levantándose y cogiendo a la cachorra por el pescuezo y metiéndola en la cuna, sabiendo que en su forma animal aún no sabría salir puesto que no lo controlaba bien, se acercó al omega y restregó su cabeza contra la de YoonGi.

- Eres todo un celoso.- rió y acarició sus orejas, sin sentirse intimidado por tener aquel tigre tan grande de pie frente a él, Baco comenzó a llorar de nuevo y el omega centró inmediatamente toda su atención a él, alzándolo en brazos, el alfa volvió a gruñir se transformó en su forma humana y salió de la habitación.

YoonGi le miró extrañado, calmó al niño y se quitó la bata para envolverlo en esta le dejó en el corralito sabiendo que rodeado de su olor dormiría al menos una hora más, miró a Hye quien agotada por intentar salir de la cuna se había quedado dormida.

Se encontró al alfa en su habitación, tirando en la cama boca abajo, tan pronto le vio supo que algo iba mal.

- ¿Tae?

- Vete con tus cachorros.- bufó.- Se ve que son más importantes que tu alfa.- la voz, había algo en la voz que al gato le hizo extrañar, dió unos pasos hacia el alfa que arrepintió cuando el olor que desprendía inundó su fosas nasales, su celo estaba comenzando dos días antes de lo previsto.

- T-tae, tu celo, tienes que irte.- el líder le miró tras esas palabras, sus ojos eran completamente negros y el gato tragó en seco, caminando hacia atrás con cuidado, sin embargo, cuando el alfa se levantó de la cama y le empujó con brusquedad contra la pared, supo que era demasiado tarde.