Capítulo veintiocho.

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—Vamos, cualquiera pensaría que con esa cara no querías verme. —Rió. 

—No esperaba verte aquí en estos momentos. —La voz de Justin sonó seca. 

—Si lo dices por el trabajo, quedatelo, no quiero regresar todavia. 

—Como sea. —Viro los ojos. —¿Que haces aquí? 

—He venido a visitarlos, no quiero ir a lo de Ben aun. No sabe que he llegado. —Se encogió de hombros y camino pasando por Justin. 

Su vista en ese momento cayo en mi. 

Una mirada juguetona y divertida apareció en su rostro. 

—Vale, tenias visitas. —Rió.— Pero sabes que no es de buena educación discutir con ellas. Sus gritos se escuchaban hasta afuera. 

—Eso no importa.  

—Bien. —Sonrio en mi dirección.— Entonces déjame presentarme. 

Intente sonreír de vuelta pero salio algo mas parecido a una mueca. 

Me sentía realmente incomoda. 

—Soy Colton Woods. —Estiro su mano hacia mi. 

Mire su mano y luego a el y con algo de duda la tome. 

—Basta con eso Colton. —Justin dijo ente dientes. —Ella es Paige, pero no importa porque no quiero que te acerques a ella y tampoco que intentes hablarle ¿Vale? 

Soltó una sonora carcajada. —Bieber no te pongas así, no intentare quitártela o algo por el estilo. —Alzo sus cejas con diversión. —Pero tal vez...

 —Cierra tu maldita boca. —Siseo. 

—¿Es tu novia? —Continuo insistiendo. 

Ha estas alturas hasta a mi me estaba jodiendo. 

—No es de tu incumbencia. —Volteo en mi dirección y tomo mi mano con fuerza.— Vamos. —Tiro de mi hacia la entrada. 

—¿A donde? —Frunci el ceño.

 —A cualquier lado, quiero salir de aquí. —Abrio la puerta y me dio el paso para que saliera. 

—Que les vaya bien. —Colton alzo la voz desde adentro. 

Justin lo ignoro.

—Digiste que no podía salir. —Murmure. 

—Conmigo si. —Caminamos hasta el automóvil. —Puedes escoger tu el lugar. 

Sonreí. —¿Enserio? 

Rodó los ojos. —Si. Ahora sube. 

Sonriendo me senté en el asiento del copiloto y no paso mucho para que pusiera el motor en marcha. 

  

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—Digiste que yo podía escoger el lugar. —Bufe mientras caminaba a su lado. 

—Si, pero recordé que no trajiste tanta ropa y claramente necesitas mas. —Me miro. 

—No necesito mas, estoy bien con la que tengo. 

—No seas necia, vamos. —Tomo mi mano y me arrastro a la primera tienda que apareció en nuestro camino. 

—Justin. —Susurre.— No he traído dinero. 

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