Y de pronto el tiempo alrededor de nosotros parece detenerse. Dejo de oír el ruido de la multitud gritando, y solo los latidos acelerados de mi corazón son lo único que llega a mis oídos.
Cierro mis ojos.
Comienza el primer down. Chouji bloquea sin problema a Indra en la primera jugada. Indra sonríe. El segundo down llega, Indra lanza el balón al receptor. Este corre y logra avanzar dos yardas para después ser tacleado por la defensiva de mi equipo. Les quedan dos downs. Nos ponemos en posición. Naruto me mira desde su sitio, asiento con la cabeza y él sonríe.
Comienza el down.
Indra intenta correr con el balón, pero es tacleado por Chouji. Naruto se mueve rápido, la defensiva del equipo contrario intenta recuperar el balón. Naruto se la manda a Gaara, quien a su vez rápidamente lo lanza en mi dirección.
Acabamos de robar el balón, acabamos de joder el down. Corro lo más rápido que puedo, pienso en papá mostrándome el pulgar hacia arriba al terminar el partido. Pienso en lo orgulloso que estará mientras esquivo a los jugadores contrarios que, desesperados, intentan quitarme el balón. Ellos intentan arruinar mis planes.
Sasuke.
Sasuke.
Sasuke.
Eso gritan desde las gradas.
Touchdown.
Arrojé el maldito balón al pasto para después golpearme el pecho. Yo soy el puto rey, no Itachi, no Indra, yo... yo soy el rey.
Pateo el balón después de que todos nos acomodamos. Cuatro puntos para mi equipo y nuevamente comienza la jugada. No logramos mucho, solo un par de yardas. Vuelve a ser el turno del equipo contrario.
Anotación para ellos. Estamos empatados y el empate se mantiene casi hasta el último momento. Quedan no más de ocho minutos para que termine el juego. Es el turno de mi equipo. Estoy cansado, las piernas me tiemblan. He llegado al límite, pero la imagen de papá mostrándome el pulgar hacia arriba es lo único que me mantiene de pie. Armamos la jugada, nos acomodamos en nuestro respectivo sitio, el silbato suena y comienza la última jugada. Intento correr entre los jugadores contrarios, me taclean, Indra roba el balón, corre y anota.
Ellos celebran. Miro en dirección a las gradas, papá se ha ido. Itachi me mira preocupado. Me quito el casco para después arrojarlo al pasto. Ahora están cuatro puntos arriba y en el marcador solo quedan ocho minutos.
No puedo más, incluso respirar comienza a ser doloroso. Nos reunimos. Naruto nos da ánimos. Intento no pensar en la presión que hay sobre mis hombros, intento hacerme a la idea de que me gusta el fútbol, pues he oído que si te lo crees, sucede.
—Vamos a patearle el culo a esos hijos de puta.—grita Lee.
Nos acomodamos nuevamente. Golpeo mis piernas al sentir cómo pierden fuerza. Me muerdo con fuerza el labio inferior al grado de hacerlo sangrar para después colocarme la protección en la boca.
El silbato suena. Indra intenta proteger el balón, pero no lo logra. Naruto le lanza el balón a Shikamaru. Este lo lanza a Gaara. Comienzo a correr después de que Gaara se lo lanza a Lee, quien al recibirlo corre rápidamente. Esquiva a la perfección a los jugadores del equipo contrario. Indra grita furioso. Lee me lanza el balón antes de que lo taclean brutalmente. Lo oigo gritar de dolor, pero no me detengo. Corro dando más del límite y lo logro.
Touchdown.
Mis piernas no pueden más. Me dejo caer de rodillas al pasto, aguantando las ganas de vomitar.
Ellos aún nos ganan por un punto, pero aún quedan tres minutos. Podemos rechazar la patada para elegir una jugada. Eso nos llevaría a la victoria o a la derrota.
